El País ha publicado en su edición de este sábado un bochornoso artículo sobre el crecimiento de iglesias evangélicas en la zona de Carabanchel.
"Subirá cual renuevo delante de él, y como raíz de tierra seca" (Isaías 53:29)
El dinero es lo más falso que existe: si confiamos en él, toda nuestra vida estará llena de problemas.
A primera vista resulta difícil entender el éxito de los predicadores de la prosperidad. Aquí presentamos cinco razones.
La forma contemporánea de "justificación por obras" es "la justificación por logros". La idolatría más sutil para la iglesia de nuestro tiempo es la "exitolatría"
Consejos pastorales desde Sardis (Apoc 3:1-6). ¡La "propia imagen" también puede ser ídolo!
Occidente reprocha a los países del Este haber inventado el culto a la personalidad. Pero Occidente hace lo mismo, o tal vez peor.
Un amplio sector de nuestra comunidad supuestamente cristiana ha cedido, a menudo sin darse cuenta, a la idolatría del materialismo y del pluralismo.
Degenerado el cristianismo en catolicismo, éste fue convirtiéndose poco a poco en una combinación entre las enseñanzas del Nuevo Testamento y los viejos cultos místicos de Grecia y Roma.
Doscientos años después se desvela el rostro oculto del único hermano de las Bronte, Branwell, en una exposición que hay en la casa pastoral donde vivían.
Los años han pasado y las profecías de las apariciones de la supuesta Virgen no se han cumplido.
Todas las apariciones han sentido la misma maniática preocupación por quedar materializadas en imágenes.
Cientos de jóvenes evangélicos aprovechan las masivas peregrinaciones para dialogar con los fieles sobre la Biblia, la fe y compartir con ellos sobre Jesús.
El dinero tiene muchos adoradores en nuestras sociedades de consumo insolidario.
Un auténtico discípulo de Jesús no puede alegar nunca, justificando su insolidaridad, que los muchos bienes que tienen los ha ganado honestamente, dentro de la ley y quedarse ahí sumido en su pozo de egoísmo.
El altar puede construirse en cualquier instante y lugar, sin que haga falta material físico para levantarlo, ya que en realidad donde se erige el altar es en el corazón de cada uno.
Aunque Jesús fue muy claro al respecto, nos gusta mucho más el dinero de lo que pensamos.
Andrés Panasiuk considera que la iglesia tiene un mensaje relevante con respecto a la economía para el mundo actual.
Hay otras idolatrías en las que podemos estar cayendo, aun cuando estemos en iglesias sin imágenes ni ídolos de leño.
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