Final de la carretera de la muerte

Pongo en orden los significados posibles, las implicaciones, de andar y observar este camino estrecho. Dificultades. Pesados pasos bajo un sol crepitando. Poesía árida. Recovecos. Huellas de pisadas erosionando continuamente el suelo. Señales de caídas. Cálidos momentos de decisión. Fallos enormes, y pequeñas victorias. Providencia invisible, viento levantando nubes de polvo, de las que dejan escozor en los ojos desacostumbrados. Trémulos horizontes anticipando nuevos horizontes.

Preguntarse una y mil veces si merece la pena el camino complicado. Resollar rendido, despertar sediento. Llenarse los pulmones de aire, a bocanadas, mientras haya tiempo.

Hoy es un día de poco tráfico. Hasta podría calificársele de rutinario. Uno de los hombres lee el periódico, crucigramas resueltos para ser exactos. Es otra forma de escoger el camino fácil. Lee titulares sobre accidentes ocurridos hace poco en esta carretera. Luego otro sobre las manchas solares. Y sobre el partido de fútbol, vencidos de nuevo por Brasil.

Las ruedas chirrían. Rozamos el abismo, que ya no es tan abismo. Aunque siguen intimidando los bordes del lugar angosto, franqueados por matas y árboles silvestres, indomables. Corazones bombeando savia, abriendo raíces nuevas en el camino viejo; otra vez, angosto. Pasan sin avisar unas cuantas llamas. Al fondo vibra tras el cristal del coche cumbres nevadas ayer, hoy y siempre.

Nadie canta. Llegamos al final de la carretera una vez dejamos atrás el enésimo poblado, artificial a su modo. Salimos de la muerte, entre una niebla, aunque en el fondo es algo que suele suceder cada día.

Hay caminos que rehacer, quedan montones de cruces consumados por soñar. Es necesario dejar cargas a un lado. Cuando uno se gira y ve el recorrido, siempre se aprecian nubes esperando. Y la tierra es de un color ocre intenso…

Todo este ancho, viejo mundo con forma de espejismo.

	Artículos anteriores de esta serie:
	1		Carretera de la muerte
	2		Hay que regresar al sur
	3		El valle de la Luna
	4		Olas de mercurio