sábado, 23 de noviembre de 2024   inicia sesión o regístrate
 
Protestante Digital

 
La Reforma indispensable (44)
7
 

Lutero: Mi conciencia, cautiva de la Palabra de Dios

Al reanudarse la sesión, Von Ecken inició un discurso cuya finalidad obvia era doblegar a Lutero.
LA VOZ AUTOR César Vidal Manzanares 26 DE ENERO DE 2012 23:00 h

La petición de tiempo para reflexión que hizo Lutero desconcertó al tribunal, obligó al partido papal a esperar, impresionó a los laicos y a los nobles por la humildad y la honradez del monje y le proporcionó una noche para orar y reflexionar sobre lo que iba a decir al día siguiente.

Contamos con notas de Lutero redactadas durante esa noche y por ellas sabemos que aquellas horas estuvieron marcadas por una soledad absoluta. Sus amigos estaban amenazados de muerte por Aleandro, habían sido condenados y excomulgados por la bula y carecían de permiso para estar en Worms. Sin embargo, el monje era consciente de que todo el mundo contemplaba lo que estaba sucediendo en Worms y, lo que era más importante para él, también lo hacía Dios.

A las cuatro de la tarde del día siguiente, 18 de abril, el heraldo vino a buscar a Lutero y lo condujo hasta el tribunal. Rodeado por una multitud, el monje tuvo entonces que esperar hasta las seis, dado el trabajo del que debían ocuparse los príncipes. Durante ese tiempo, algunos nobles se le acercaron para decirle que deseaban quemarlo, pero que esa circunstancia no se produciría porque antes tendrían que eliminarlos a todos. “No tendrán problema en hacerlo”, les contestó Lutero de manera irónica, pero realista.

Cuando finalmente Lutero compareció ante la Dieta, se le indicó que se le había concedido un tiempo para deliberar a pesar de que no tenía ningún derecho a ello. Ahora debía responder si deseaba defender todos los libros que había reconocido como propios o quería retractarse de alguno. El anuncio fue realizado en latín y en alemán, y de manera bien significativa, el tono de la requisitoria fue más áspero en la primera lengua.

Lutero respondió en alemán. Su tono fue humilde y tranquilo por lo que no pocos pensaron que pensaba retractarse. Sin embargo, tenía otras intenciones. Así, señaló, en primer lugar, que reconocía como suyos los libros reunidos en el lugar en la medida en que no hubieran sido alterados por sus adversarios.

Por lo que se refería a la defensa o retractación de los mismos, dividió sus libros en tres grupos. El primero abarcaba aquellos que la misma bula consideraba inofensivos. De ésos, no se retractaba.

En segundo lugar, estaban los libros en los que lanzaba acusaciones contra el papado por torturar las conciencias y exprimir al pueblo. De esos no podía retractarse porque significaría “consentir esa tiranía y fortalecer su dominio”.

Finalmente, se encontraban los escritos que había dirigido contra las personas que defendían “la tiranía romana” y pretendían tergiversar lo que había enseñado sobre la fe. En este caso, reconocía que debería haber sido más considerado, pero lo cierto es que no era un santo y, por añadidura, le resultaba imposible retractarse. A pesar de todo, si se le convencía de sus errores, refutándolos de acuerdo con los escritos de los profetas y del Evangelio, “nadie estaría más dispuesto a una retractación” que él “y sería el primero en arrojar al fuego los libros” que eran suyos.

Al terminar su exposición, se le pidió que la repitiera en latín, lo que Lutero hizo. Acto seguido, los príncipes se retiraron a deliberar. No da la impresión de que resultara muy difícil que se pusieran de acuerdo. A su juicio, resultaba indispensable que Lutero dejara de manifiesto con claridad si se retractaba o no. Por ello, pidieron a Von Ecken que intentara dejar convenientemente esclarecido este aspecto y optaron por continuar la vista.

Al reanudarse la sesión, Von Ecken inició un discurso cuya finalidad obvia era doblegar a Lutero. Finalmente, le formuló la pregunta clave. ¿Se retractaba de sus libros y de los errores que contenían?. El monje reconoció que tanto el emperador como los miembros de la Dieta deseaban una respuesta sencilla y manifestó que la iba a dar en latín sin equívoco alguno:

“Hela aquí: a menos que se me persuada por testimonios de las Escrituras o por razonamientos evidentes, porque no me bastan únicamente las afirmaciones de los papas y de los concilios, puesto que han errado y se han contradicho a menudo, me siento vinculado con los textos escriturísticos que he citado y mi conciencia continúa cautiva de las palabras de Dios. Ni puedo ni quiero retractarme de nada, porque no es ni seguro ni honrado actuar en contra de la propia conciencia”

En ese momento, abrumado por la emoción, Lutero cambió el latín en que se había expresado por su alemán materno y exclamó: “No puedo más. Haced de mi lo que deseéis. ¡Que Dios me ayude!”.

La respuesta de Lutero no dejaba esta vez lugar a dudas y algunos de los príncipes hicieron ademán de abandonar la sala. Von Ecken intentó entonces controlar la situación y gritó a Lutero que olvidara su conciencia, que nunca podría probar que los concilios se habían equivocado en materia de fe, sino, como mucho en materia de disciplina. El monje le respondió entonces que sí podía probarlo. No tuvo, sin embargo, oportunidad.

A una señal del emperador, dos guardias lo sacaron de la sala y en esos momentos se produjo el estallido.

Mientras la guardia española del emperador gritaba “¡Al fuego! ¡Al fuego!”, los alemanes –que no entendían lo que estaban diciendo- hacían la señal de la victoria.

Escoltado por los que llamaba sus “ángeles guardianes”, Lutero llegó al final a su alojamiento. Una vez allí, levantó los brazos al cielo mientras gritaba: “¡Ya está! ¡Ya está!”.

Se encontraba embargado por la convicción de que había cumplido con su deber. Donde otros se habían retraído por miedo o por interés, él se había mantenido firme frente a los grandes poderes de su tiempo y fiel a los dictados de su conciencia. Lo había hecho además no por intereses políticos, por codicia o por ansia de poder sino por amor al Evangelio y sostenido en la fe en su Redentor.
 

 


6
COMENTARIOS

    Si quieres comentar o

 
Respondiendo a

Juan Antonio
05/02/2012
11:00 h
6
 
Siempre es grato conversar con don Domingo, pues permite aclarar los mitos elaborados por el catolicismo para el engaño de las multitudes. Siempre en protestantedigital.com, pero en otro hilo se ha explicado que NO fueron los papas quienes establecieron el Canon de las Escrituras, pero si don Domingo lo desea, se lo podemos ampliar, pues por lo visto aún no logra entender.
 
Respondiendo a Juan Antonio

Abel. Coruña
01/02/2012
17:28 h
5
 
El principio evangélico y eje de la reforma no es la 'Libre Interpretación', sino el 'Libre Examen', es decir, LIBRE ACCESO a las Escituras; algo que estaba restringido y por lo que muchos dieron sus vidas. La Biblia tiene solo una interpretación, si bien es rica en matices por medio de los que Dios habla a cada uno por acción del Espíritu Santo. Si los papas, o quien quiera hacerlo, puede aportar algo que enriquezca mi conocimiento y comprensión de la Biblia, les estaré agradecido y les prestaré mi máxima atención.
 
Respondiendo a Abel. Coruña

Antonio
31/01/2012
22:18 h
4
 
La Biblia sin interpretación es solo un libro de papel, ¿quién garantiza que lo que entendemos de ella es cien por cien lo que Dios ha querido transmitir?. A grandes rasgos podemos llegar a ciertas posturas hermenéuticas afines, pero también podemos formular a partir de ella misma auténticos disparates doctrinales. Dios no sólo ha querido preservar su palabra sino que a través de la historia el Espíritu Santo necesariamente ha obrado para que lo que podamos entender de ella sea la verdad que el ha prefigurado. Cuando el Señor dijo que el Espíritu Santo guiaría a toda la verdad no sólo hablaba de la palabra escrita sino del ministerio de la Iglesia en cuanto al discernimiento de esa verdad
 
Respondiendo a Antonio

domingo
30/01/2012
22:59 h
3
 
He aquí una de las afirmaciones más contradictorias de Lutero ... el ser 'cautivo de las Sagradas Escrituras' y menospreciando las enseñanzas de los papas y concilios. El porqué contradictorio? ... porque a travez de sucesivos concilios (antes y despues del cisma de la Iglesia Católica) fueron los que establecieron el canon de las Escrituras y lo declararon 'Sagradas'. Al no existir certeza acerca de la validez de lo resuelto por los concilios, pues se pierde la certeza de que la Biblia sea Palabra de Dios. Al reconocer que la Biblia sea Palabra de Dios, pues se admite la autoridad de los concilios. Es llamativo que a un erudito como Lutero se le haya escapado ese detalle ... es interesante
 
Respondiendo a domingo

Miguel Wickham
28/01/2012
15:02 h
2
 
Ay!, Cesar! Con estos relatos cortos, y aunque sabemos todos lo que pasó, me tienes en vila! Gracias por tu labor, y espero que sirva para que muchos entiendan la verdaderas orígenes de la Reforma. Ojalá todos los que nos llamamos cristianos apreciáramos las escrituras como lo hizo Lutero en Worms, lo que dicen y no lo que cada uno interprete. Espero con impaciencia el siguiente relato!
 
Respondiendo a Miguel Wickham

José Luis Medina Rosales
28/01/2012
15:02 h
1
 
Este artículo es exultante porque eleva el alma ante el digno comportamiento de Lutero en esa hora crucial para él y para la Humanidad. El historiador inglés Thomas Carlyle describiría este momento como 'La escena de mayor grandeza en la Historia Moderna Europea... originándose en ella la subsiguiente historia de la civilización' ('Los Héroes', pag. 128, Espasa Calpe Argentina). Gracias D.Cesar por su magnifico trabajo de investigación histórica.
 



 
 
ESTAS EN: - - - Lutero: Mi conciencia, cautiva de la Palabra de Dios
 
 
AUDIOS Audios
 
La década en resumen: teología, con José Hutter La década en resumen: teología, con José Hutter

La conmemoración de la Reforma, las tensiones en torno a la interpretación bíblica de la sexualidad o el crecimiento de las iglesias en Asia o África son algunos de los temas de la década que analizamos.

 
Intervalos: Disfruten de la luz Intervalos: Disfruten de la luz

Estudiamos el fenómeno de la luz partiendo de varios detalles del milagro de la vista en Marcos 8:24, en el que Jesús nos ayuda a comprender nuestra necesidad de ver la realidad claramente.

 
2020, año del Brexit 2020, año del Brexit

Causas del triunfo de Boris Johnson y del Brexit; y sus consecuencias para la Unión Europea y la agenda globalista. Una entrevista a César Vidal.

 
7 Días 1x08: Irak, aborto el LatAm y el evangelio en el trabajo 7 Días 1x08: Irak, aborto el LatAm y el evangelio en el trabajo

Analizamos las noticias más relevantes de la semana.

 
FOTOS Fotos
 
Min19: Infancia, familia e iglesias Min19: Infancia, familia e iglesias

Algunas imágenes del primer congreso protestante sobre ministerios con la infancia y la familia, celebrado en Madrid.

 
X Encuentro de Literatura Cristiana X Encuentro de Literatura Cristiana

Algunas fotos de la entrega del Premio Jorge Borrow 2019 y de este encuentro de referencia, celebrado el sábado en la Facultad de Filología y en el Ayuntamiento de Salamanca. Fotos de MGala.

 
Idea2019, en fotos Idea2019, en fotos

Instantáneas del fin de semana de la Alianza Evangélica Española en Murcia, donde se desarrolló el programa con el lema ‘El poder transformador de lo pequeño’.

 
VÍDEOS Vídeos
 
Héroes: un padre extraordinario Héroes: un padre extraordinario

José era alguien de una gran lealtad, la cual demostró con su actitud y acciones.

 
Programa especial de Navidad en TVE Programa especial de Navidad en TVE

Celebración de Navidad evangélica, desde la Iglesia Evangélica Bautista Buen Pastor, en Madrid.

 
Primer Congreso sobre infancia y familia, primera ponencia Primer Congreso sobre infancia y familia, primera ponencia

Madrid acoge el min19, donde ministerios evangélicos de toda España conversan sobre los desafíos de la infancia en el mundo actual.

 
 
Síguenos en Ivoox
Síguenos en YouTube y en Vimeo
 
 
RECOMENDACIONES
 
PATROCINADORES
 

 
AEE
PROTESTANTE DIGITAL FORMA PARTE DE LA: Alianza Evangélica Española
MIEMBRO DE: Evangelical European Alliance (EEA) y World Evangelical Alliance (WEA)
 

Las opiniones vertidas por nuestros colaboradores se realizan a nivel personal, pudiendo coincidir o no con la postura de la dirección de Protestante Digital.