El País ha publicado en su edición de este sábado un bochornoso artículo sobre el crecimiento de iglesias evangélicas en la zona de Carabanchel.
Todo comenzó en 1962, cuando fue invitado a unos debates. En la habitación donde se alojaba había un ejemplar del Evangelio de Mateo, cuya relectura le impresionó. En su arrebato, decidió hacer una película.
Como cristiano, Mr. Rogers nos presenta un ejemplo de fe en alguien que no sólo ora por las personas y lee la Biblia de rodillas, sino que cree en un Dios encarnado, que ha tomado nuestro lugar.
Al llegar al final de esta serie, tenemos que darnos cuenta de que lo único que quería Packer era desafiarnos a conocer, amar y pensar sobre Dios.
Solía llorar cuando predicaba. Era extremadamente sensible. En medio de mucha oposición, inició un movimiento de renovación que llevó a muchos a una fe personal y sincera.
Lo mejor de su obra es la conexión tan fuerte que establece entre Cristo y el Espíritu. No podemos separar uno del otro.
El arrepentimiento siempre guarda algo de misterio para el ojo humano. Gracias a Dios, que conoce los corazones.
Packer comprendió que no hay tarea más fundamental para la teología que definir en qué consiste la inspiración y autoridad de la Escritura.
El jugador del Bayern de Múnich ha expresado abiertamente su confianza en Cristo durante la celebración de la Copa de Europa.
Para él la teología no era un nombre, sino un verbo. La definía como la actividad de preguntar y responder a la realidad de Dios como se ha revelado en la Escritura.
Corea del Norte es un régimen hermético y celoso de la adoración a los líderes de la familia Kim, que no permite a sus habitantes la libertad de escoger su fe.
Packer acabó siendo “culpable por asociación”, para ambos lados. Para unos era un fundamentalista, para otros demasiado abierto.
Es en momentos así donde se juega la fe cristiana el todo por el todo. Y, entonces, hay que preguntarse ¿Vale la pena creer en Dios?
Para Packer, la clave de toda paradoja es que hay que mantener los dos por igual, sin hacer ninguna concesión al respecto.
¿Qué tendrá la muerte que parece que lo enturbia todo? Ante ella, un halo de tristeza se apodera de los que (todavía) quedamos vivos.
¡Qué ejemplo el tuyo, Joana!! Nunca lo olvidaré.
El alma del poeta presiente que el Amado galileo está próximo a él, llegando hasta el centro de sus imperfecciones.
La Biblia muestra la locura de confiar en nuestro entendimiento. ¿De dónde creemos que salen todos esos cristianos ufanos de su santidad que juzgan a otros creyentes, poniendo en duda incluso su salvación?
Reflexiones de Frederik Rainer Siemens Dück, sobre la relación entre la fe evangélica y la política en el gran continente americano.
Si Packer se refiere tanto a la santidad, no es porque viera simplemente falta de ella, sino porque creía que había un concepto equivocado de santidad.
La palabra eternidad es la que nos va a ayudar a dar contexto al concepto de “un poco de tiempo”.
Como Packer solía decir, su conversión “no fue nada espectacular”. Al final del mensaje, el predicador le mostró que para entrar en la fiesta había que venir a Cristo.
Sophie Muller, representante de ACNUR, ha visitado las instalaciones de Misión Cristiana Moderna, que está acogiendo y atendiendo a inmigrantes.
No captar la importancia de la Caída, como Schaeffer, es caer en los dos principales errores que tiene el cristianismo contemporáneo.
La prensa nacional apunta a una disputa entre facciones de la propia comunidad como motivo del ataque.
Cerca del 87% de los fallecidos en España por el virus eran mayores de 70 años.
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