Un poema de Chari Morillo. (Selecciona Isabel Pavón)

Hasta que a Ana le llegó la alegría de ser madre, había llorado mucho su tristeza. Tras el llanto de un corazón enlutado, renació la alegría y el saber proclamar las bondades del Señor.

Un poema de Juan Carlos Martín Cobano, extraído de la obra Tiempo de cruzar el umbral, publicado por Tiberíades Ediciones. (Selecciona Isabel Pavón)

Necesitamos que se comporten bien con nosotros, y sabemos que debemos ser así con los demás. Cualquier persona merece recibir lo bueno.

Un poema de Pilar Olmedo. (Selecciona Isabel Pavón)

Estos que se empecinan en obligar a los demás a someterse con toda humildad, espantan a la gente por la tufarada que exhalan.

Un poema de José Viladecans, del poemario A los pies de la cruz. (Selecciona Isabel Pavón)

Con nuestros malestares anochecieron sus días. Con simples besos se sintieron agradecidas. Nos han querido como a nadie más en el mundo.

Un poema de Mª Karolina Gomes Da Costa. (Selecciona Isabel Pavón)

Practiquemos la paciencia por mucho que nos cueste y esperemos en él. Vivamos  con libertad sin que nadie logre herirnos con sus falsos testimonios.

Un poema de Esteban Martínez Serra, extraído de la obra A los frutos tardíos, publicada por la Editorial Devenir. (Selecciona Isabel Pavón)

Pidamos perdón al Señor por todo lo que hacemos mal, del poco cuidado que tenemos con la gran misión que se nos ha encomendado. Todos nuestros actos, buenos o malos, repercuten en la Tierra.

Un poema de Aurora Camacho con motido del 22 de abril, Día Internacional de la Tierra. (Selecciona Isabel Pavón)

El egocentrismo nos lleva a olvidarnos de las necesidades del prójimo que, igual que nosotros, precisan el bien.

Un poema de Carolina Coronado. (Selecciona Isabel Pavón)

Sabemos que tenemos que abandonar la vida que hasta ahora llevamos. El camino cuesta, se hace largo. Pero Dios nos guiará a salir del vano entorno.

Un poema de Jorge Castañeda, extraído de la obra Lirio de los valles. (Selecciona Isabel Pavón)

Jesús no disfrazó la realidad, y menos estando al borde de la muerte.

Un poema de Gloria Fuertes. (Selecciona Isabel Pavón)

Porque el Señor no desprecia un corazón hecho pedazos, nosotros tampoco.

Un poema de José Viladecans, de la obra A los pies de la cruz. (Selecciona Isabel Pavón)

Wendy cose, cuida de sus hermanos, les educa, duerme en la misma habitación por si despiertan de noche. Hace a la perfección el papel que en los hogares se le asigna a la hermana mayor: ser una madre más en la familia.

Un poema Marisi Moreau Tamayo, del poemario De estas vías mis sueños. (Selecciona Isabel Pavón)

Probaría de otro modo, en lugar de alargar su mano, le estamparía dos besos para ver si sentía algo distinto.

Un poema de Luis Enrique Mejía Godoy, tomado de La Nación y publicado el 29 de marzo de 2020 a raíz de la pandemia de la Covid-19. (Selecciona Isabel Pavón)