Junto a aguas de reposo

“Siempre parece imposible hasta que se hace.”

Nelson Mandela

“Nunca, nunca, nunca te rindas.”

Winston Churchill

 “La vida es una oportunidad, benefíciate de ella. La vida es belleza, admírala. La vida es un sueño, alcánzalo. La vida es un desafío, enfréntalo. La vida es un juego, juégalo.”

Teresa de Calcuta

“Quizás la vida me ha golpeado, pero todavía no ha logrado quitarme la sonrisa.”

Francis Castel

En la alto de un pliegue de la Cumbre Junghandle, hay un glaciar. La ruta para llegar hasta allí asciende por una cresta empinada y muy estrecha cubierta por todos lados de lomas y piedras sueltas, la subida es realmente agotadora; pero cuando menos se lo espera todo el que quiere llegar al final y cuando cree que no va a poder más, hay un manantial que brota de un terreno blando y cubierto de musgo que atraviesa una preciosa pradera. Es un lugar delicioso para descansar, beber y tomar fuerzas para lo que queda hasta el duro ascenso.

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Meditando en estas cosas recuerdo cuando en el libro “El progreso del peregrino” de John Bunyan, Cristiano llega al pie de una empinada subida llamada Collado Dificultad, en donde había una fuente, bebió, sus fuerzas fueron renovadas y emprendió collado arriba.

Del mismo modo, puede que nosotros estemos subiendo una empinada y cansada colina, collado, cresta empinada... del tipo que sea, y nos sintamos cansados, sin fuerzas para llegar a nuestro objetivo; es entonces cuando se abren ante nuestra vista las maravillosas “aguas de reposo“ citadas en el Salmo 23.  Tal vez nos sintamos desesperanzados y pensamos que no podemos seguir, es entonces cuando nuestro pastor viene a nuestro lado, nos toma en sus brazos para que nos sintamos acariñados y tomemos nuevas fuerzas y así podamos seguir adelante.

Si hoy te sientes cansado y cargado con algo que te impide seguir subiendo, párate y recuerda lo que dice la Escritura en el Salmo 55: 22:

“Entrégale tus afanes al Señor

    y él te sostendrá;

no permitirá que el justo caiga

    y quede abatido para siempre.”

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Si subiendo la montaña crees que no vas a poder seguir... ¡Está Jesús!

Si queriendo llegar a donde quieres, crees que no lo vas a lograr... ¡Está Jesús!

Si te sientes sólo y piensas que nadie se acuerda de ti... ¡Está Jesús!

Si tan sólo necesitas un abrazo para alcanzar la cima... ¡Está Jesús!