Insiste en tu Esperanza

1. Insiste en tu Esperanza. Te oigan o no, insiste en tu Esperanza.

2. Sobrevivir al éxito y al fracaso, y caminar tranquilo por la ciudad que se despierta.

3. No emprendas la travesía cargado de prejuicios, porque pueden guiarte por la senda equivocada.

4. Por el mañana de Cristo, que no te venza el extremismo, siempre perjudicial.

5. Aquello que uno ama es como un vaso lleno de luz indicando el lugar de la Verdad.

6. No medir a los prebostes por el bombo que se les da.

7. Haz de mí un Bienaventurado, y que en el fin esté mi nacimiento.

8. Si buscas edificar la paz no lo hagas con el corazón cauterizado.

9. Silabeas los genuinos mandatos de Su Justicia, pero muchos que dicen haber leído lo mismo te desdeñan, llamándote “loco”, “comunista” o “utópico”. Por la intemperie va la Memoria en llamas, alejándose de la antigua vigilia debido a la inexacta o parcializada explicación del Reino.

10. El enojo es leña seca para el horno ardiente de los daños.

11. ¡Auxíliame con tu Potestad de disidente al margen de ataduras ceremoniales!

12. Los necios se vuelven papagayos; las necias se vuelven híbridas: ambos no tienen escapatoria al estéril rechinar de dientes.

13. Observa el sepulturero cómo se entierran ellos mismos.

14. ¡Qué adherido está el mundo dentro de la iglesia! El mundo está en nosotros porque parece hacernos demasiada falta: sólo cuando en verdad realicemos la revolución de nuestra propia vida, la resurrección circulará en los ejemplos que ofrezcamos. 

15. Pide a Dios que el agua no amanezca seca. Y tampoco tu fe.

16. Contiendas por seguir acumulando metales. Contiendas por perpetuarse en sillones de poder que alejan del Espíritu. Contiendas, codazos, indirectas por querer sembrar en tierra fértil donde ya brotó la semilla.

17. ¡Quien mejor ha catado el sabor del exilio es el Cristo que me despierta como si yo fuese profeta!

18. Zumban como moscas los que discuten consigo mismos.

19. Mujer: sirve tú el vino porque desde la Boda te corresponde el pequeño milagro. Tu empeño propicio la savia de salvación.

20. ¿Puerta extranjera o puerta de todas las naciones? ¿En qué quedamos? ¡Decídanse, pues!

21. ¿Quién se detiene a limpiar los días sucios? ¿Quién hace comunión de manos con los dolientes? Decidme, ¿quién que requiere reposo sale a la calle para apurar el infinito con el movimiento de su alma?