Invitación a la ternura

1)Ternura de ser hombre amando al Espíritu de Cristo y a la carnalidad toda (alma incluida) de la mujer con la que te esposaste. La frialdad se espanta ante tan invaluables calideces.

2)Se oyen murmuraciones de dos en dos : en fila están los envidiosos y los majaderos. Pero tú demuéstrales afecto y comprensión, porque así no se te envejecerá el alma.

3)Que tu amor sea más grande que un beso. Que tu amor no deje morir su ardentía tras el moho de la rutina.

4)“Ya tu sabes, mi amol”. Mi musa sonríe cuando oye que pronuncio en cubano.

5)Mil alegrías mejor que una contienda.

6)Juan 15, 11: “Os he hablado de esto para que mi alegría esté en vosotros y vuestra alegría llegue a plenitud”.

7)No el hombre o mujer pletóricos de escepticismo, de heridas mal curadas, de malvados propósitos : ¡Los niños, Evangelio vivo, parábolas de la sagrada Aspiración! ¡En ellos vive el Niño, y en ellos crecerá el Resucitado! No el resabido fariseo o leguleyo de la Palabra : ¡Los niños, realidad terrestre del Espíritu, norte del Verbo infinito! No el que mira, remira y suelta su perorata sin un segundo de Amor : ¡Los niños y aquellos mayores que se vuelven como niños para que, tiernamente, puedan acariciar el corazón de Dios!

8)Te he conocido y me eres fiel. ¡Despierta, bebe de la copa que reservo para ti!

9)Proverbios 5, 18-19: “…disfruta con la esposa de tu juventud,/ cierva querida, gacela encantadora; que sus pechos te embriaguen cada día/ y su amor te cautive sin cesar”. Deleitémonos con estos versos.

10)Entre flores oscuras yace un corazón que incumplió su juramento de entregarse, sin descanso, solo a la ternura.

11) (Tierna compasión): Tras publicar Iglesia, carisma y poder, el teólogo franciscano Leonardo Boff fue juzgado por Ratzinger, entonces al mando de la antigua Inquisición. En 1984 lo sentó en la misma silla donde otrora estuvieron Galileo Galilei y Giordano Bruno. A la condena al silencio siguieron un sinnúmero de prohibiciones, hasta que en 1992 abandonó el sacerdocio. No obstante lo sufrido, hace tres años vaticinó lo que ahora acaba de suceder: “El Papa, para su bien y el de la Iglesia, debería renunciar. Debemos ejercer la compasión. Es un hombre enfermo, viejo, con achaques propios de la edad y con dificultades para la administración, porque es más profesor que pastor. Por ese motivo haría bien en irse a un convento a rezar su misa en latín, cantar su canto gregoriano que tanto aprecia, rezar por la humanidad que sufre, especialmente por las víctimas de la pedofilia, y prepararse para el gran encuentro con el Señor de la Iglesia y de la historia. Y pedir misericordia divina”. Esto lo dijo en la revista brasileña “Istoé”, edición de 28 de mayo de 2010, y ya pueden constatar lo profético que ha resultado.

12) Desaloja los rencores de tu ser, desteje la malla del engaño. ¡Oh inocencia haciéndose cariño, quemante pureza!

13)Mi amor es pacífica realidad multiplicada sobre tu piel y tu esperanza.

14)¿Qué pasa con los/as estériles que no garantizan la pervivencia de la especie, aunque crean en Cristo y estén casados? ¿Qué pasa con los curas y monjas que tampoco deben, aunque quisieran, garantizar tal cometido? ¿Qué pasa con quienes sí lo garantizan pero no se hacen cargo de los nacidos ni los alimentan, como el ex obispo Lugo, hasta hace poco presidente de Paraguay? Téngase algo más de misericordia, especialmente algún ministro falto de sensibilidad cristiana, pero más papista que el papa.

(Ojo: lo de la “p” en minúscula no tiene por qué ser motivo de erudiciones o exabruptos, pontificaciones o condescendencias, salvo que así se encuentre el disfrute y/o sea de absoluta necesidad fisiológica, más que filológica. Supóngase -presunción de inocencia, diría el penalista- que me equivoqué de tecla, y ya está, tan en paz).

15)Descansa en la ternura, pues tu fe habita en el Amor.