El Padre conoce nuestras necesidades incluso mejor que nosotros mismos.

Es fácil saber cuándo se va por buen camino, casi siempre suele ser hacia arriba.

Sabemos que Dios ama la justicia y que ama al inmigrante. Así que nos unimos para dar testimonio de ese Dios.

La tarea central de los Apóstoles consistió en dar cumplimiento a la misión que el Señor Jesucristo les había encomendado personalmente.

Trataremos los simbolismos del amor en una nterpretación alegórica, sin que ello signifique que hagamos una interpretación alegórica del Cantar de Cantares.

La Biblia dice que podemos tener certeza y seguridad porque fue Jesús – no nosotros – quien ganó la salvación por nosotros.

Merece analizarse por qué razones hoy, en muchos sitios, la mujer no ministra como lo hacía en el siglo I. Más teniendo en cuenta al Apóstol Pablo: “En Jesucristo somos uno; (…) ya no hay varón ni mujer”.

La vida cristiana es una batalla y además lo es de manera continua, pero su metodología no es la de los ejércitos humanos sino la del corazón de Dios.

Pero el amor lo cubre todo, todo lo soporta. Y es el elemento esencial para viajar sin sentir el cansancio de los días y las noches; de las noches y los días, por los siglos de los siglos que dura el viaje.

Muchos líderes evangélicos blancos han llegado a la conclusión de que el presidente Trump es el hombre que Dios quiere utilizar en este momento histórico.

En algunas iglesias el diaconado es el primer escalón al obispado. En otras, es una institución separada del sacerdocio. El NT enseña que el sacerdocio universal es el eje de la iglesia de Jesucristo.

Cuando se dice “no os embriaguéis con vino en lo cual hay disolución, antes bien sed llenos del Espíritu”, se hace una invitación a la elaboración onírica inconsciente guiada por el Espíritu de Dios.

Un nuevo relato de Antonio Cárdenas.

Para aquellos que en algún momento de nuestra vida recibimos a Jesús como nuestro Señor y Salvador, la vida tiene otro sentido.

Para ocuparse en la oración y el ministerio de la Palabra los Doce propusieron elegir a siete varones llenos del Espíritu Santo para servir a las viudas. Así nace como servicio de amor la ‘diaconía’ cristiana.

En tiempos de desgracia, de zozobra, de dificultad, de ataque no se me ocurre mejor conducta que la señalada por este negro espiritual.

Reconocemos que necesitamos seguir soñando, seguir creyendo que Dios quiere algo mejor para los Estados Unidos.

No hay poder humano comparable al Evangelio, poder de Dios para salvación de toda persona. Varones y mujeres, al entregarse a Jesucristo, gozan por igual de esta eterna salvación.

Surge la primavera y la esposa se transforma en una paloma. 

Hay victoria en Jesús incluso en las situaciones más difíciles.

Que Dios no desacredita el testimonio de la mujer es tan cierto como que Su Hijo no vino ‘hecho hombre’ desde el Cielo. Nació de una mujer y sin la participación de un varón.

Es Dios mismo y no una criatura a quien debemos agradecer y de quien podemos esperar todo lo bueno.

Jesús no tuvo reparos en incluir a mujeres en el círculo de sus más allegados.

La autora de “Vivo sin vivir en mi” (Teresa de Jesús), se inspiró en un texto de la carta de San Pablo a los Gálatas.

¿Seguirá siendo más fácil comprar un arma de guerra que un vehículo en EEUU?