Los distritos y los barrios son ciudades adosadas: Campos misioneros dentro de su entorno geográfico

“Mientras esperaba en Atenas a Silas y a Timoteo, Pablo se sentía exasperado

al ver la ciudad sumida en la idolatría” (Hechos 17:16).

Cada Distrito y Barrio tiene su idiosincrasia, su identidad, su perfil sociológico, sus miserias y prosperidad, su arrogancia y su humildad; su religiosidad y espiritualidad, su ateísmo y su idolatría; sus tendencias políticas y su historia ¿Saben esto los misioneros y las Agencias misioneras que vienen a España a trabajar?

La Misiología más puntera en el mundo cristiano evangélico, está enfocándose en una variedad de entornos: multiculturales, lingüísticos, ideológicos, religiosos, espirituales y geográficos que, están no solo en los pueblos y ciudades donde aún no hay presencia de iglesias cristocéntricas y bibliométricas; también nos estamos interesando más y más en los barrios dentro de cada ciudad; porque ya no es adecuado mirar una ciudad y considerarla como un todo, hay necesidad de considerarlas como una aglomeración de fronteras, no físicas pero sí identitarias y mucho más. Son ciudadanos que viven entregados a una variedad de identidades, las cuales defienden una pluralidad de formas y en distintos tiempos a lo largo del año, sus festividades (casi cada barrio tiene su feria y, en el caso de las grandes ciudades andaluzas, cada barrio tiene sus Cofradías, Hermandades y Pasos de Semana Santa). Así es que, las actuales ciudades son un ramillete de sociedades que, lo más destacable que les identifica, como habitantes pertenecientes a la misma, es la pertenencia a ese barrio.

Nadie que pretenda con sus estrategias alcanzar a la sociedad de un determinado pueblo y o barrio, hará bien, si no estudia esa ciudad y o barrio, de forma que antes de comenzar a predicarles el evangelio se provea de un mínimo estudio de acercamiento a las identidades humanas, sociales, culturales, filosóficas y espirituales que se mueven dentro de tales lugares. Porque no alcanzara a tal población haciendo una siembra y evangelización al estilo de “riego por aspersión”. Las personas son altamente complejas y lo que es atractivo o interesante para unos es despreciable o insignificante para otros. Como dice el refrán español “hay que arrascar donde pica”. Los acercamientos en modo rebaño no son productivos desde el punto de vista misiológico, por lo menos en España. El estudio del Perfil Etnográfico es un trabajo minucioso, pero vale la pena hacer inversiones de investigación previas a la ejecución de los grandes, medianos y pequeños esfuerzos.

Por ejemplo. Madrid sabemos que tiene 21 Distritos y 131 Barrios. Es necesario que, se dediquen equipos que investiguen si ya hay congregaciones en cada Distrito, y lo mismo hay que hacer con los 131 Barrios. La primera estrategia nos la proporciona los resultados de las investigaciones nos van a dar datos muy importantes para que, a la hora de hacer campañas de evangelización, le demos prioridad a los Distritos que no tienen presencia de congregaciones Evangélicas y lo mismo en los Barrios sin presencia Evangélica. La segunda estrategia puede ser la de hacer una llamada publicitaria a escuchar el Evangelio presentado en lugares escogidos en los Distritos y Barrios sin congregaciones. De tal forma que la zona a evangelizar reciba un impacto. La tercera estrategia que debe ser puesta de antemano, es la mucha oración previa, para que, con los resultados de la campaña, podamos constatar que algún Distrito y Barrio que sabíamos que no tenía congregación, ahora como uno de los frutos de el esfuerzo, ya se comienza a tener presencia donde no la había.

En Madrid capital hay un 80% de las más de 556 congregaciones que hemos contabilizado en toda la Autonomía. Tendrán que ser esas congregaciones las que se enfrenten en los próximos diez años a culminar la tarea de que en los 131 Barrios haya no menos de una congregación. Sabemos que este no es el único reto que tienen las iglesias ya presentes (también están los 33 pueblos de la Autonomía que, aún no tienen ninguna congregación y la están necesitando urgentemente), pero su fuerza debe ser bien medida y bien encauzada; Dios es todo poderoso y de él se puede esperar toda la ayuda necesaria; a nosotros nos toca el crecer en fe, en visión, en oración y en diligencia, para lograr de la mano del Señor todo aquello que ahora físicamente no podemos contemplar, pero que mediante los esfuerzos constantes de movilizar a los miembros de cada congregación, será una realidad dentro de diez años.

También el Señor ha provisto a las iglesias ya existentes dentro perímetro de los 21 Distritos, enviar desde otras naciones, a decenas de misioneros. Juntos en la mayor unidad posible y aprecio por el trabajo de cada uno, habrá un gran potencial funcionando mes a mes y año a año. Estamos convencidos de que, con el favor del Señor y la acción poderosa del Espíritu santo, convenciendo de pecado, de justicia y de juicio, toda Madrid escuchará el evangelio y podrá contar con al menos una congregación en cada barrio donde hasta ahora no la tiene.

De igual manera, consideremos la ciudad de Barcelona.

Son 10 Distritos y 73 Barrios. Cabe preguntarnos si, el liderazgo ya presente en esta gran ciudad es conocedor de la presencia e implantación de las Iglesias evangélicas en su interior y, además y muy necesario, si conocen dónde ya hay congregaciones y dónde aún no existe ninguna. Estas informaciones tienen desde nuestro punto de vista en Evangelismo a Fondo, una relevancia destacable a la hora de desarrollar nuevos esfuerzos de implantación; además, son datos imprescindibles para no sólo las iglesias ya existentes y para su deseo de multiplicarse, sino para aquellas Agencias Misioneras e Iglesia extranjeras que son llamadas a enviar más obreros; pero en tales casos, el conocer de antemano donde no hay todavía una congregación, puede ser lo que determine donde sugerir que la próxima pareja decida instalarse y comenzar su labor de testimonio y evangelización. Cada barrio necesita una “Parroquia Evangélica”; de esa forma la Obra de Dios en una ciudad alcanza un perfil: multifacético, social, cultural, económico y hasta profesional.

Ni que decir tiene que, esta estrategia para alcanzar con: Visión, Oración, Pasión y Compromiso de Misión dentro de las mayores capitales, es algo ineludible que se tenga en cuenta y se haga cuanto antes.

Sevilla ya tiene este plan desde hace 13 años.

La Misiología contemporánea en España debe contemplar mucho más de lo que lo ha hecho, el “hacer parroquia” en cada lugar donde hay un punto de testimonio del Evangelio. La mejor forma de conseguirlo es, trabajando para alcanzar a los ciudadanos que viven dentro de ese Barrio que estamos evangelizando. Porque no ayuda a establecer membresía estable, el que el 95% de los que se reúnen en una congregación sean creyentes que residen en otros Barrios o incluso en otras ciudades más o menos cercanas. Este mal o defecto que por muchas décadas venimos arrastrando y sufriendo, nos ha perjudicado más que beneficiado para implantarnos significativamente en el Distrito y en el Barrio; es frecuente escuchar de las personas a quienes nos acercamos a compartirles el evangelio que, nos confundan con Testigos de Jehová o con Mormones, de todo menos con los Evangélicos y eso a pesar de que llevemos de 20 a 30 años reuniéndonos en ese Barrio.

¿No es esto un asunto de importancia suficiente como para tenerlo en cuenta y para tratar de hacer cambios significativos, en nuestros modos de implantarnos en: los Pueblos, los Distritos y los Barrios que, aún no tienen ninguna congregación? ¿No les parece? Trabajemos con una misiología autóctona, propia, teniendo en cuenta las necesidades sentidas de la obra de Dios y no con las imaginadas (frecuentemente venidas de otros países) pero no concebidas ni pensadas teniendo en cuenta el contexto y la idiosincrasia de España.

Bibliografía:

https://elpais.com/espana/elecciones-madrid/2023-06-04/la-izquierda-gana-en-39-de-los-131-barrios-de-madrid-y-otros-11-datos-ocultos-de-las-elecciones-madrilenas-donde-arrasa-vox-y-cs.html