Que 20 años no es nada

El anuncio más insulso y más bobo que pasa por algunas cadenas de televisión en este país tuyo y mío, es el de la Mutua Madrileña. Una pareja, hombre y mujer, hay que especificar (normalmente matrimonio, padre e hija, hermana y hermano, a veces simplemente amiga y amigo) cubre las pantallas y te sueltan: “Te lo digo o te lo cuento”.

Protestante Digital se fundó hace 20 años. Te lo digo o te lo cuento.

¡Veinte años!

¡No son muchos!

El tango Volver, con música de Carlos Gardel y letra de Le Pera, cantado por el mismo Gardel, dice que la vida es un soplo y 20 años no es nada.

¿Nada?

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Pues mi cerebro retrocede a unos 70 años.

Te lo digo o te lo cuento.

Cumplida la edad en la que los mozos suelen ingresar en el servicio militar me presenté en el Consulado español de Tánger, Marruecos de mis amores y mis dolores, y dije al señor Torres, quien llevaba estos asuntos, que quería ir a filas. Consultó unos papeles y, como si fuera una gran noticia, me dijo: “Estás de enhorabuena, muchacho. Al haber nacido fuera de España y de padre francés estás exento de la mili”.

“Pues yo quiero ir”, respondí convencido.

Me miró perplejo y argumentó: “Todos los que vienen aquí me preguntan por la forma de evitar la mili”.

“Pues yo quiero ir”.

Y fui, destinado a Santa Cruz de Tenerife.

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El primer domingo que pude me dirigí a la dirección que tenía en busca de mis hermanos en Cristo.

El pequeño grupo de evangélicos se reunía en casas particulares. A la que llegué había unas treinta personas. Hablé con quién me parecía un líder, Genaro March. Le expliqué quién era y de dónde procedía. Al dirigir la reunión Genaro me presentó al grupo y añadió por su cuenta: “Parece buen muchacho”.

Un hombre de unos 30 o 35 años saltó de la silla que ocupaba y dijo: El otro tenía la misma cara de tonto y ya sabemos cómo resultó.

Encajé el insulto en silencio.

Estábamos en pleno culto.

Acabada la reunión, una mujer se me acercó muy amable y me invitó a comer en una cafetería cercana.

Allí me lo explicó. Aquel hombre, Moisés de nombre, era un buen hombre. Antes de mi llegada se había marchado licenciado otro soldado de Sevilla. Se había ido dejando a deber dinero a Moisés y a otros miembros de la Iglesia. Me pidió que no dejara de ir a las reuniones.

Aquella mujer era Matilde Tarquis, tía carnal del director del fundador y actual director general de Protestante Digital. Matilde me ayudó económicamente mucho durante los trece meses de mili.

En un viaje que realicé a Tenerife, ya instalado yo en Madrid, Matilde me dio un paquete para un hermano suyo que vivía en la capital. Acudí al domicilio indicado. Entregué el paquete. Me saludó un niño de unos trece años, sobrino de Matilde. Aún vestía pantalón corto. Con el tiempo, aquel niño hizo dos cosas grandes. Fue un gran médico y un gran periodista. Se llamaba Pedro Tarquis, quien en mayo de 1979 contrajo matrimonio con otra gran mujer canaria, Asun Quintana.

Seguí la vida de Pedro. Al ser yo nombrado consejero de prensa en la Federación de Entidades Religiosas Evangélicas de España, Pedro ocupó la secretaría. Cuando fui elegido presidente de la Federación. Tarquis quedó como consejero varios años, hasta que renunció a seguir. Yo me marché con él.

Pedro ya era parte de la Junta Directiva de la Alianza Evangélica Española. Con el apoyo de su presidente, Pablo Martínez, la Alianza decidió asumir sus ideas para la creación de Protestante Digital. De manera que fuimos tres sus fundadores: Pedro Tarquis, Pablo Martínez y quien esto escribe.

El primer boletín de Protestante Digital apareció el 7 de septiembre del 2003.

¿Qué 20 años no es nada, señor Gardel?

Pues en estos 20 años Pedro Tarquis y sus colaboradores han desarrollado Protestante Digital hasta hacer necesario integrarla con identidad propia en una ONG, Areópago Protestante, vinculada a la Alianza Evangélica.

De Areópago protestante han surgido posteriormente Evangélico Digital para América Latina, Evangelical Focus en inglés, el Premio Unamuno y otras actividades.

Puede que, para mi admirado cantante argentino, 20 años no sean nada, pero en esos 20 años Protestante Digital ha alcanzado millones de usuarios y de páginas visitadas. Sólo en 2022 fueron 1.826.180 usuarios, y más de 3.000.000 de páginas visitadas.

Muchos miles de lectores en España, de otros países europeos y de las dos américas, la que habla el idioma de Shakespeare y la que habla el de Cervantes, siguen con frecuencia el contenido periodístico de las marcas iniciadas por Protestante Digital. Y cada vez más del mundo entero a través de Evangelical Focus.

Puede que 20 años no sea nada, pero de los tres que iniciamos la aventura se ha llegado a unos cien autores que escriben para las marcas de Protestante Digital.

Aquí, con permiso de Pedro y de los lectores, quiero hacer una confesión: Protestante Digital es Pedro Tarquis. Sin él no existiría esta gran obra periodística en español y en inglés. Y pido a quien proceda que no me borre este párrafo. Me sublevaría.

Tengo ante mí una cita de Alberto Einstein que figura en un artículo publicado el 8 de diciembre de 1933 en la revista norteamericana Liberty: “Sólo el individuo puede pensar y pensando, crear nuevos valores para el mundo. Sólo el individuo puede idear nuevas normas que señalen el camino a seguir durante generaciones. Sin personalidades decisivas que piensen y creen independientemente, el progreso es inconcebible”.

Pues eso: Gracias a Dios y a la vida por la persona, “el individuo”, que es Pedro Tarquis y por estos 20 años que han sido mucho.