Hemos pasado de escaso tiempo con la familia a estar todo el tiempo con ella. Y eso ahora ¿cómo se gestiona?

Hasta hace unos días pasábamos mucho tiempo trabajando y al llegar el final del día nos alegrábamos de estar con los nuestros, anhelábamos que llegara el fin de semana para así y entre otras cosas, pasar tiempo con la familia. Sin embargo ahora la balanza se ha invertido para la mayoría.

Ahora muchos de nosotros trabajamos desde casa o simplemente ya no trabajamos, y el tiempo de convivencia se ha convertido en un 100%.

Ahora el reto es mantener mis relaciones saludables y reforzarlas. Pero ¿qué dificultades vamos encontrando en el camino?. Seguramente a estas alturas ya te habrás dado cuenta de tus obstáculos.

Yo en mi caso he ido identificando algunos y elaborar una lista de ellos me ayuda a reflexionar cada día, con el fin de buscar recursos y soluciones para el siguiente día. Estos a son algunos de los míos, que coincidirán seguro con los tuyos:

OBSTÁCULOS

· Rutina.

· Espacios limitados.

· Emociones (desánimo)

SOLUCIONES

· Planning diario.

· Cada mañana empezar recordándome cómo quiero que sea mi día en función de un valor elegido. El mío de hoy ha sido el VALOR de la ALEGRÍA.

Convivencia hijos

En mi afán de hacérselo más agradable esta cuarentena a mis hijos, se me ocurrió que cada uno de ellos se implicaran en sus propios horarios. Cada día tendrían que decidir sus actividades en función de lo siguiente (actividad de pantalla, tarea de ayuda en casa, deporte, videojuegos, música, lectura, tareas escolares…) y detallar la hora de cada actividad a lo largo del día.

Lo que descubrí cuando mis hijos hicieron esta tarea para gestionar su propio tiempo fue:

- Evitaba ir detrás de ellos cada día repitiéndoles lo que tenían que hacer.

- Se involucraban mejor en sus quehaceres menos atractivos.

- Se reducían las discusiones, quejas y réplicas.

- Se sentían más autónomos en la gestión de su día.

- Mayor equilibrio vital.

- Les ayuda a estar más centrados

Valores

Recordarme a diario los valores que quiero trasladar a mi familia en estos días de confinamiento también está siendo de gran ayuda. Recordarme cada mañana qué valores quiero enfatizar más, me sirven de brújula en el día para la navegación casera.

Por ejemplo, si mañana decides que sea el valor estrella La ALEGRÍA, piensa qué acciones concretas dirigidas a tu familia estarán conectadas con ese valor (mostrar ese valor a tu familia implicará mostrar sonrisas, animosidad, entusiasmo a la hora de hacer las cosas, y además estimulará tu ingenio para pensar en actividades familiares que insuflen alegría en tu familia).

¿Te sumas al reto de pensar cada día en un valor y llevarlo a cabo?

Si decides hacerlo cuéntame qué tal te ha ido y podremos inspirarnos juntos, así y de este modo se nos harán estos días más llevaderos.

Mostrar un valor cada día te ayudará a seguir una hoja de ruta. Ahora que los niños ya tienen sus tareas escolares asignadas, el valor de la disciplina y el esfuerzo serán de ayuda de lunes a viernes. Ayúdales a trazar su propia planificación y te sorprenderás lo bien que lo hacen.