Ana Mª Vangioni: UDME, ‘unidas para amar y servir’

Estamos en Madrid, entrevistando a Ana María Huck Vangioni, presidenta de la Unión de Mujeres Evangélicas de España (UDME) y directora de la revista NOSOTRAS, publicada por esta organización. Forma parte del equipo de Evangelismo en Acción y es una de las impulsoras, junto con Esperanza Suárez y Eva López Cañas, de un proyecto con la radio, “NOSOTRAS, en la onda”, que es producido por Radio Canal de Vida. Además cuentan con el apoyo de varias mujeres con amplia experiencia en este medio.

Acaba de ser publicado el último número de la revista NOSOTRAS y me ha encantado la variedad de artículos, testimonios, noticias… Así lo resume el editorial: “De esto se trata en otra edición de NOSOTRAS. Nos animamos mutuamente a correr hacia la meta con testimonios que enriquecen; compartimos pensamientos y reflexiones; y miramos más allá de nuestras fronteras, a otras necesidades, a otras culturas. Recordamos a varias mujeres ejemplares, modelos a seguir, cuyo objetivo en la vida fue y es el ser ‘sal y luz’, mujeres de ayer y mujeres de hoy”.

Pregunta.- Ana María, hay varias revista de mujeres en nuestro ámbito evangélico, cada una con características propias. La de la UDME es una de ellas. ¿Con qué objetivos nació ésta?
Respuesta.-NOSOTRAS es la “nieta” de los boletines que desde sus inicios confeccionó la entonces “Unión Femenina Evangélica Española” (UFEE) fundada en 1965. Los boletines internos entre los miembros de las diversas Filiales fueron ampliándose hasta llegar a llamarse “Orientación Femenina”, con artículos, meditaciones e información sobre las actividades de las Filiales. Por muchos años su directora fue Esther Francés, viuda de Borrás.
En Abril de 1996 publicamos el número 1 de NOSOTRAS, la primera revista interdenominacional para mujeres. Los objetivos de NOSOTRAS representan el espíritu de la Unión de Mujeres Evangélicas de España que, según nuestro lema “Unidas para Amar y Servir”, aporta un amplio caudal de voces plurales que enriquecen nuestro espíritu, mente y corazón, en el intento de dar respuesta comprometida al ruego de Jesucristo “de que sean uno, para que el mundo crea”.

P.- ¿Cuál es la clave para que una publicación se mantenga durante tanto tiempo?
R.-Como cualquier trabajo –o ministerio- que se realiza para Dios –creo- debe estar basado en la convicción que Él no sólo aprueba esa labor, sino que es para Él y por Él. Esta certeza debe estar acompañada por fiel constancia, grandes dosis de trabajo e infatigable anhelo de excelencia. En el plano práctico contamos con un equipo de personas cuyo compromiso e ilusión hacen posible la realización de NOSOTRAS.

P.- ¿Qué secciones contiene la revista?
R.-“Línea Abierta” es el prólogo editorial que pretende ser un “botón de muestra” de nuestra visión plural al turnarnos Bettina Zöckler, infatigable colaboradora por skype e internet, radicada ahora en Alemania; María Rosa Medel, Vicepresidenta nacional de la UDME y yo. Personalidades muy diferentes, de denominaciones diferentes, pero unidas en el cariño, respeto y deseo de ser útiles.
Las secciones fijas son: Inspiracional, Mujeres Ejemplares, Rincón de libros y cine, Psicología, Actualidad femenina, Homenajes, Educación, Mujeres del mundo, “Puertas Abiertas”, ¿Sabías qué?, Testimonio, Reflexión, Colaboraciones diversas, Noticias de las Filiales, Noticias de España e Internacionales y Poesía.

P.- ¿Qué experiencia habéis tenido al dar voz a una pluralidad de hermanas de distintas denominaciones?
R.-Descubrirnos mutuamente, percibir los dones y talentos dados por el Espíritu, pero también conocer obras y trabajos desconocidos fuera de su propio marco. La información e interacción es muy enriquecedora y estimulante. Aprender unas de otras, incentivar visión y corazón, orar unas por otras, relacionarnos sin entrar en competencia, todo ello es de bendición personal, nos hace crecer y madurar, y honra y beneficia la multiforme gema que es el reino de Dios.

P.- ¿Qué dificultades destacarías a la hora de preparar cada número? Me refiero a la búsqueda de colaboradores, a la impresión y a la distribución.
R.-Es cierto que cada edición insume muchísimas horas, mayormente nocturnas, aunque contamos con una buena infraestructura como son las colaboradoras habituales que ya tienen sus secciones fijas y las corresponsales de las Filiales de la UDME. Quisiéramos recibir más testimonios, porque las historias personales interesan mucho. Animo a todas las que tienen algo que contar, que nos envíen sus historias; de la redacción ya nos ocuparemos nosotras.
La maquetación e impresión es responsabilidad de Grafitec, a través de Juanjo Bedoya, quien nos dedica muchas horas, hasta por skype. Lamentablemente, por la crisis, hemos tenido que reducir el número de ediciones anuales de cuatro a dos, aunque actualmente tiene más páginas y más secciones.
Admitimos y buscamos publicidad, porque esto nos ayudaría a cubrir los gastos que afrontamos entre todas las que somos miembros de la UDME. Pagamos 10€ al año (desde hace cuatro años), de los cuales el 50% lo recibe la Filial regional para sus propios gastos, y el resto sirve para cubrir la impresión y envío de NOSOTRAS.

P.- De los comentarios que has recibido a lo largo de estos años, ¿cuáles son los que más te han conmovido respecto a la revista?
R.-¿Sinceramente? Pues la de hombres, pastores o líderes, o los esposos que nos han expresado su agrado y hasta admiración por la variedad del contenido y la pluralidad de las colaboradoras. O de mujeres líderes de diferentes denominaciones que no perciben competitividad con las publicaciones de su propio contexto. Pero muchas mujeres han expresado haber recibido una palabra de aliento y ánimo por los testimonios, consejos o reflexiones. Oramos para que NOSOTRAS sea un instrumento de bendición.

P.- Estás inmersa en un nuevo proyecto con la radio. ¿Quiénes te acompañan y qué motivos os han llevado a incursionar en este medio?
R.-Con Evangelismo En Acción-MECOVAN tuve la oportunidad de involucrarme en radio produciendo el programa “La Mujer Total” que fue emitido por diversas emisoras cristianas en España y por Latinoamérica. Aun reconociendo que hay programas de y para mujeres, creo que “NOSOTRAS, en la onda” será diferente al involucrar a mujeres de las diversas familias evangélicas, en un proyecto de cordial unión, testimonio, consejería y respuesta profesional a temas que preocupan, en un lenguaje natural y comprensible, desde nuestra común fe y esperanza en Dios.
El proyecto, aprobado por la Junta Nacional de la UDME, fue presentado a Radio Canal de Vida (Madrid) y a un grupo de mujeres ya involucradas en los medios de comunicación evangélicos: Beatriz Garrido (Galicia), Francesca Planagumá (Catalunya), Encarni Sánchez (Andalucía); Beni Moreno (Madrid). Contamos, además, con la colaboración de mujeres profesionales conocidas en nuestro medio. El apoyo ha sido unánime y entusiasta.
Creemos que las “buenas noticias” deben ser proyectadas hacia afuera de las cuatro paredes de la iglesia local, con un lenguaje comprensible para nuestra sociedad, con toda naturalidad, convicción, oración y corazón, tratando temas prácticos que a todas nos preocupan. Creemos que debemos “tender puentes” hacia nuestra sociedad tan necesitada de esperanza y fe.
Será un trabajo de equipo. En el estudio estarán Esperanza Suárez, gran profesional de amplia trayectoria radiofónica, Eva López Cañas, con experiencia en medios comerciales, responsable de los minutos musicales y yo, como conductora y guionista. Nos acompañarán invitadas de diferentes procedencias y variadas experiencias, en directo o vía conexión telefónica.
Después de unos meses de espera y oración hemos comenzado a grabar los primeros programas en el estudio de Radio Canal de Vida-Radio Encuentro (Madrid), con Fernando Díaz, director, quien lo producirá. Probablemente comenzaremos a emitir por radio e internet en enero de 2013; os mantendremos informados.

P.- ¿Crees que todavía hay gente que escucha la radio?
R.-Definitivamente sí. La radio no sólo llena los silencios de personas solitarias, sino es la compañía buscada por mucha gente que la sintoniza en su lugar de trabajo, en coches y cocinas. Por los oyentes de otros programas radiofónicos he comprobado que Dios habla y provoca encuentros “como por casualidad”, con personas totalmente ajenas a nuestros círculos evangélicos.
Hoy ya no es sólo un aparato de radio el transmisor, sino tenemos internet, los podcast, etc., con horarios puntuales pero también “a la carta”, para nuestra comodidad. Las ondas, y especialmente internet, traspasan barreras, muros y prejuicios y llegan a la intimidad de un hogar, de una fría celda, un hospital, un soldado en Afganistán. Hay historias impactantes.

P.- ¿Es una vía para la evangelización?
R.-Sí, si cambiamos el lenguaje religioso por uno más actual-normal; si recordamos que el micrófono de la radio no es el de la iglesia, ni la audiencia es la misma; si comunicamos fe en un Dios vivo y real (incluso para cubrir los gastos del programa) y comunicamos nuestra esperanza de una manera gozosa, convencida, Dios honrará con fruto esta labor.

P.- ¿Cuál piensas es la misión de la mujer en este siglo XXI?
R.-Todo cristiano, hombre y mujer, tenemos la misma misión: ser luz y sal, manos tendidas y corazones tiernos; somos comisionados en proyectar y reproducir el amor y el ejemplo de Jesucristo en el medio y las circunstancias que Dios nos ha colocado. Esto se aplica tanto a nuestra responsabilidad individual en la pareja, la familia, la comunidad espiritual de la Iglesia en desarrollar los dones otorgados por el Espíritu, pero también en medio de la sociedad donde debemos representar a nuestro Señor dignamente.
Su compasión y pasión por el ser humano no restaban severidad al condenar el abuso, la injusticia, la hipocresía, la religiosidad, la avaricia, todo tan actual. Las mujeres podemos y debemos dejar de ser espectadoras cómodas y conformes, para participar con sabiduría y sensatez en todo aquello que Él ponga delante de nosotras. Las puertas que Dios abre, nadie las podrá cerrar, si las cruzamos de Su mano.

P.- ¿Participas en algún proyecto solidario?
R.-Sí, participo en varios, algunos conocidos y otros no tanto, pero desde luego no en todos los que me gustaría. Apadrino desde hace años a un niño en Paraguay, ya adolescente, del proyecto solidario del Centro Educativo Ñandejara, llevado por mi hermana Mónica.

P.- ¿Qué mujeres han sido un ejemplo para ti?
R.-Desde luego la mujer que es mi referente como ejemplar en fe sencilla, entrega incondicional, dependencia ciega y obediencia total a Dios, es mi madre. Su vida parece una novela que nos ha marcado a sus cinco hijos, todos en el Señor y sirviendo en diferentes áreas, como profesionales o misioneros y pastores. Estoy tan agradecida y bendecida al comprobar, a lo largo de sus 89 años, la fidelidad correspondida del Padre Celestial con su hija Margot. Su texto favorito es Romanos 8:28 “A los que aman a Dios todas las cosas les ayudan para bien”.

P.- ¿Cuál tu plato favorito? ¿Cómo lo preparas?
R.-Tengo tantos… Me encanta cocinar y en general se me da bastante bien, pero mi tiempo está bastante limitado, así que ¡mucha ensalada y mucha plancha! Un día, cuando sea “más mayor”, tendré más tiempo, supongo…

Más información sobre la UDME:
Web: www.uniondemujeresevangelicas.es
Facebook: Unión de Mujeres Evangélicas. Próximamente también en Twitter

Finaliza la entrevista. Gracias, Ana María, por contarnos lo que hacéis un colectivo de mujeres, con miras a poner un granito de arena en la extensión del Reino de Dios en medio de esta generación. Seguro que vuestra labor en la obra del Señor no es en vano.