El País ha publicado en su edición de este sábado un bochornoso artículo sobre el crecimiento de iglesias evangélicas en la zona de Carabanchel.
La paz y la santidad la tenemos en él. No la busques por otro sitio. Y cuando la tienes en él, la tienes.
Vivir en santidad como estilo de vida es descubrir el verdadero secreto de la felicidad.
La película de Sabatino comienza con el título de “una historia bíblica”, no porque cuente la vida de un personaje de la Escritura, sino porque en su protagonista reconoce la sabiduría y necedad de muchos caracteres bíblicos.
Lo sagrado ya no es el ámbito, el sustrato, el magma que impregnaba la vida.
La verdadera renovación en la santidad solo se hace posible colocando el corazón en el altar de Dios.
No se puede decir que vivimos para Dios, a menos que vivamos para Él en todo lo que hagamos en nuestro día a día; a menos que Él sea la regla y medida de todos nuestros caminos.
Soy frágil, pero su poder se perfecciona en mi debilidad y eso me hace fuerte.
El consumo de pornografía está extendido entre personas cristianas y no es solo cosa de hombres, ni de jóvenes.
Si Packer se refiere tanto a la santidad, no es porque viera simplemente falta de ella, sino porque creía que había un concepto equivocado de santidad.
Ellos fueron una “buena noticia” para muchos, a los que su mensaje de amor sigue inspirando hasta el día de hoy, pero ¿es esa “la buena noticia” de Jesús?
Incluso cuando acertamos acercándonos a la fuente correcta y procurando imitarle, desacertamos en la manera de hacerlo y reproducirlo.
¿Qué es realmente lo que nuestra vida cristiana, ante la iglesia y ante la sociedad está mostrando?
Las iglesias cristianas y otros movimientos que se invocan como parte de la fe bíblica han estado transitando a través de esta tendencia reivindicatoria de pedir perdón.
La justificación es un acto, la santificación es un proceso.
Es imposible comprender los tiempos en que vivimos sin disponer de una visión que sólo puede dar Dios.
La pregunta de por qué murió Jesús es, sin embargo, central para entender el cristianismo. Es más, no comprendemos a Cristo si no entendemos su cruz.
El hombre también tiene un corazón doble, triple, cuádruple e incluso más. Una verdad “verdadera” y otra oficial, una para los dirigentes y otra para los votantes; unos programas para los medios y otros para después de los pactos.
¿Por qué se le denomina santo? Sin duda, la explicación es que su obra particular consiste en producir la santidad y el orden en todo lo que hace al aplicar la obra de salvación de Cristo.
Cómo obedecer el espíritu del sexto mandamiento.
Nos toca examinarnos, observarnos y analizarnos nosotros mismos.
El predicador, escritor y teólogo ha sido uno de los mayores impulsores del nuevo movimiento reformado en Estados Unidos.
Es imposible comprender los tiempos en que vivimos sin disponer de una visión que sólo puede dar Dios.
El corazón humano, en su estado natural, es una auténtica fábrica de abominaciones.
Somos ignorantes cuando las palabras “me equivoqué” no aparecen en nuestro vocabulario.
El cristiano es santo por derecho de redención, porque Cristo, al salvarle, le ha comprado con su sangre.
Las opiniones vertidas por nuestros colaboradores se realizan a nivel personal, pudiendo coincidir o no con la postura de la dirección de Protestante Digital.