Como ya se explicó en Protestante Digital, la teoría del Big Bang no ofrece una respuesta a una pregunta que se plantea a menudo en la apologética cristiana: "¿Tuvo el universo un principio, sí o no?".

Me gustaría explicar aquí lo más claramente posible lo que se sabe, lo que se sospecha y lo que no se sabe sobre el Big Bang. Terminaré con algunas consideraciones sobre el uso del Big Bang en la apologética cristiana.

Lo que se sabe

El universo se expande. Eso lo observamos. Al pasar la película al revés, su densidad y su temperatura aumentan. Mientras las leyes de la física que conocemos funcionen, es decir, no se salgan de su zona de validez, podemos deducir unos cuantos fenómenos observables que han sido observados hoy en día¹. La evolución temporal de la distancia entre dos puntos en el espacio puede representarse así esquemáticamente:

En la película del universo al revés, el cosmos llega a un punto, hace unos 14.000 millones de años, en el que es tan denso y caliente que poco se puede decir de él, porque las leyes que conocemos dejan de describir correctamente la realidad. Antes de ese momento, la Relatividad General (RG) se enfrenta al "muro de Planck": tiene que jugar con la Mecánica Cuántica (MC). ¿Y qué pasa entonces? Nadie lo sabe. Así pues, si la RG ofrece una solución para cuando la distancia llega a 0, sabemos que esa solución no es válida cuando la distancia es "0".

Lo que se sospecha

Se sospecha fuertemente que antes de la fase roja hubo una fase de inflación cósmica. Una fase de muy, muy, muy corta duración, durante la cual el universo se habría hinchado vertiginosamente.

¿Por qué sospechamos "fuertemente"? Porque el análisis de la radiación de fondo de microondas es muy coherente con lo que debería haber provocado esta fase inflacionaria. ¿Por qué sólo "sospechamos"? Porque hoy por hoy, el motor de dicha inflación sigue siendo desconocido.

Completaremos así nuestro gráfico, con la fase inflacionaria en verde

Nótese que esta fase inflacionaria todavía no lleva la distancia entre 2 puntos a 0, porque también choca con el muro de Planck².

Lo que no se sabe

Antes de esta fase inflacionaria, nuestra ignorancia es casi total. ¿Por qué? Porque explorar esta época requiere saber cómo juegan juntas la RG y la MC, cosa que nadie sabe. ¿Por qué "casi"? Porque no faltan candidatas al título de Gravedad Cuántica³ , cada una aportando su versión del universo pre-inflacionario. Hasta la fecha, ninguna ha sido puesta a prueba mediante experimentos u observaciones. Por tanto, todas son igualmente especulativas. En consecuencia, las visiones que ofrecen del universo pre-inflacionario son todas igualmente especulativas.

Completaremos así nuestro gráfico, con las dos opciones principales en azul punteado⁴

Como vemos, algunas de ellas sí conducen a un principio, con la distancia entre dos puntos llegando a 0 (y el tiempo "comenzando")⁵. Este es el escenario que Stephen Hawking presentó en su libro Breve historia del tiempo.

Otros escenarios implican un "Gran Rebote", “Big Bounce” en inglés, con un universo anterior que se contrae y luego rebota como una pelota de tenis, en el nuestro. Aunque estas hipótesis son menos conocidas, actualmente son objeto de una intensa investigación, como demuestran los miles de artículos recientes sobre el tema en revistas especializadas.

Reiterémoslo, todos estos escenarios azules son igualmente especulativos.

 

¿Cuándo se produjo el Big Bang?

Para Max Tegmark, pez gordo del MIT, el Big Bang parece haber ocurrido después de la inflación⁶. Al menos eso es lo que escribe en su libro Nuestro universo matemático.

Para otros autores, el Big Bang parece haber ocurrido antes de la inflación⁷ .

Y para un tercer grupo, el Big Bang parece fundirse con ese hipotético instante 0, al que no llega la parte conocida de la historia.

¿Por qué soy tan cauto, con expresiones como "parece", o "al menos en este libro"? Porque los científicos no son muy precisos sobre "cuándo fue el Big Bang", y la prensa aún menos.

¿Cuándo se produjo el Big Bang? En realidad, no importa mucho. Por eso no son muy precisos los científicos. Lo importante es tener claras las grandes líneas. Después de eso, si se produjo al principio de la fase roja, o de la fase verde, o de la fase azul que tiene un principio (la opción de Hawking), depende de ti, y no cambia nada en absoluto los 14.000 millones de años antes mencionados.

En fin, el "Big Bang" tiene más que ver con la historia que acabo de contar que con un momento concreto.

 

Conclusión: el Big Bang en la apologética

El Big Bang es un tema a menudo explotado con fines apologéticos, pretendiendo que supone el principio del universo. El razonamiento va así: si está demostrado que el Big Bang implica que el universo tuvo un principio, entonces “algo”, fuera del universo, tiene que haber causado este principio.

El problema con este argumento, a veces denominado “argumento cosmológico Kalām”, es que, como vimos, no está en absoluto demostrado que el Big Bang fuera un principio. Simplemente, no lo sabemos.

Semejante argumentación resulta en una apologética débil, al menos, por 2 razones:

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  Descansa en un argumento equivocado. ¿De verdad ha demostrado la ciencia que el universo tuvo un principio? No.

  
  


• 
  

  Da mala imagen de la apologética cristiana. ¿Por qué? Porque por técnico que sea el asunto, tampoco es inaccesible y cada uno puede comprobar el estado del conocimiento científico sobre el tema. Total: al escuchar un apologeta cristiano exponiendo el argumento Kalām, un no creyente al tanto del asunto no pensará: “tiene razón, debe haber algo fuera del universo”. Más bien pensará: “estos creyentes no saben de qué hablan. Deberían aprender antes de pontificar”.

  
  

La tentación de mal usar la ciencia con fines apologéticos es vieja. El propio sacerdote George Lemaître, uno de los padres del Big Bang, tuvo que resistirla y combatirla⁸.

Ojalá estas líneas de Agustín dejaran de ser relevantes,

Acontece, pues, muchas veces que un infiel conoce por la razón y la experiencia algunas cosas de la tierra, del cielo, de los demás elementos de este mundo, del movimiento y del giro, y también de la magnitud y distancia de los astros, de los eclipses del sol y de la luna, de los círculos de los años y de los tiempos, de la naturaleza de los animales, de los frutos, de las piedras y de todas las restantes cosas de idéntico género; en estas circunstancias es demasiado vergonzoso y perjudicial, y por todos los medios digno de ser evitado, que un cristiano hable de estas cosas como fundamentado en las divinas Escrituras, pues al oírle el infiel delirar de tal modo que, como se dice vulgarmente, yerre de medio a medio, apenas podrá contener la risa. […] Cuando los infieles, en las cosas que perfectamente ellos conocen, han hallado en error a alguno de los cristianos, afirmando éstos que extrajeron su vana sentencia de los libros divinos, ¿de qué modo van a creer a nuestros libros cuando tratan de la resurrección de los muertos y de la esperan de la vida eterna y del reino del cielo?

Obras de San Agustín en edición bilingüe, vol. 15, edición de Balbino Martín O.S.A., BAC: Madrid, 1967

De Genesi ad literam, I.19.39 (págs. 615.617)

Para profundizar

Jean-Philippe Uzan, director de investigación del Instituto de Astrofísica de París, escribió en 2017 una notable reseña sobre el Big Bang. Obviamente, está en inglés y es bastante técnica. La progresión hacia lo desconocido descrita aquí puede encontrarse en la figura 2 de su texto.

1 Abundancia de los elementos ligeros, radiación de fondo de microondas perfectamente “planckiana”, oscilaciones acústicas de bariones, etc. Para más información sobre estos puntos, véase este otro artículo en Protestante Digital, o simplemente la página Wikipedia de cada fenómeno.

2 Para los expertos: por eso, y a pesar de que a muchos apologistas cristianos no les guste, el teorema BGV no es concluyente sobre la cuestión de un principio.

3 La teoría de cuerdas y la gravedad cuántica en bucle son las dos principales candidatas. Pero hay muchas más. Véase la diapositiva que Carlo Rovelli muestra en el minuto 9:40 de esta conferencia.

4 Consulte esta presentación de Sean Carroll para más opciones.

5 Otra especulación propone incluso un universo con un principio, el nuestro, con "antes", un "anti-universo", ¡en el que el tiempo transcurre al revés!

6 "Así, la era de la inflación que dio lugar a nuestro Big Bang terminó hace 14.000 millones de años...". Max Tegmark, Nuestro universo matemático, sección 5.3.

7 Primera frase de la introducción: "Los orígenes de la materia y la radiación se encuentran en el Big Bang caliente que termina con la inflación..."

8 Dominique Lambert, Ciencia y fe en El Padre Del Big Bang, Sal terrae, 2021.