El ‘Brexigate’

Sin duda ha sido uno de los mayores e inesperados impactos que han surgido este año en la vida pública.

Sin ánimo de ser exhaustivo, sí quiero dejar una opinión y análisis a título mera y exclusivamente personal de lo que este suceso supone en aspectos que creo que son importantes:

1.- Ha sido un Referéndum para el que no existía una demanda popular, y que respondía a intereses más bien partidistas y personales.

2.- La campaña en favor y en contra del Brexit ha sido excesivamente agresiva y demagógica (la identidad e independencia nacional, que entiendo no estaban en ningún caso en juego, y los intereses económicos y una parte importante de rechazo al “no británico” como trasfondo).

3.- Es irresponsable tomar una decisión de este calado, con un cambio tan trascendente para el Reino Unido, basándose en este Referéndum, por un pequeño porcentaje de diferencia en el resultado a favor (3% en diferencia porcentual de votos, sin haber llegado al 75% de participación). Más que un ejercicio democrático y popular supone un acto irreflexivo y alocado.

4.- Hay y habrá consecuencias negativas de todo tipo para todas las partes (Reino Unido, Unión Europea, inmigrantes, economía, reacciones favorables de Trump-LePen y cía-, anuncio de independencia de Escocia e Irlanda del Norte, escisión interna de la sociedad británica, y un largo etcétera) originadas por este Referéndum y Brexit.

Por todo ello, entiendo que ha sido un tremendo error, una actuación que no puede verse positivamente desde ninguna perspectiva con consecuencias que van a ser un tsunami social, económico y político de dimensiones que sólo podremos calibrar dentro de muchos meses.

Aunque claro, todo esto es una reflexión opinable y falible, lo que no impide que esté plenamente convencido de ello.

En cualquier caso, como creyente, creo firmemente que Dios tiene el poder absoluto (por encima de las circunstancias y libre albedrío de cada uno de nosotros), y que Él controla la Historia pasada, presente y futura.

Por lo que quienes estamos bajo su manto podemos descansar en su cuidado con cada uno de nosotros. Y eso, en medio de un tsunami, es mucho.

Y sin duda, la paz, reconciliación, diálogo y actitud constructiva pese a todo son el camino a seguir.

En este y en todos los sentidos me uno a las declaraciones de Steve Clifford, Secretario general de la Alianza Evangélica del Reino Unido, tras el resultado del referéndum que ha avalado el “Brexit”.