Que nuestra Reforma fue “Reforma” y Española, ya lo hemos acreditado. Lo de Reforma, depende del ámbito que se le quiera aplicar, en nuestro caso tiene que ser muy reducido en su significación. Que tuvimos “Reformadores”, eso es evidente. Que fueron especiales, también. Una gran bendición. Una gran aportación a la Historia.
Que rescatar la memoria de esa Reforma y de sus gentes ha sido tarea trabajosa, es evidente. Pero ha sido un campo de encuentro de muchos, que ha producido muchos frutos. Y sigue. Que fue una manera nuestra Reforma de hacer ciudadanía, está claro; que rescatarla es una forma de seguir haciéndola hoy, también es así. Que realmente rescatar, rescatar, más que nosotros a ellos, los del XVI, son ellos los que nos rescatan hoy a nosotros, ya queda dicho.
Cada año, desde hace ya varios, al final de octubre, tratamos de esa Reforma en un congreso en la Universidad Complutense. Así será, d. v., también este próximo octubre, los días 30 y 31. (Con la colaboración del Consejo Evangélico de Madrid.) Dirigido por el profesor José Luis Villacañas, con la presencia de los colaboradores del Centro de Investigación y Memoria del Protestantismo Español (Cimpe),
en esta ocasión se tratará como parte de la Reforma Española del XVI, “la Reforma en Hispano América”. No tenemos cartel, ya se hará.
Se pensó al terminar el anterior en centrar el tema en “la mujer en la Reforma Española”. Es asunto siempre valioso, del que ya tenemos bastante material de trabajo, y se puede presentar en próxima ocasión. El tema propuesto es necesario. Es un terreno de exploración, de “conquista”; como en otros espacios de la Historia, han cubierto de cenizas y humo ese primer tiempo de la conquista. Luego queda una presencia de un papado de Contrarreforma, que es el que queda en la imagen trasladada hasta el presente.
Existen algunas parcelas de ese periodo, como la colonia Welser en Venezuela (1528-46), o la presencia protestante en La Florida o en Brasil (la próxima semana, d. v., les pongo unas notas sobre esa presencia en Guanabara), pero no se ha colocado una mirada desde nuestra Reforma, ahora lo proponemos.
Con ese encuentro nos encontramos hoy.
Latinoamérica, o Hispano América, ayer con su circunstancia, hoy con la propia, y el Evangelio que llega, el Cristo que se encuentra con sus redimidos, aquí y allí. Es un campo de investigación de gran actualidad, de vivencia práctica para nuestro presente, de modos que se deben medir, de hacer nuestro presente con la vivencia del pasado.
En el programa se incluirá algo de lo que supone la presencia protestante en esas tierras en tiempos posteriores. De eso hay más material.
Por supuesto, ya existen estudios valiosos por compañeros que aquí mismo escriben (pienso especialmente en México), de esos estudios también usaremos.
De todos modos, ese primer tiempo no ha recibido mucha atención, desde luego muy poco desde la perspectiva que el congreso propone. Existen estudios de aspectos parciales, se tendrán en cuenta. Tengo algunos contactos en Perú; su Historia en ese periodo es muy valiosa; queda el espacio abierto para recibir profesores e investigadores que nos aporten sus trabajos, será una buena ocasión de libertad académica.
Si nos encontramos con el espacio histórico de inicios del XVI con esas tierras y sus gentes, lo que supone encontrarse con uno mismo en su otro, que es la manera de existir en comunidad aquí en la tierra, será ocasión óptima para que los profesores, investigadores, y
todos los interesados de allá que estén ahora en Madrid se encuentren con los suyos en ese congreso, y que nos ayuden con su presencia y aportaciones históricas si las tienen. Incluso el Día de la Reforma que podamos celebrar, como es costumbre de clausura, lo haremos con esa perspectiva, la propia del congreso. Muy buena ocasión de encontrarse en la reflexión y la fiesta de la memoria de la Historia. (La participación en el congreso es libre, recuerden, el 30 y 31 de octubre.)
De paso.
Nuestros libros de la colección Investigación y Memoria, donde se incluyen los textos del Schäfer ya aquí señalados en otras semanas, los distribuye Marcial Pons (cuya editorial y librerías son referente reconocido en el campo de las ciencias humanas); este acuerdo será inicio de buen camino.
La próxima semana, d. v., todavía “haremos ciudadanía” con eso de la presencia protestante en Guanabara; luego haremos iglesia.
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