¡Vuela alto! ¡No seas gaviota en el mar!

Recordáis la vieja canción de Julio Iglesias qué decía en una de sus partes, “vuela amigo!, vuela alto!, no seas gaviota en el mar!, la gente tira a matar cuando volamos muy bajo”?....

Los expertos en aves saben que estas vuelan mucho más alto en sus vuelos migratorios que en sus vuelos locales. Hay tres razones para que sea así. En primer lugar tienen una visión mucho más extensa y pueden ubicar más fácilmente sus puntos de referencia; por otro lado, están fuera del sendero de las aves de rapiña y, en último lugar, están libres de obstáculos; por tanto su vuelo es más que veloz debido a que la atmósfera se encuentra más depurada.

Esto me encanta y me recuerda a mi propio vuelo delante del Señor, cuanto más alto puedo volar, voy a ver con muchísima más claridad y podré ser capaz de emprender el plan de Dios para cada momento de mi vida con una percepción muchísimo más nítida, creo que podría decir diáfana y preciosa que me permite descansar en Él cuando me agobian los porqués.

Hay cosas que, en última instancia, creo que vienen del mismísimo infierno, como son una especie de mazmorras en las que quiere encerrarnos el enemigo de nuestras almas; cosas como la duda, el miedo, la angustia…..a veces incluso el pavor.

Una persona desolada y negativa, termina contagiando a todo su entorno y los “dardos” de todos sus enemigos le van a dar de pleno en ese “vuelo bajo”.
Me encanta Nehemías……soñaba en grande!!.....volaba muy alto!!.....si!, lo sé!!.....todo eran obstáculos, uno detrás de otro. Lo tenía todo en contra; pero no se rindió cuando vio la tristeza de lo que le rodeaba.

Primero se sentó, después lloró, oró por muchos días. Pero no se quedó ahí lamiéndose las llagas de su propio dolor. Dice la Escritura que después de esto comenzó a actuar, comenzó a poner en práctica su sueño alto, su vuelo alto y contra viento y marea, en relativamente poco tiempo, vio realizadas completamente sus esperanzas.

Me gusta muchísimo la gente como Nehemías, no actuó a tontas y a locas sin encomendarse al Señor, no fue tan inconsciente como para no darse cuenta de lo que tenía por delante. Pero después de un tiempo a solas con su Padre, se levanta, “se lava la cara”, se renueva y con el rostro al frente y muy cerca de Su Dios, comienza a actuar y me imagino la cara de satisfacción que podía percibir todo el que lo pudiera ver, además del profundo agradecimiento a su Dios.

Hay dos Salmos del rey David que son favoritos míos, son dos Salmos escritos después de las más fuertes tormentas de su vida, el 23 y el 91. El primero, Salmo por excelencia, creo que dice tanto que no cabría en un libro….. La experiencia de vivir completamente apegado a su Señor y todo lo que conlleva…..provisión, protección, promesas de liberación…..es una de las más grandes piezas, no sólo de la Palabra de Dios; sino de la literatura de todos los siglos.

El Salmo 91 es precioso, es un poco más de lo mismo; aunque de un modo diferente y también delicioso…..cercanía, protección, cuidado divino, promesas y promesas y más promesas preciosas para el hijo fiel de Dios que se esconde bajo Sus maravillosas alas.

En uno de sus más duros momentos escribió “el cantor de Israel”; “Oh si tuviera alas como de paloma, volaría lejos y reposaría….”. Tuvo que pasar por dolores muy profundos para llegar a esta conclusión. En otro momento escribió; “Escapa al monte cual ave”…..

La paloma no vuela demasiado alto, quizá David estaba demasiado desprotegido en aquellos momentos…el “ave que vuela al monte”, si vuela mucho más alto.

Hoy no quiero volar bajo “cual gaviota en el mar…”, quiero volar alto!, muy alto!!, igual que las aves migratorias…….sobrevolar hoy por encima de las circunstancias o de lo que sea y allí, muy cerca del cielo, la cercanía con mi Dios me inundará, el “aire de Su Espíritu” sostendrá mis alas, mi visión será inmensa como la de las águilas y mi movimiento ágil, continuo, suave y a la vez fuerte. Todo eso me hará sentir una paz y un sentimiento de libertad incomparable….

Estás volando a ras de suelo por alguna razón?...... Deja ya de lamentarte!!...haz como Nehemías…..comienza ya!!..... Escribe y siente igual que el rey de Israel y haz tuyas aquellas palabras……”VUELA AMIGO!1…VUELA ALTO!!!....NO SEAS GAVIOTA EN EL MAR!!....y te aseguro que la bendición de tu Dios te acompañará en tu precioso, delicioso y más que alto vuelo.