... los que nunca saltaban, ese día lo hacían como los masai. Los que nunca levantaban las manos, las levantaban hasta tocar el cielo...
Tras una larga y seria reunión, los dirigentes decidieron que una vez al año debían salir del armario eclesial y convocarse con el fin de dar testimonio en el centro de la ciudad. No estaba bien la costumbre de andar a escondidas entre cuatro pareces los trescientos sesenta y cinco días, así que reunieron fuerzas y se añadieron a las fiestas arzobispales.
¡Cómo no!, los dirigentes, haciendo caso omiso de lo dicho en el evangelio de Mateo 20, 26-27: Pero entre vosotros no debe ser así. Al contrario, el que entre vosotros quiera ser grande, que sirva a los demás; y el que entre vosotros quiera ser el primero, que sea vuestro esclavo, ocuparon las primeras filas de asientos antes de que se los quitaran, así no tenían que estar pendientes ni preocupados de lo que ocurría con sus fieles seguidores en la parte de atrás, ni se percataban de los minusválidos y enfermos que no habían podido encontrar asiento. De sobra es sabido que ojos que no ven, corazón que no siente.
Los que nunca saltaban, ese día lo hacían como los masai.
Los que nunca levantaban las manos, las levantaban hasta tocar el cielo.
Los que nunca bailaban se contoneaban al son de la música excitante.
Los que antes no se besaban, mostraban gestos de cariño hacia los que por costumbre volvían la cara: Yo no te he visto y si te vi no me acuerdo, haberme saludado tú que para eso yo te saludé la última vez.
Los que no se reunían durante el año, ese día aparecían vestidos de fiesta, ¡aquí estamos porque hemos venido, pero sin que sirva de precedente!
Los que no tenían oportunidad de lucirse, alumbraban como el sol, por cierto, este quemaba sus pieles blanquecinas acostumbradas sólo a la luz artificial. Nueva colección Tchin-Tchin de Afflelou, tu segundo par de gafas por un euro más.
¡Qué bonito era todo, gracias a Dios, Aleluya y alabado sea su nombre por los siglos de los siglos, Amén! Ahora que estamos tan agustito, tan agustito, tan agustito, tú ves...
Las personas ajenas a la obra que pasaban por allí, estaban convencidos de que aquello no era más que otro concierto gratis al aire libre hasta completar el aforo y ocurrió que las normas que durante todo el año estaban prohibidas por no formar parte de los cánones establecidos, ese día fueron aceptadas y legitimadas con una alegría desbordante. Por ejemplo, tomar los símbolos del pan y el vino sin haberse bautizado porque, claro, ¿quién iba a adivinar la situación de cada uno entre los tantos que se hallaban allí presentes? ¿Quién era el guapo que les iba a ir preguntando si estaban o no bautizados, si habían pronunciado la declaración de fe instituida, si habían aceptado o no al Señor como Salvador? ¡Ese día no importaba! ¡Ese día se abarató la Cena del Señor porque convenía!
Y como cuando terminan las procesiones, al finalizar el acto, cada cual se recogió en su templo-casa.
Al domingo siguiente, en la iglesia todo fue normal, estricto, como ha de ser siempre; serio, como Dios manda. Las viejas normas esperaban vestidas de viejos cánones, con los brazos cruzados, la espalda retrepada y los morros torcidos; se hallaban esparcidas sobre los bancos que, desde la semana anterior, por causa de la fiesta, habían quedado fríos y vacíos.
La conmemoración de la Reforma, las tensiones en torno a la interpretación bíblica de la sexualidad o el crecimiento de las iglesias en Asia o África son algunos de los temas de la década que analizamos.
Estudiamos el fenómeno de la luz partiendo de varios detalles del milagro de la vista en Marcos 8:24, en el que Jesús nos ayuda a comprender nuestra necesidad de ver la realidad claramente.
Causas del triunfo de Boris Johnson y del Brexit; y sus consecuencias para la Unión Europea y la agenda globalista. Una entrevista a César Vidal.
Analizamos las noticias más relevantes de la semana.
Algunas imágenes del primer congreso protestante sobre ministerios con la infancia y la familia, celebrado en Madrid.
Algunas fotos de la entrega del Premio Jorge Borrow 2019 y de este encuentro de referencia, celebrado el sábado en la Facultad de Filología y en el Ayuntamiento de Salamanca. Fotos de MGala.
Instantáneas del fin de semana de la Alianza Evangélica Española en Murcia, donde se desarrolló el programa con el lema ‘El poder transformador de lo pequeño’.
José era alguien de una gran lealtad, la cual demostró con su actitud y acciones.
Celebración de Navidad evangélica, desde la Iglesia Evangélica Bautista Buen Pastor, en Madrid.
Madrid acoge el min19, donde ministerios evangélicos de toda España conversan sobre los desafíos de la infancia en el mundo actual.
Las opiniones vertidas por nuestros colaboradores se realizan a nivel personal, pudiendo coincidir o no con la postura de la dirección de Protestante Digital.
Si quieres comentar o