Era una de esas mañanas en las que la vida me estaba sacudiendo con fuerza, cuando recibí una preciosa postal por parte de una amiga muy querida; estoy segura de que ella no tenía ni la menor idea de lo que yo estaba atravesando, pero el Señor habló a mi vida como sólo él puede hacerlo a través de algo bonito que sólo yo supe valorar y comprender.

Aquella postal, retrataba un bello cesto lleno de flores reposando tranquilamente sobre un tronco fuerte y firme, y debajo corría la corriente de un río que bajaba con fuerza. Creo que otra persona simplemente vería lo bonito de la escena, pero nadie sabrá jamás todo lo que yo pude percibir a través del Espíritu Santo que mora dentro de mí.

Un torrente de aguas turbulentas puede arrastrar todo a su paso, pero la bondad, la fe en Dios, nuestra capacidad de perdón, y todo lo bueno que permitamos que nuestro Dios haga que albergue en nuestro corazón, es como una semilla que podemos plantar en medio de esa tormenta. Es como una luz que brilla en la oscuridad, la fuerza que puede guiar nuestro camino en medio de la adversidad y la esperanza que nos impulsa a seguir adelante. Cada acto de bondad, fe, amor, compasión y perdón que sembramos, es como una piedra lanzada al agua, creando círculos concéntricos que se extienden cada vez más lejos. Con cada gesto amoroso, estamos construyendo un futuro mejor para todos, un futuro en el que el amor de Dios hecho carne en el nuestro propio y la compasión, sean la moneda de cambio en nuestras vidas. Fue entonces cuando golpeó con mucha fuerza dentro de mi corazón la mítica, inolvidable y preciosa canción de Simon y Garfunkel:“Puente sobre aguas turbulentas” 

Permitid que os deje algunas frases que tocaron mi corazón en este sentido:

“La valentía no es la ausencia de miedo, sino la capacidad de enfrentarlo y seguir adelante.”

“La gratitud es el puente que une nuestro pasado con nuestro futuro, y nos enseña a valorar lo que tenemos en el presente.”

“La compasión es la cualidad que nos permite ver la humanidad en los demás y actuar desde el corazón.”

“La sabiduría es el fruto de la experiencia y el aprendizaje, y nos guía en cada paso que damos en la vida.”

Y volviendo a la canción que tocó mi corazón, es una canción referida a la amistad, y habla de que siempre vas a estar ahí por quien sea, por alguien a quien quieres bien y ves que lo está pasando mal, un ofrecimiento a valorar a la otra persona y a ofrecerle tu apoyo incondicional. Os dejo una traducción del inglés que me parece buena:

“Cuando estés abajo y afuera, cuando estés en la calle, cuando la noche cae tan fuerte, te consolaré. Tomaré tu fuerte cuando llegue la oscuridad y el dolor esté por todas partes, como un puente sobre aguas turbulentas. Voy a acostarme. ¡Navega alma de plata! Ha llegado el momento de brillar. Todos tus amores están en camino, ¡mira como brillan! Si necesitas un amigo, estoy navegando justo detrás, como un puente sobre aguas turbulentas. Te abrazaré la mente, como un puente sobre aguas turbulentas.... Te abrazaré la mente como un puente sobre aguas turbulentas. ¡Te aliviaré la meta!

Hace un par de semanas, en medio de esas aguas turbulentas, escribí un poema, un poema nacido del corazón y de mi relación con mi Señor, aquel que puede tornar la más profunda tormenta en la calma y paz más absoluta...

Se llama calma

Me ha costado mucho conseguirla,

porqué no es fácil entre muchos vientos.

Entre mares alzados y entre luchas duras,

conseguí la calma entre tus brazos tiernos.

Esos brazos que enredan con mucha dulzura,

esas fuertes amarras que dan paz y ternura;

¡conseguí la calma, el silencio del alma,

Señor de mi vida que cuidas mi barca!.

He pasado tormentas, temporales, aguas…

y he creído por veces que ya más no podría;

pero tú siempre llegas a tiempo y en calma,

consiguiendo empapar de tu paz toda mi alma.

Y hoy grito en susurros todo lo que te amo

y le digo al mundo que amo tu beso.

Siempre estás conmigo y nunca abandonas

¡Dios de mis entrañas, mi amor y mi verso!.

Y sigo en tu calma cruzando los mares,

y sigo en tu calma con mi rostro al viento.

Voy hacia mi Patria, mi puerto seguro

¡Señor de mi calma, mi amor y mi beso!

Beatriz Garrido

Y es aquí cuando vienen a mi alma los textos de la Escritura:

“Porque yo Jehová soy tu Dios,

quien te sostiene de tu mano derecha,

y te dice: No temas, yo te ayudo.”  (Isaías 41: 13)

“En el día que temo, Yo en ti confío.” (Salmo 56: 3)

“Gustad, y ved que es bueno Jehová;

Dichoso el hombre que confía en él.”  (Salmo 34. 8)

Y termino con la canción del principio... mítica, inolvidable y preciosa...... En principio no es cristiana, pero sí lleva implícitos dentro muchos preciosos valores auténticamente cristianos, y es mi deseo que si tal vez os encontráis como los discípulos en la barca en medio de una profunda tempestad, podáis experimentar su poder y su gloria al escuchar gritarle al viento y a las olas..... ¡CALLA, ENMUDECE! Os aseguro que en vuestras vidas se hará la calma, igual que se hace en la mía.

[analysis]

[title]Por un año más[/title]

[photo][/photo]

[text]¡Protestante Digital te necesita! Tenemos por delante un gran reto económico. Por eso, hoy te invitamos a ser parte comprometida de esta misión y desafío para asegurar y potenciar la continuidad de Protestante Digital y Evangelical Focus en 2024.

Puedes encontrar más información en apoya.protestantedigital.com.

[/text][/analysis]