El evangelio tiene que ver con Cristo.
Hoy quiero empezar con una pregunta:
¿Qué es el evangelio?
Antes de responder a la pregunta, es importante señalar lo que el evangelio no es.
En otras palabras, tu testimonio personal no es el evangelio.
No me malinterpretes. No estoy diciendo que es malo compartir nuestros testimonios personales con los incrédulos; pero sí estoy diciendo que el evangelio de Cristo es infinitamente más importante que nuestros testimonios.
Si tenemos que elegir entre la predicación del evangelio y compartir nuestro testimonio, ¡el evangelio siempre tiene que ganar! ¡Sí o sí!
Así que, volviendo a nuestra pregunta inicial: ¿Qué es el evangelio?
El evangelio, según la definición apostólica de la misma en 1 Corintios 15: 3-4, se trata de la muerte expiatoria y resurrección literal de nuestro Salvador Jesucristo. El evangelio se centra en Cristo, no en nosotros.
Es por eso que es tan malo decir una frase que es muy en boga en el mundo evangélico contemporáneo, a saber, “¡Tenemos que vivir el evangelio!” Es una afirmación incorrecta. No podemos vivir el evangelio porque solamente una persona vivió el evangelio, nuestro bendito Rey, Jesucristo.
Lo que sí podemos hacer, sin embargo, es vivir digna de la vocación con la que hemos sido llamados (Efesios 4:1) o vivir de una manera tal como para adornar o embellecer la doctrina de nuestro Dios y Salvador (Tito 2:10), pero sin duda alguna no podemos “vivir el evangelio”.
Los apóstoles nunca nos llaman a hacerlo. Tal concepto habría parecido ridículo a ellos. El evangelio es acerca de Cristo, no se trata de nosotros.
Ahora un ejemplo de la vida real:
Digamos que estoy hablando con un incrédulo llamado Josh. Le digo, “Josh, estás bajo la ira de Dios porque eres un enemigo del Señor. Sin embargo, la buena noticia es que Cristo ha dado su vida y resucitado por pecadores como tú”.
He predicado el evangelio a Josh. Pero el anuncio apostólico no se detiene allí. El evangelio también emite una llamada a la conversión.
Josh no será salvado por el solo hecho de escuchar el evangelio. Debe haber una llamada a la conversión. “Josh, Dios te llama a poner su fe en el crucificado y resucitado Cristo como tu único medio de salvación; Él está exigiendo que te arrepientas de tu pecado”.
La llamada a la conversión no es el evangelio. Sin embargo, sí forma parte del mensaje cristiano.
Como embajadores de Cristo, hemos de predicar el mensaje del Rey como heraldos fieles: la buena noticia del Hijo de Dios que fue crucificado y resucitado para rebeldes ingratos como nosotros.
Este mensaje es incomparablemente más importante que nuestros testimonios personales.
La conmemoración de la Reforma, las tensiones en torno a la interpretación bíblica de la sexualidad o el crecimiento de las iglesias en Asia o África son algunos de los temas de la década que analizamos.
Estudiamos el fenómeno de la luz partiendo de varios detalles del milagro de la vista en Marcos 8:24, en el que Jesús nos ayuda a comprender nuestra necesidad de ver la realidad claramente.
Causas del triunfo de Boris Johnson y del Brexit; y sus consecuencias para la Unión Europea y la agenda globalista. Una entrevista a César Vidal.
Analizamos las noticias más relevantes de la semana.
Algunas imágenes del primer congreso protestante sobre ministerios con la infancia y la familia, celebrado en Madrid.
Algunas fotos de la entrega del Premio Jorge Borrow 2019 y de este encuentro de referencia, celebrado el sábado en la Facultad de Filología y en el Ayuntamiento de Salamanca. Fotos de MGala.
Instantáneas del fin de semana de la Alianza Evangélica Española en Murcia, donde se desarrolló el programa con el lema ‘El poder transformador de lo pequeño’.
José era alguien de una gran lealtad, la cual demostró con su actitud y acciones.
Celebración de Navidad evangélica, desde la Iglesia Evangélica Bautista Buen Pastor, en Madrid.
Madrid acoge el min19, donde ministerios evangélicos de toda España conversan sobre los desafíos de la infancia en el mundo actual.
Las opiniones vertidas por nuestros colaboradores se realizan a nivel personal, pudiendo coincidir o no con la postura de la dirección de Protestante Digital.
Si quieres comentar o