sábado, 23 de noviembre de 2024   inicia sesión o regístrate
 
Protestante Digital

 
 

Metamorfosis

Este tiempo deja al descubierto nuestra desnudez y fragilidad frente a un mundo caótico, y nos lleva a un cambio de actitud. Nos lleva del egocentrismo a la humildad, mirando mas allá de nosotros mismos.

TU BLOG 13 DE ABRIL DE 2020 20:32 h
Imagen de Gerd Altmann en Pixabay

Por Edgardo Ramírez Castellanos



Está claro que podemos sacar cosas muy buenas de esta situación global, aprendizajes que nos ayuden a ser mejores personas, mejores prójimos, mejores creyentes…



Hemos podido valorar muchas cosas en medio de esta pandemia, pero me quiero centrar en una en particular. Aquella en la que, como sociedad, tenemos puesta nuestra confianza: el dinero.



Y digo ‘nuestra’ porque precisamente muchos de nosotros, como creyentes, nos hemos dejado arrastrar por lo establecido bajo el poder de la economía, ya sea por una tensión emocional, psicológica o material, pero al final una tensión que nos dicta valores muy altos a la hora de entender la vida.



Muchos de nosotros nos hemos entregado al ritmo frenético de este sistema de poder, muchos hemos permitido que la economía determine nuestra relación con Dios y con los demás, hemos dejado que el valor del dinero establezca nuestro comportamiento, anhelos y aspiraciones, hemos autorizado que sean los conceptos mercantiles los que pongan la base a la imagen que debemos dar.



Esta pandemia mundial del coronavirus nos lleva a todos los niveles sociales e ideológicos a reconocer, una vez más, que la realidad económica que nos envuelve no asegura la dignidad del hombre y de la mujer.



Que la economía de este mundo no puede asegurar la confianza de la humanidad, puesto que la estabilidad económica es pasajera, efímera, fugaz, momentánea, precaria, perecedera, transitoria… y que toda fuerza y confianza puesta en ella también se desvanece.



Solo hay que escuchar y leer las noticias de la situación global económica para ver la evidente fragilidad que ha dejado al descubierto esta pandemia.



Todo el poder de este mundo, toda seguridad y fortaleza en el dinero, se ha visto vulnerable, inconsistente, ante el coronavirus.



Pero el tema aquí, es el siguiente:



¿Qué haremos en medio de esta incertidumbre económica? ¿Qué haremos después de que todo esto haya acabado? ¿Seguiremos igual? ¿Habremos aprendido la lección?



Estamos ante un tiempo único e irrepetible en la historia de España y del mundo para que reconozcamos que nuestra fe está siendo removida, agitada, sacudida para producir cambios. Como creyentes no debemos ver el apocalipsis, sino más bien una oportunidad de cambios, de metamorfosis.



La metamorfosis, como tal, es transformación, es un proceso de renovación que afecta no solo a la forma sino que también a las funciones y modos de vida.



Estamos ante un tiempo de silencio, de guardarnos en nuestra intimidad, de meternos debajo de la higuera para poder escuchar lo esencial de nuestra relación con lo infinito.



Curiosamente el filósofo Sören Kierkegaard hace casi 200 años observaba que el ruido que generaba el crecimiento industrial, el afán de manufactura, el constante entretenimiento y la banalidad de aquel entonces, distraían al hombre y a la mujer. Si yo fuera doctor, dijo Kierkegaard, les recomendaría que “lleven a los seres humanos al silencio. La palabra de Dios no puede escucharse en el ruidoso mundo contemporáneo.”



Por lo tanto, me gustaría que viéramos en este aislamiento social obligatorio, donde la economía de este mundo deja de establecer nuestro ritmo diario, una oportunidad para buscar, hacer, crecer y cambiar en aquello que, precisamente por el afán laboral, no solemos hacer.




  1. Es un tiempo para que nuestra confianza y seguridad deje de buscar refugio y seguridad en las cosas que destaca este sistema de valores.

  2. Es un tiempo para que nuestra mirada se fije en lo eterno y no en lo perecedero.

  3. Es un tiempo que deja al descubierto nuestra desnudez y fragilidad frente a un mundo caótico, y nos lleva a un cambio de actitud. Nos lleva del egocentrismo a la humildad, mirando mas allá de nosotros mismos.

  4. Es un tiempo donde alineamos nuestro espíritu a la voluntad divina y hacemos la verdadera misión, mirando y actuando sobre la necesidad de los más vulnerables.

  5. Es un tiempo donde el mensaje cristiano no se centra en proclamar el fin del mundo, sino en demostrar que NO somos un recurso obsoleto para los problemas de este mundo.

  6. Es un tiempo donde dejamos de ser la sal que no sala, para cumplir nuestra tarea y función como sal en la tierra: conservando y realzando, el mensaje de esperanza para un mundo en desesperanza.

  7. Es un tiempo donde nuestra mente, corazón y espíritu son renovados, transformados para cumplir la función del reino de los cielos aquí en la tierra.

  8. Es un tiempo donde buscamos suplir los vacíos espirituales, emocionales, mentales, personales y familiares que no se pueden saciar con las cosas de este mundo pasajero y que no se pagan con el dinero de nuestro trabajo.

  9. Es un tiempo para que, como creyentes, entendamos que, por encima de cualquier tragedia social, política o económica, en este caso el coronavirus, nosotros tenemos la esperanza en Aquel que llevó la corona de espinas.



No en vano Jesús habló estas palabras a sus primeros seguidores en el desarrollo del sermón de la montaña, advirtiendo de la influencia anticristiana y de lo perecedero de este dios-recurso, que se antepone a la confianza en Dios nuestro Padre celestial y nuestra labor del reino de los cielos aquí en la tierra.



Mateo 6:19-24. “No acumulen ustedes tesoros en la tierra, donde la polilla y el oxido corroen, y donde los ladrones minan y hurtan. Por el contrario, acumulen tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el oxido corroen, y donde los ladrones no minan ni hurtan. Pues donde esté tu tesoro, allí estará también tu corazón. La lámpara del cuerpo es el ojo; así que, si tu ojo es bueno, todo tu cuerpo estará lleno de luz; pero si tu ojo es malo, todo tu cuerpo esta a oscuras. Y si la luz que hay en ti es oscuridad, ¡cuán oscura no será la misma oscuridad! Nadie puede servir a dos amos, pues odiará a uno y amará al otro, o estimará a uno y menospreciará al otro. Ustedes no pueden servir a Dios y a las riquezas.”



 



Edgardo Ramírez Castellanos - pintor y prof. Teología -Valencia (España)



¿Quieres escribir en Tu Blog? Infórmate aquí.


 

 


0
COMENTARIOS

    Si quieres comentar o

 



 
 
ESTAS EN: - - - Metamorfosis
 
 
AUDIOS Audios
 
La década en resumen: teología, con José Hutter La década en resumen: teología, con José Hutter

La conmemoración de la Reforma, las tensiones en torno a la interpretación bíblica de la sexualidad o el crecimiento de las iglesias en Asia o África son algunos de los temas de la década que analizamos.

 
Intervalos: Disfruten de la luz Intervalos: Disfruten de la luz

Estudiamos el fenómeno de la luz partiendo de varios detalles del milagro de la vista en Marcos 8:24, en el que Jesús nos ayuda a comprender nuestra necesidad de ver la realidad claramente.

 
2020, año del Brexit 2020, año del Brexit

Causas del triunfo de Boris Johnson y del Brexit; y sus consecuencias para la Unión Europea y la agenda globalista. Una entrevista a César Vidal.

 
7 Días 1x08: Irak, aborto el LatAm y el evangelio en el trabajo 7 Días 1x08: Irak, aborto el LatAm y el evangelio en el trabajo

Analizamos las noticias más relevantes de la semana.

 
FOTOS Fotos
 
Min19: Infancia, familia e iglesias Min19: Infancia, familia e iglesias

Algunas imágenes del primer congreso protestante sobre ministerios con la infancia y la familia, celebrado en Madrid.

 
X Encuentro de Literatura Cristiana X Encuentro de Literatura Cristiana

Algunas fotos de la entrega del Premio Jorge Borrow 2019 y de este encuentro de referencia, celebrado el sábado en la Facultad de Filología y en el Ayuntamiento de Salamanca. Fotos de MGala.

 
Idea2019, en fotos Idea2019, en fotos

Instantáneas del fin de semana de la Alianza Evangélica Española en Murcia, donde se desarrolló el programa con el lema ‘El poder transformador de lo pequeño’.

 
VÍDEOS Vídeos
 
Héroes: un padre extraordinario Héroes: un padre extraordinario

José era alguien de una gran lealtad, la cual demostró con su actitud y acciones.

 
Programa especial de Navidad en TVE Programa especial de Navidad en TVE

Celebración de Navidad evangélica, desde la Iglesia Evangélica Bautista Buen Pastor, en Madrid.

 
Primer Congreso sobre infancia y familia, primera ponencia Primer Congreso sobre infancia y familia, primera ponencia

Madrid acoge el min19, donde ministerios evangélicos de toda España conversan sobre los desafíos de la infancia en el mundo actual.

 
 
Síguenos en Ivoox
Síguenos en YouTube y en Vimeo
 
 
RECOMENDACIONES
 
PATROCINADORES
 

 
AEE
PROTESTANTE DIGITAL FORMA PARTE DE LA: Alianza Evangélica Española
MIEMBRO DE: Evangelical European Alliance (EEA) y World Evangelical Alliance (WEA)
 

Las opiniones vertidas por nuestros colaboradores se realizan a nivel personal, pudiendo coincidir o no con la postura de la dirección de Protestante Digital.