Subyace dentro de mi corazón desde hace bastante tiempo el tema de la humildad sincera y no fingida, algo de lo que se nos habla largo y tendido en diferentes lugares de la Biblia.
“Cuando pierdas no digas nada. Y cuando ganes di aún menos. Sé humilde en tus victorias y elegante en tus derrotas. Qué hablen los demás.”
Ignacio Novo Bueno
“Cuanto más grandes somos en humildad, más cerca estamos de la grandeza”.
Rabindranath Tagore
“Solo es grande en la vida quien sabe ser pequeño”.
José Ángel Buesa
Marta Ortega se había mantenido en un lugar discreto, pero abandonó sin pretenderlo el anonimato, cuando se supo que era la hija del fundador de Inditex. Había comenzado a trabajar en la empresa desde abajo, sin ningún tipo de privilegio sobre cualquier otro empleado; aunque su currículum podría haberla levantado a lo más alto en una selección de personal al uso convencional. Marta fue formada en centros educativos de élite de Londres y Suiza, políglota y cosmopolita, pero con unas fuertes raíces en la tierra que la vio nacer, la misma que la mía, nuestra preciosa Galicia; hoy se ha convertido en una de las mujeres más poderosas del mundo. Después de más de tres lustros en distintos puestos de la compañía, a sus 37 años asumió el reto de presidir, por méritos propios, el inmenso conglomerado textil.
[ads_google]div-gpt-ad-1623832500134-0[/ads_google]
Marta es hija única de Flora Pérez Marcote y de una de las personas más ricas del mundo, Amancio Ortega. Su madre trabajó en una de sus tiendas. Tiene dos medios hermanos Sandra y Marcos, del primer matrimonio de su padre con Rosalía Mera.
De pequeña tuvo una institutriz británica, Brigitte, que además de disciplina le inculcó su pasión por los caballos. Durante su juventud participó en numerosos concursos hípicos, afición compartida con su padre propietario del hipódromo “Casa Novas”.
Tras licenciarse, trabajó para la empresa Inditex en la tienda londinense de Zara situada en el barrio de Chelsea, así como en otras sedes internacionales y diferentes departamentos de la empresa.
Permitid que os deje tres estupendas frases, que en diferentes momentos pronunció esta mujer a la que personalmente admiro mucho:
“La primera semana de trabajo en Zara pensé que no iba a sobrevivir”.
“Siempre he dicho que dedicaría mi vida a desarrollar el legado de mis padres, mirando al futuro, pero aprendiendo del pasado”.
“Me siento profundamente honrada y comprometida por la confianza que se ha depositado en mí, y enormemente ilusionada por el futuro que entre todos vamos a acometer”.
Me encanta Marta Ortega por multitud de razones, y creo que puedo aprender mucho de ella; la he tomado como referente de humildad, buen hacer, de no ir por la vida pavoneándose, y de conseguir las cosas por mérito propio; además, he de confesar que me encanta que sea mujer y de mi misma tierra.
Independientemente de tomar una biografía muy especial para mí, detrás de todo ello, subyace dentro de mi corazón desde hace bastante tiempo el tema de la humildad sincera y no fingida, algo de lo que se nos habla largo y tendido en diferentes lugares de la Biblia.
Lo primero que veo en la Escritura, a la vez de lo más grande, es el ejemplo de Jesús, dice la Palabra de Dios:
“Quien, siendo por naturaleza Dios, no consideró el ser igual a Dios como algo a qué aferrarse. Por el contrario, se rebajó voluntariamente, tomando la naturaleza de siervo y haciéndose semejante a los seres humanos. Y al manifestarse como hombre, se humilló a sí mismo y se hizo obediente hasta la muerte, ¡y muerte de cruz! Por eso Dios lo exaltó hasta lo sumo y le otorgó el nombre que está sobre todo nombre, para que ante el nombre de Jesús se doble toda rodilla en el cielo y en la tierra y debajo de la tierra, y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre.” (Filipenses 2:6-11)
[ads_google]div-gpt-ad-1623832402041-0[/ads_google]
Podría dejarlo aquí y sobraría todo lo demás, pero quiero dejar con vosotros otro texto de la Escritura que ronda y ronda en mi cabeza en los últimos tiempos:
“No te jactes de ti mismo; que sean otros los que te alaben”. (Proverbios 27:2)
¡Pues un olé bien fuerte por ti, Marta; te lo mereces!
Pero muy por encima de todo lo dicho, mi más profundo agradecimiento amado Señor Jesús, por todo lo que hiciste por mí, abandonaste toda tu gloria y te hiciste como uno de nosotros, viviste como “el hijo del carpintero” y entregaste tu vida en el monte Calvario de la forma más cruel, y tan solo por amor, por amor a todos nosotros.
Hoy quiero renovar mi entrega y pacto contigo, te amo con todo mi corazón y deseo serte fiel y servirte… hasta el fin de mis días.
Si tú aún no lo has hecho, te invito a ir a los pies del Rey de la gloria que murió para darte la vida.
La conmemoración de la Reforma, las tensiones en torno a la interpretación bíblica de la sexualidad o el crecimiento de las iglesias en Asia o África son algunos de los temas de la década que analizamos.
Estudiamos el fenómeno de la luz partiendo de varios detalles del milagro de la vista en Marcos 8:24, en el que Jesús nos ayuda a comprender nuestra necesidad de ver la realidad claramente.
Causas del triunfo de Boris Johnson y del Brexit; y sus consecuencias para la Unión Europea y la agenda globalista. Una entrevista a César Vidal.
Analizamos las noticias más relevantes de la semana.
Algunas imágenes del primer congreso protestante sobre ministerios con la infancia y la familia, celebrado en Madrid.
Algunas fotos de la entrega del Premio Jorge Borrow 2019 y de este encuentro de referencia, celebrado el sábado en la Facultad de Filología y en el Ayuntamiento de Salamanca. Fotos de MGala.
Instantáneas del fin de semana de la Alianza Evangélica Española en Murcia, donde se desarrolló el programa con el lema ‘El poder transformador de lo pequeño’.
José era alguien de una gran lealtad, la cual demostró con su actitud y acciones.
Celebración de Navidad evangélica, desde la Iglesia Evangélica Bautista Buen Pastor, en Madrid.
Madrid acoge el min19, donde ministerios evangélicos de toda España conversan sobre los desafíos de la infancia en el mundo actual.
Las opiniones vertidas por nuestros colaboradores se realizan a nivel personal, pudiendo coincidir o no con la postura de la dirección de Protestante Digital.
Si quieres comentar o