Una lucha sin cuartel

Llegué después de realizar un viaje de más de cien kilómetros a solas en mi coche. En las horas previas al evento, en el momento de salir de casa y más aún cuando ya te preparas para intervenir, te das cuenta que en esos instantes ofreces lo mejor de ti, porque lo único auténtico, lo que verdaderamente merece la pena, es compartir con las personas que se reconocen necesitadas la hermosa palabra de Dios que nos dejó nuestro Señor Jesucristo.

Y eso que en esos momentos te llegas a plantear más de una vez si todo esto merece la pena, si tanto esfuerzo y tanto sacrificio algún día tendrá recompensa en esta Tierra. Es inevitable cuando la responsabilidad es tan grande, cuando las sombras alargadas del miedo a fracasar o a defraudar a alguien te persigue. Esos miedos como sombras se presentan muchas veces en los momentos mas duros, los de la soledad, junto al que ya considero mi amigo el silencio y bajo la fría mirada de la noche.

Pero ¡he aprendido ya tantas veces a luchar contra esos temores, contra esos miedos y las dudas que asoman tras la puerta del mano a mano contigo mismo! Y tengo que decir que siempre ocurre lo mismo… lo único que hay que tener es paciencia, saber esperar el momento que llegará, dejar pasar el turbio lenguaje del autor temeroso de su pluma sin inspiración.

Porque tal como dice la Biblia, "He aprendido a contentarme cualquiera que sea mi situación". El autor sabía bien de los momentos difíciles, puntiagudo; pero aprendió a que esos momentos malos pasarían y después saldría fortalecido por haber superado la prueba en el día malo.

Sabiendo todo esto llegué al lugar, y después pude exponer la palabra con valentía y poder de Dios, como pasa siempre en cada acto que en el que puedo exponer la Palabra. Se reunieron más de 400 personas, y hubo un grupo de veinte que recibieron al Señor en sus vidas. Sólo por eso ya merece la pena el tener que luchar con gigantes tan grandes, esos monstruos que en mayor o menor medida a todos nos perturban con pensamientos lúgubres y de cobardía, pero a los que debemos siempre intentar vencer, porque si no nunca sabremos el resultado que nos puede dar nuestro esfuerzo.

Bueno os recuerdo que el día 13 DE MARZO tendrá lugar EN EL PALACIO DE DEPORTES DE MADRID a las 18:00 el evento de JESÚS ADRIÁN ROMERO Y JUAN JOSÉ CORTÉS; y que el día 26 DE MARZO en la PLAZA DE TOROS DE LA ALGABA (SEVILLA) a las 20:00, estará MARCOS WITT TAMBIÉN CON UN SERVIDOR. No te pierdas ninguno de estos dos eventos. Serán de bendición

Dios te bendiga