El País ha publicado en su edición de este sábado un bochornoso artículo sobre el crecimiento de iglesias evangélicas en la zona de Carabanchel.
Nadie va al cielo por ser hijo de creyentes.
La escasez de información concreta sobre el acuerdo y su provisionalidad despiertan dudas en sectores del catolicismo y preocupa a entidades de defensa de los cristianos perseguidos.
La sucesión de casos que han salido a la luz en Australia, Chile o Estados Unidos obligan a la Iglesia Católica, a Francisco y a la sociedad, en general, a replantear las acciones ante esta realidad.
El proselitismo se convierte en una etiqueta derogatoria para descalificar a los que quieren evangelizar a sus vecinos porque éstos son no creyentes, aunque puedan ser “miembros” de una iglesia, sea lo que ésta sea para ellos.
En una carta pública, mientras el Papa asiste en Dublín al Encuentro Mundial de Familias donde llamó "crímenes repugnantes" los abusos sexuales del clero en Irlanda y admitió el "fracaso" de la Iglesia católica.
“La Iglesia Católica ha cometido el gran error de identificarse con la cultura irlandesa, por lo que ha quedado atrás cuando la cultura ha cambiado”, dice el director de la Alianza Evangélica Irlandesa, Nick Park.
Jugar con la teología histórica y rediseñar su vocabulario para propósitos actuales nunca es una actividad neutral.
Solamente por medio de la fe en el Dios-hombre, Cristo Jesús, se puede entrar en el Reino de Dios.
La idea de que toda persona es hija de Dios significa que todas serán al final salvas, emborronando la distinción entre naturaleza y gracia, y entre ser una persona creada y una persona salva.
Su pensamiento surge de las fuentes jesuitas, pasando por las influencias latinoamericanas, hasta la matriz del Vaticano II de la Roma contemporánea, sin que haya sido corregido por la Palabra de Dios.
Tendencia opuesta al repunte tanto del protestantismo (en especial en Honduras y Guatemala) como del ateísmo y el agnosticismo en Chile y Uruguay. “En muchos casos la conversión al protestantismo puede ser un paso inicial a la incredulidad y el abandono de la fe”, alerta el evangélico peruano Samuel Escobar.
Según el Papa Francisco, la misión no espera hacer discípulos, se refrena de proclamar verbalmente las Buenas Noticias y es escéptica sobre la apologética.
El liderazgo de la Alianza Evangélica Mundial expresó que, aunque las diferencias principales permanecen, es importante “buscar una agenda común” en la promoción de la libertad religiosa, la distribución de Biblias o en asuntos de justicia social.
Antes de poner al Papa Francisco en la lista de los amigos de la fe evangélica, debemos entender lo que está diciendo en sus propios términos.
Este papa innovador pidió perdón por los crímenes de su Iglesia a los cristianos valdenses mil años después de Pedro Valdo. Esta actitud no es correspondida por todos los católicos romanos.
La hostia es una invención de la Iglesia católica, es un producto de la mente humana, por lo que no puede, de ninguna manera, ser autorizada por Dios.
En este tiempo de la posverdad lo que importa no es la realidad de las posturas, principios o ética personal o institucional. Sólo la apariencia de imagen con los intereses que hay detrás de ella.
La renovación carismática católica celebró su 50ª aniversario, en una vigilia en la que participaron decenas de pastores evangélicos de todo el mundo.
El Espíritu Santo no está presente ni activo en una misión en la cual el pecado y la cruz de Cristo están ausentes.
La estructura teológica tradicional estaba orientada para dar contestaciones de Sí o No. La estructura del post-Vaticano II está más inclinada a recomendar ambos tipos de respuesta en toda clase de cuestiones.
No hay a la vista ni la reforma de la doctrina ni de las devociones. En el relato papal, la reforma significa acelerar el proceso instigado por el Vaticano II.
Francisco volvió a hablar de la figura del reformador protestante en el contexto de la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos.
Bergoglio dice que “no es lícito convencer de tu fe”, palabras que han causado perplejidad a algunos católicos. ¿Dónde están los límites?
Con el Papa Francisco la Iglesia Católico Romana simplemente, se está volviendo más “católica”, o sea, lo acepta y lo absorbe todo, sin perder su naturaleza “Romana”.
El documento “¿Ha terminado la Reforma?” busca reafirmar en nuestra época los dos principales compromisos que son parte integral de la fe cristiana.
Las opiniones vertidas por nuestros colaboradores se realizan a nivel personal, pudiendo coincidir o no con la postura de la dirección de Protestante Digital.