El País ha publicado en su edición de este sábado un bochornoso artículo sobre el crecimiento de iglesias evangélicas en la zona de Carabanchel.
Algunos virus son “buenos” ya que ayudan a nuestro desarrollo intestinal, participan en el crecimiento del sistema nervioso, otros pueden usarse para combatir el cáncer o el sida y también contribuyen a formar la placenta.
¿Podrá la ciencia dar una explicación del origen del universo, sin necesidad de Dios?
El lector conocedor de la Biblia advertirá de inmediato que se trata de un ejercicio de imaginación. Las palabras suenan bien, pero están lejos de la verdad. Muy lejos. La imaginación se embriaga de sueños, se aproxima al delirio. Presenta como auténticas situaciones que nunca han sucedido.
En las tierras de la Biblia hay millones de arañas que pertenecen a varios cientos de especies diferentes.
Más que la fecha importa el hecho. Y nacer, es evidente que nació.
Si las genealogías judías mencionaban solamente a los varones cabezas de familia, la de Jesús incluye también a las féminas más discriminadas de la sociedad.
A partir del siglo XI, el culto a María Magdalena en Oriente apenas conoce elementos nuevos. Pero en Occidente, tras la larga gestación de siglos anteriores, las iglesias maduran y crece la adoración a la primera persona que vio al Cristo resucitado.
Quienes rechazan la fe en el Dios único y verdadero caen en el artificio de creencias enigmáticas, impenetrables.
En Israel existen numerosas especies de plantas que presentan espinas punzantes.
— ¿Por qué estás aquí desocupado?— le preguntó—. Ve a mi viña y recibirás lo que sea justo.
El apóstol San Juan era muy meticuloso en la designación de personas. Menciona a cuatro mujeres llamadas María. Pero en ningún lugar del Evangelio que escribió dice: “María, hermana de Marta y Lázaro, llamada Magdalena….”.
Débora significa “la abeja”, animal considerado por los hebreos como ordenado, sabio y laborioso.
Se hace preciso distinguir entre el espíritu del paganismo antiguo, permanentemente vivo a lo largo de estos dos milenios de Cristianismo, y el neopaganismo que está resurgiendo como culto organizado,
Los álamos aparecen en la Biblia en pocas ocasiones, sin embargo, uno de estos pasajes es muy interesante desde el punto de vista científico.
En estos tiempos, añade, se quiere “ensuciar” la imagen de Magdalena “con motivos literarios sin ningún tipo de fundamento histórico, religioso y científico”.
"A mitad de camino surgió un hombre que viajaba semi escondido en la parte trasera del taxi. Me puso un cuchillo grande y afilado en el cuello."
La Biblia se refiere también a las algarrobas en el evangelio de Lucas, a propósito del relato del hijo pródigo (Lc. 15:11-32).
Degenerado el cristianismo en catolicismo, éste fue convirtiéndose poco a poco en una combinación entre las enseñanzas del Nuevo Testamento y los viejos cultos místicos de Grecia y Roma.
En la Biblia, los ajos se mencionan en una sola ocasión (Nm. 11:5), a propósito del recuerdo nostálgico de los israelitas en su peregrinación por el desierto.
Por muy disparatado que nos parezca el contenido de “La leyenda dorada”, en su tiempo fue recibido con júbilo y creído al pie de la letra por miles de europeos.
Un nuevo cuento de Antonio Cárdenas.
A veces, nuestros prejuicios personales hacen que las algas se nos enreden en la cabeza y nos traicionen.
En su condena del paganismo, los autores cristianos de los primeros siglos llegaron a reprobar incluso a la civilización antigua, porque entendían que su literatura y sus costumbres estaban unidas a sus ideas religiosas.
El apóstol Pablo compara el olivo silvestre (o acebuche) con el mundo gentil, elaborando así una sencilla parábola del olivo.
La de Karen King es una obra seria que tiene como objetivo dar a conocer la importancia y significado de la mujer en la Iglesia primitiva y el extraordinario papel representado por María Magdalena.
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