sábado, 6 de julio de 2024   inicia sesión o regístrate
 
Protestante Digital

 
 

De cero a cien en una pisada

No recibimos ni la milésima parte de la bendición que Dios quiere darnos, el vértigo de la efectividad de esa pisada de acelerador, simplemente porque no estamos dispuestos a obtenerla.

EL ESPEJO AUTOR Lidia Martín 27 DE SEPTIEMBRE DE 2014 20:49 h
velocidad

Una de las cosas que más me llama la atención del Evangelio, y espero decirlo de forma que no parezca irreverente ni moleste a nadie, es que es curioso. Asumo que probablemente no es, desde luego, uno de los calificativos más habituales para referirse a él, pero no deja de ser cierto, al menos tal y como lo veo, por muy extraño que parezca el adjetivo en este caso.



Me resulta curioso por muchas razones, pero la principal es probablemente que sus páginas, sus relatos, los episodios que se narran y todo lo que lo rodea, están llenos de golpes de efecto. El impacto espera a la vuelta de cada esquina: siempre sucede algo que uno no espera. El Evangelio es pura sorpresa.





  • ¿Quién espera con un mínimo de sentido común que el Dios del Universo, que no tiene necesidad de nada ni de nadie porque Él es poseedor y sustentador de todas las cosas, pueda dignarse siquiera a mirarnos y mucho menos a tener un genuino interés en nosotros o en nuestros asuntos? Sorpresa es la mínima reacción posible ante tal maravilla…




  • ¿Quién hubiera sido capaz de diseñar un plan de salvación en el que el Hijo del mismísimo Dios viniera a humanarse y a pagar una deuda que no es Suya? Sorpresa produce la creatividad y capacidad de entrega de tal Dios y que no nos lancemos corriendo a acogernos a tal opción…




  • ¿Puede entenderse de alguna forma que Aquel que tiene todo el derecho a cobrarse la deuda pretenda pagarla, pero además a través de la forma con mayor escarnio posible sobre Su persona, en vez de sobre la nuestra? Sorpresa y agradecimiento son dos conceptos que en este caso, van juntos y que nos asombran por lo poco común del motor que los mueve: el amor.




  • ¿Cómo es posible que Dios prefiriera la cruz para Su Hijo en vez de un simple chasquido de dedos? Sorpresa y maravilla para nosotros, que hemos sido liberados de tener que pagar nuestra deuda en esos términos, sorpresa también por un gesto de amor que nunca será comparable a ningún otro.




  • ¿Podremos entender algún día que el Evangelio siga estando asociado al respeto profundo del Creador por la libertad de decisión de Sus criaturas? Sorpresa ante la realidad de que un Dios Todopoderoso nos atraiga hacia sí, no por la fuerza, sino por amor infinito.




  • ¿Cómo comprender con suficiente profundidad que Dios no sólo nos salva de la destrucción y separación eternas, sino que además nos salva de la realidad de nosotros mismos cada día, nos perdona y, con Su perdón, nos hace pasar de cero a cien en una pisada de acelerador, sin que haya un mecanismo racional que pueda explicarlo? Sorpresa ante Su poder y Su amplia gracia, que no es gracia “a secas” sino gracia sobre gracia, para gloria de Su nombre. Puro amor… que sorprende.





En la decisión por Cristo se encierra uno de los más grandes misterios: cómo pasar de ser un paria, un apátrida, un despojo frente a los ojos de un Dios que no puede aceptar el pecado, a ser, de pronto, en cuestión de una décima de segundo, un hijo amado, protegido y colocado con cuidado en un lugar de privilegio en el corazón de Dios, una persona que ha sido repuesta en esa condición de dignidad tras haber despreciado hasta el extremo a Quien le dio la vida, alguien que lleva el ropaje y el anillo de su Padre y por quien Dios mismo declara que entregará hombres, que pagará rescate, incluso de naciones por esa vida (Isaías 43). Si estas cosas no nos producen sorpresa, impacto, cierta desorientación, incluso, verdaderamente estamos errados, absortos en nuestro propio ombligo y habremos dado por hechas demasiadas cosas que, aunque son un regalo, han sido obtenidas por un alto precio que no nos duele lo suficiente.



¡Qué cierto es aquello de que no solemos apreciar demasiado lo que no pagamos! Rápidamente convertimos el gesto generoso hacia nosotros en la obligación del otro, quitándole en un segundo todo su valor. Lo hacemos también cuando el gesto y sus consecuencias no nos zarandean lo suficiente. Y más aún cuando el “gesto” del que se trata ha cambiado el curso de los tiempos, como es el caso.



El ser humano de nuestra generación y nuestro tiempo ha perdido la capacidad de sorprenderse y, por ende, también la de emocionarse. Lástima que a los cristianos no nos pase algo distinto. Esto es algo que, por ejemplo, no le sucede a los niños, quizá porque aún no se han cargado de prejuicios y no les ha dado tiempo a dejarse sorprender por las “bondades y placeres” de esta vida. Pareciera que los mayores venimos de vuelta de todo y, al fin y al cabo, el Evangelio no es más que una simple opción entre otras muchas. ¡Qué triste conclusión para la más increíble gesta de todos los tiempos!



Hemos convertido las buenas noticias de Dios y Su salvación en una revolución a menudo sólo conceptual, pero que no transforma nuestras vidas lo suficiente. La pisada instantánea que hace pasar de cero a cien la hemos asumido de una forma estrictamente teórica, la conocemos, la predicamos y la expresamos con convicción, pero ya no nos produce sorpresa y tantas veces ni siquiera esperamos que ocurra en esta tierra en sentido literal. Sin embargo, creo firmemente que no recibimos ni la milésima parte de la bendición que Dios quiere darnos, el vértigo de la efectividad de esa pisada de acelerador, simplemente porque no estamos dispuestos a obtenerla. Como un buen amigo expresó cierta vez en su predicación, no se nos puede servir sopa si nuestro plato está a menudo boca abajo.



¿Buscamos la adrenalina y la velocidad en lugares equivocados? ¿Venimos tal vez demasiado estimulados por las “sorpresas” que este mundo nos ofrece y hemos infravalorado los tesoros y delicias que Dios nos trae en términos que son mucho más que sensoriales? Quizá es momento de dejarse atrapar, cautivar y convencer en un plano menos intelectual y más vivencial por la novedad grandiosa e intemporal del Evangelio, por la realidad de un Dios transformador, creativo y maravilloso en Sus planes y formas, que nos cautiva con la sorpresa de Su amor… cuando menos lo esperábamos. 


 

 


0
COMENTARIOS

    Si quieres comentar o

 



 
 
ESTAS EN: - - - De cero a cien en una pisada
 
 
AUDIOS Audios
 
La década en resumen: teología, con José Hutter La década en resumen: teología, con José Hutter

La conmemoración de la Reforma, las tensiones en torno a la interpretación bíblica de la sexualidad o el crecimiento de las iglesias en Asia o África son algunos de los temas de la década que analizamos.

 
Intervalos: Disfruten de la luz Intervalos: Disfruten de la luz

Estudiamos el fenómeno de la luz partiendo de varios detalles del milagro de la vista en Marcos 8:24, en el que Jesús nos ayuda a comprender nuestra necesidad de ver la realidad claramente.

 
2020, año del Brexit 2020, año del Brexit

Causas del triunfo de Boris Johnson y del Brexit; y sus consecuencias para la Unión Europea y la agenda globalista. Una entrevista a César Vidal.

 
7 Días 1x08: Irak, aborto el LatAm y el evangelio en el trabajo 7 Días 1x08: Irak, aborto el LatAm y el evangelio en el trabajo

Analizamos las noticias más relevantes de la semana.

 
FOTOS Fotos
 
Min19: Infancia, familia e iglesias Min19: Infancia, familia e iglesias

Algunas imágenes del primer congreso protestante sobre ministerios con la infancia y la familia, celebrado en Madrid.

 
X Encuentro de Literatura Cristiana X Encuentro de Literatura Cristiana

Algunas fotos de la entrega del Premio Jorge Borrow 2019 y de este encuentro de referencia, celebrado el sábado en la Facultad de Filología y en el Ayuntamiento de Salamanca. Fotos de MGala.

 
Idea2019, en fotos Idea2019, en fotos

Instantáneas del fin de semana de la Alianza Evangélica Española en Murcia, donde se desarrolló el programa con el lema ‘El poder transformador de lo pequeño’.

 
VÍDEOS Vídeos
 
Héroes: un padre extraordinario Héroes: un padre extraordinario

José era alguien de una gran lealtad, la cual demostró con su actitud y acciones.

 
Programa especial de Navidad en TVE Programa especial de Navidad en TVE

Celebración de Navidad evangélica, desde la Iglesia Evangélica Bautista Buen Pastor, en Madrid.

 
Primer Congreso sobre infancia y familia, primera ponencia Primer Congreso sobre infancia y familia, primera ponencia

Madrid acoge el min19, donde ministerios evangélicos de toda España conversan sobre los desafíos de la infancia en el mundo actual.

 
 
Síguenos en Ivoox
Síguenos en YouTube y en Vimeo
 
 
RECOMENDACIONES
 
PATROCINADORES
 

 
AEE
PROTESTANTE DIGITAL FORMA PARTE DE LA: Alianza Evangélica Española
MIEMBRO DE: Evangelical European Alliance (EEA) y World Evangelical Alliance (WEA)
 

Las opiniones vertidas por nuestros colaboradores se realizan a nivel personal, pudiendo coincidir o no con la postura de la dirección de Protestante Digital.