lunes, 1 de julio de 2024   inicia sesión o regístrate
 
Protestante Digital

 
El Credo Apostólico
 

La vida eterna

Si todo acabara con la muerte seríamos los más desgraciados del Universo. Pero no es así.

ENFOQUE AUTOR Juan Antonio Monroy 29 DE MARZO DE 2017 07:17 h

Aquí terminan los comentarios al Credo apostólico. Son un total de veinticuatro exposiciones bíblicas sobre temas eminentemente doctrinales. El último de estos temas tiene que ver con la vida eterna. El Credo termina con esta frase: "Creo... en la vida perdurable, amén".



Para el creyente hay una vida perdurable. Existe una vida eterna a donde desembocamos tras la muerte. Esta vida no cumple los objetivos de Dios ni satisface nuestros anhelos de inmortalidad.



En la catedral de Toledo, que tan magistralmente describiera Blasco Ibáñez, junto a la Custodia de 200 kilos, de los cuales 16 son de oro puro y el resto de plata dorada; cerca del cuadro pintado por el Greco que representa a los doce apóstoles y que según Gregorio Marañón usó como modelos a doce locos del manicomio, está la lápida mortuoria del Cardenal Puertocarrero, que fue consejero de Carlos II, según explican los guías de turno, esos hombres que todo lo saben. Llama la atención la inscripción que figura en la lápida: "Aquí yace polvo, ceniza y nada". Esta inscripción estaría mejor sobre la tumba de Voltaire o sobre la de Nietzsche, pero no sobre la tumba de un creyente. Porque en la tumba, pese al polvo y a la ceniza, siempre queda "algo"; algo que en el día de la resurrección se transformará en un cuerpo glorificado que vencerá a la muerte, romperá las losas del sepulcro y saldrá triunfante para recibir al Señor en el aire. Son el materialismo y su filosofía negativa los que pretenden limitar nuestra existencia a las profundidades de una tumba tan negra como su misma doctrina. Son los modernos apóstoles del materialismo quienes quieren hacernos creer que la vida del hombre acaba con la muerte, que la vida debe regirse por la llamada filosofía del estómago, sin más preocupación que la de comer, beber y pasarlo bien. El creyente siente que todo su ser se rebela, se subleva ante inscripciones mortuorias que tienen un mensaje de desesperanza, de final. Como hiciera el gran astrónomo francés Camile Flammarion ante la tumba de su amigo Maron, dan ganas de gritar al mundo: "Señores: si esta tumba es el fin último de la existencia, y la última palabra de cuanto es, la creación no tiene entonces sentido, y el Universo infinito, con sus soles y sus lunas, con todos sus seres y todas sus luces y todas sus esperanzas, tendría menos sentido que la acción misma del perro y de la hormiga". En la tumba queda algo más que polvo y ceniza. Tras la tumba queda la esperanza gloriosa de la resurrección, el amanecer de una nueva vida con Dios o la tristeza de una condenación eterna. Si todo acabara con la muerte seríamos los más desgraciados del Universo. Pero no es así. Como Job, el creyente tiene la seguridad de que un día, cuando el fin de los tiempos se acerque, con sus mismos ojos  ha de contemplar  a  Dios, aunque el polvo y la ceniza invadan la tierra.



La promesa de Cristo al ladrón de la cruz: "Hoy estarás conmigo en el paraíso", es la mayor garantía que tenemos de una vida eterna.



Si la vida eterna fuese una mentira, Cristo no habría infundido vanas esperanzas a un hombre que estaba al borde mismo de la tumba. Sus palabras no fueron palabras de consuelo. En la Cruz mantuvo lo que siempre había creído y proclamado: que hay otra vida más allá de ésta. Una de sus más contundentes y claras afirmaciones al respecto es la que transcribe Juan en su Evangelio. Hablando con los discípulos, el Señor les dijo: "No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí. En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros. Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy vosotros también estéis" (Juan 14:1-3).



La casa del Padre es la vida eterna. Allí, las moradas para el creyente son incontables. Y si la eternidad fuera una mentira, si no hubiera cielo, ni Padre, ni posibilidad de seguir  viviendo tras la muerte, Cristo nos lo hubiera dicho. La sinceridad de Jesús no sólo nos convence. También nos abruma.



San Juan asocia la eternidad del Verbo con la Vida eterna. El prólogo del Evangelio que lleva su nombre y el de la primera epístola desarrollan esta verdad. El Verbo, que también es vida, se manifestó para darnos vida eterna y abrirnos el camino que conduce a su posesión. Juan y los demás apóstoles tuvieron la gran fortuna de ser testigos de esta vida. Con sus manos terrenas ellos tocaron, palparon el Verbo de vida eterna.



A un misterio grande sigue otro mayor. Cristo es la vida eterna en Sí mismo, pero es también el medio que a ella nos conduce. Es la fuente de donde el agua brota y el agua viva que apaga la sed. Es la puerta que el Padre abre para darnos paso a la vida eterna. Las palabras de Juan, sencillísimas, al alcance de todas las mentalidades, son de una gran elocuencia: "Dios nos ha dado vida eterna; y esta vida está en Su Hijo. El que tiene al Hijo, tiene la vida; el que no tiene al Hijo de Dios no tiene la vida. Estas cosas os he escrito a vosotros que creéis en el nombre del Hijo de Dios, para que sepáis que tenéis vida eterna, y para que creáis en el nombre del Hijo de Dios" (1ª de Juan 5:11-13).



Como se ve por todos estos pasajes del Nuevo Testamento, los apóstoles de Cristo no tenían dudas de ninguna clase sobre la realidad de la vida eterna. Más allá de la muerte física, cuando sus cuerpos bajaran a la sepultura, continuarían viviendo, espiritualmente conscientes, en !as mansiones eternas. ¡Qué convicción tan alentadora para nosotros!



También nosotros podemos decir, con los autores del Credo apostólico: "Creo en la vida perdurable... Amén".


 

 


0
COMENTARIOS

    Si quieres comentar o

 



 
 
ESTAS EN: - - - La vida eterna
 
 
AUDIOS Audios
 
La década en resumen: teología, con José Hutter La década en resumen: teología, con José Hutter

La conmemoración de la Reforma, las tensiones en torno a la interpretación bíblica de la sexualidad o el crecimiento de las iglesias en Asia o África son algunos de los temas de la década que analizamos.

 
Intervalos: Disfruten de la luz Intervalos: Disfruten de la luz

Estudiamos el fenómeno de la luz partiendo de varios detalles del milagro de la vista en Marcos 8:24, en el que Jesús nos ayuda a comprender nuestra necesidad de ver la realidad claramente.

 
2020, año del Brexit 2020, año del Brexit

Causas del triunfo de Boris Johnson y del Brexit; y sus consecuencias para la Unión Europea y la agenda globalista. Una entrevista a César Vidal.

 
7 Días 1x08: Irak, aborto el LatAm y el evangelio en el trabajo 7 Días 1x08: Irak, aborto el LatAm y el evangelio en el trabajo

Analizamos las noticias más relevantes de la semana.

 
FOTOS Fotos
 
Min19: Infancia, familia e iglesias Min19: Infancia, familia e iglesias

Algunas imágenes del primer congreso protestante sobre ministerios con la infancia y la familia, celebrado en Madrid.

 
X Encuentro de Literatura Cristiana X Encuentro de Literatura Cristiana

Algunas fotos de la entrega del Premio Jorge Borrow 2019 y de este encuentro de referencia, celebrado el sábado en la Facultad de Filología y en el Ayuntamiento de Salamanca. Fotos de MGala.

 
Idea2019, en fotos Idea2019, en fotos

Instantáneas del fin de semana de la Alianza Evangélica Española en Murcia, donde se desarrolló el programa con el lema ‘El poder transformador de lo pequeño’.

 
VÍDEOS Vídeos
 
Héroes: un padre extraordinario Héroes: un padre extraordinario

José era alguien de una gran lealtad, la cual demostró con su actitud y acciones.

 
Programa especial de Navidad en TVE Programa especial de Navidad en TVE

Celebración de Navidad evangélica, desde la Iglesia Evangélica Bautista Buen Pastor, en Madrid.

 
Primer Congreso sobre infancia y familia, primera ponencia Primer Congreso sobre infancia y familia, primera ponencia

Madrid acoge el min19, donde ministerios evangélicos de toda España conversan sobre los desafíos de la infancia en el mundo actual.

 
 
Síguenos en Ivoox
Síguenos en YouTube y en Vimeo
 
 
RECOMENDACIONES
 
PATROCINADORES
 

 
AEE
PROTESTANTE DIGITAL FORMA PARTE DE LA: Alianza Evangélica Española
MIEMBRO DE: Evangelical European Alliance (EEA) y World Evangelical Alliance (WEA)
 

Las opiniones vertidas por nuestros colaboradores se realizan a nivel personal, pudiendo coincidir o no con la postura de la dirección de Protestante Digital.