viernes, 5 de julio de 2024   inicia sesión o regístrate
 
Protestante Digital

 
13
 

Nunca sin corbata

¿Será generacional el ir descorbatado, desaliñado e indecoroso a las capillas en el tiempo de hoy?
DESDE EL CORAZóN AUTOR Roberto Velert 17 DE MAYO DE 2014 22:00 h

Quizá porque escribo con las ideas del Domingo en que celebramos el “Día de la Madre” y, por tanto, me vienen bellos recuerdos de su natural saber educar, mezclará este aprendiz de escribidor, unas observaciones, surgidas en parte por las recomendaciones maternales acerca de “mi vestir” y en parte de una pregunta dominical de uno de mis nietos: “Yayo ¿por qué siempre llevas corbata” y esto me lo pregunta en un Domingo, recién venido él de la Iglesia, donde al parecer no está acostumbrado a ver muchas corbatas. Claro que yo tampoco las veo mucho, incluso entre los Pastores que ofician cultos, pues he podido ver celebraciones de “Santa Cena” en pantalones bermudas, chancletas de playa (la música de fondo no era del grupo “No me pises que llevo chanclas”) y camisas floreadas, naturalmente “sin corbata”. Pero, a lo que iba.
Mi madre que intentó educarme con la graciosa frase de “no naciste con tu libro de instrucciones, yo soy tu instructora básica” y recordándome de cuando en cuando que “yo no era el rey de la casa” lo cual me ha liberado de sufrir el síndrome del Emperador; además de dirigir mis entusiasmos a los valores y tratar de seducirme con lo valioso de los mismos me repetía que la madurez consistía en controlar deseos y tener paciencia en las gratificaciones. Y aún más, desde que conoció el Evangelio, me repetía que la riqueza interior, la paciencia y la medida, son grandes brújulas de la vida. La voluntad, los sentimientos, las emociones, la sexualidad y la inteligencia deben estar regidos por estas cualidades y las espirituales, para disfrutar de una vida plena y serena. Y aún más, explicándome que la importancia de la noble “autoestima” es una de las mayores riquezas, me creaba toda esta información, para influirme también en la “autoimagen”; y es aquí, donde “Desde el Corazón” y los recuerdos quería llegar.
Tenía que vestir, aunque pobre: limpio, decorosamente y elegante. Me recordaba cómo era mi padre; humilde pero menos para trabajar, siempre con traje, corbata y sombrero (a esto no he llegado aún). La vida, hijo, me decía: “es argumental, necesita de unas estructuras, de los mejores fundamentos que le den consistencia, como los que nos dan los evangelios: amor, fe, trabajo, cultura, protocolo y amistad” Por lo que vestir adecuadamente, era también una forma de lenguaje no verbal.
Luego, cuando ya me conoció como “Pastor Ayudante”, siguió insistiéndome en la importancia del buen vestir, como si fuera un uniforme. “Sí, sí –me decía- ya sé que el hábito no hace al monje, pero vestir con decoro, elegancia y pulcritud es una expresión de adhesión a los valores que el culto al Señor requieren”. Y seguía con sus simples ejemplos, pero casi incontestables: ¿No se viste el Juez con su toga? ¿Y el médico no infunde ya respeto y confianza con su bata blanca? ¿El militar no define lo que es con su uniforme? y hasta me ponía como ejemplo –pues era una aficionada y entendida en temas de toros- que en el pasado la gente a donde mejor vestida iba era a los toros. Las camisas blancas planchadísimas, y los señores de las primeras filas de sombra con corbata y puro, y las señoras tan bien vestidas que daban gloria. Y para broche me recordaba el valor de las vestimentas sacerdotales del Antiguo Testamento, en su belleza y en sus significados didácticos.
Recuerdo estas lecciones y “Desde el Corazón” me digo: ¡Cuan sorprendida se sentiría hoy! si descubriera el desaliño indumentario para ir hoy a la casa del Señor, y para desarrollar ministerios que en todo detalle máximo deberían darle honra y dignidad.
¿Será generacional el ir descorbatado, desaliñado e indecoroso a las capillas –no de toros- en el tiempo de hoy? No, porque las mismas personas que para ir a la Iglesia cualquier ropaje basta, cuando se trata de sus fiestas protocolarias, banquetes, ceremonias y otras especiales reuniones, bien que se acicalan. ¿Y el culto a Dios, y el servicio en el templo no se merecen la más digna indumentaria? ¿Es que acaso, esta misma no da una imagen de nosotros mismos, y de lo que representamos?
Los que se sientan en una terraza a tomar un refresco, o asisten a los toros en los tendidos de sol, es lógico que anden despechugados, porque en tales casos y espacios la estética lo permite y hasta son de belleza los contrastes. Pero en el espacio de la casa del Señor, la elegancia, el decoro, la limpieza y en casos el uniforme, son también una forma de ensalzar el lugar y el tiempo que a Dios se dedica.
Si alguien objeta, que son costumbres de antaño; no todas las costumbres de nuestros antiguos son desdeñables. Lo despreciable es abrazar la comodidad en perjuicio de la armonía y el buen ejemplo. Sí, mi madre tenía razón, hay que formarse con los valores más valiosos. La madre más ejemplar y elegante del mundo mundial.
 

 


13
COMENTARIOS

    Si quieres comentar o

 
Respondiendo a

MAKKO
28/08/2014
17:40 h
13
 
Los fariseos también se fijaban en la apariencia externa y ya sabemos cómo los calificó Jesús. ¿Seguro que el pastor Velert no es capaz de escribir algo más inteligente y acertado? Yo creo que sí, y le animo a ello. Por cierto, las mayores barbaridades y aberraciones que he escuchado desde un púlpito ha sido a gente perfectamente 'trajeada y corbateada' la cual, por cierto, exige el mismo vestir a los demás.
 
Respondiendo a MAKKO

Fernando Gonzalez
28/05/2014
09:26 h
12
 
Mientras perdemos el tiempo el diablo hace su trabajo. Roberto lo próximo que sera ¿hablar del sexo de los ángeles? Lo importante sale del corazón, hay golfos con corbata y hay personas muy dignas sin corbata.
 
Respondiendo a Fernando Gonzalez

Raúl
26/05/2014
18:48 h
11
 
No creo que sea un tema de debate actual, y si lo fuera siempre deberíamos verlo en el contexto social, político y económico. El Gran Sumo sacerdote superior a Melquisedec, no vistió ropa sacerdotal, usando la ropa normal para su época. Violo el sabbat y todas las leyes que aprisionaban al pueblo, sanidad, expulsión de demonios y su auto proclamación de su mesianismo. violando el Sabbat siendo merecedor de castigo mortal. Que sea recomendable usar traje alos ministros, hasta cierto punto, si el traje y la corbato va hacer un signo de autoridad, prestigio o supremacía sobre el hermano. Me parece que entonces estamos en la misma altura de la ICR que por tener el cuello clerical se atribuy
 
Respondiendo a Raúl

Javier Menéndez
26/05/2014
18:48 h
10
 
Yo desde luego no iría a los lugares donde se exija una apariencia impecable. Por una razón práctica, ya que me señalarían la puerta de salida. Eso si, amablemente, que para eso son cristianos. ¿Han leido la historia -aunque sea ficticia- del pastor Jeremías Steepek?. Supongo que para muchos de los que defienden que la apariencia es lo importante, lo que hizo dicho pastor será motivo de escándalo.
 
Respondiendo a Javier Menéndez

Xabier Laukizu
24/05/2014
22:10 h
9
 
Claro. Sin corbata no es posible ir 'elegante' (término que por otra parte me chirría bastante). Pero lamentablemente con los trajes (y las corbatas) ocurre como con los zapatos de tacón. Que resulta evidente quien está acostumbrado a usarlos y ridículo quien no tiene práctica. Es, a mi modo de ver, un debate absurdo. Se puede (se debe) exigir unos mínimos de higiene e imagen, evidentemente, pero centrar el debate en la corbata o el traje......... es ridiculo. Más me preocupan los que llevan traje por fuera y por dentro van como van. Entiendase la metafora.
 
Respondiendo a Xabier Laukizu

María Luisa
24/05/2014
22:10 h
8
 
Lo mejor que pueden hacer las madres es educar a sus hijos a ir con un corazón agradecido a la reunión de la iglesia, lo demás es lo de menos.
 
Respondiendo a María Luisa

Pablo
24/05/2014
22:10 h
7
 
Si alguien entra en la capilla a la hora en que la iglesia está reunida y va en bañador y chanclas no está pecando, ni tampoco se le debe echar de las instalaciones, no seamos hipócritas. No hace falta ir a la iglesia como si fueras a una boda, cada cual que haga como quiera, yo suelo ir 'guapo' a las reuniones pero tampoco voy de traje y corbata, ni me escandalizo si alguien viene en chándal o preparado para la playa. Desde luego a Dios no le importa como seas exteriormente si no que llegues con un corazón agradecido, esa es la mejor corbata con la que nos podemos presentar ante él.
 
Respondiendo a Pablo

Ale
24/05/2014
22:10 h
6
 
mmmmm en parte de acuerdo y en parte en desacuerdo...
 
Respondiendo a Ale

Ana
22/05/2014
21:17 h
5
 
Totalmente de acuerdo. De la misma manera que para ir a la playa no me visto con un traje, para ir a la iglesia no debo vestirme como para ir a la playa. Cada momento tiene su forma de vestir. Así de sencillo.
 
Respondiendo a Ana

noe
22/05/2014
09:59 h
4
 
felicidades...hasta que alguien se atrevio s decirlo.! totalmente de acuerdo, y cada quien hablara como fue educado, un aplauso a los padres y madres que educan a vestir descentemente a sus hijos para ir a la casa de Dios.
 
Respondiendo a noe

HEM
20/05/2014
19:50 h
3
 
El pasado domingo por la tarde en Barcelona, al llegar a las tranquilas calles del barrio de Sants, me encontré con hordas de caballeros enfundados en camisas sintéticas de manga corta y llevando horribles corbatas de colores. Traspiraban, se aflojaban el nudo de la corbata, pero no se la quitaban. Al poco tiempo llegamos a las Cocheras de Sants y oímos un ruido infernal, de música disonante y gritos. Claro, pensé, y le dije a mi hijo que me acompañara a ver el espectáculo. Una sala inmensa, atestada de gente vestida con “la roba de ir al culto”, que escuchaba extasiada el discurso, obsesivo y violento, de un predicador, encorbatado al estilo de Harry Potter. Le pregunté a mi hijo si se imag
 
Respondiendo a HEM

Sergio de Lis
20/05/2014
09:11 h
2
 
Pues yo, Roberto, tampoco fui 'el rey de la casa', ni mucho menos. Pero, como a ti, mi madre me instruyó en ir 'siempre arreglado'. Y eso lo observo rigurosamente al 'ir al culto'. Dios no se merece menos; los hermanos, tampoco. No considero la corbata imprescindible, pero sí que mi aspecto sea siempre intachable para todos.
 
Respondiendo a Sergio de Lis

Oscar Alexander Castellanos - El Salvador.
20/05/2014
09:11 h
1
 
Estoy totalmente de acuerdo que los predicadores de la Palabra cuiden su porte del bien vestir, pues somos transmisores del mensaje que fortalece al ser humano, y que muchos en su vida de pecado, no encuentran rumbo en esta vida. Con nuestra elegante y buena presentación corporal podremos crear un buen ambiente para que los receptores nos acepten. ¡Cuidemos nuestro buen vestir al transmitir el mensaje divino!
 



 
 
ESTAS EN: - - - Nunca sin corbata
 
 
AUDIOS Audios
 
La década en resumen: teología, con José Hutter La década en resumen: teología, con José Hutter

La conmemoración de la Reforma, las tensiones en torno a la interpretación bíblica de la sexualidad o el crecimiento de las iglesias en Asia o África son algunos de los temas de la década que analizamos.

 
Intervalos: Disfruten de la luz Intervalos: Disfruten de la luz

Estudiamos el fenómeno de la luz partiendo de varios detalles del milagro de la vista en Marcos 8:24, en el que Jesús nos ayuda a comprender nuestra necesidad de ver la realidad claramente.

 
2020, año del Brexit 2020, año del Brexit

Causas del triunfo de Boris Johnson y del Brexit; y sus consecuencias para la Unión Europea y la agenda globalista. Una entrevista a César Vidal.

 
7 Días 1x08: Irak, aborto el LatAm y el evangelio en el trabajo 7 Días 1x08: Irak, aborto el LatAm y el evangelio en el trabajo

Analizamos las noticias más relevantes de la semana.

 
FOTOS Fotos
 
Min19: Infancia, familia e iglesias Min19: Infancia, familia e iglesias

Algunas imágenes del primer congreso protestante sobre ministerios con la infancia y la familia, celebrado en Madrid.

 
X Encuentro de Literatura Cristiana X Encuentro de Literatura Cristiana

Algunas fotos de la entrega del Premio Jorge Borrow 2019 y de este encuentro de referencia, celebrado el sábado en la Facultad de Filología y en el Ayuntamiento de Salamanca. Fotos de MGala.

 
Idea2019, en fotos Idea2019, en fotos

Instantáneas del fin de semana de la Alianza Evangélica Española en Murcia, donde se desarrolló el programa con el lema ‘El poder transformador de lo pequeño’.

 
VÍDEOS Vídeos
 
Héroes: un padre extraordinario Héroes: un padre extraordinario

José era alguien de una gran lealtad, la cual demostró con su actitud y acciones.

 
Programa especial de Navidad en TVE Programa especial de Navidad en TVE

Celebración de Navidad evangélica, desde la Iglesia Evangélica Bautista Buen Pastor, en Madrid.

 
Primer Congreso sobre infancia y familia, primera ponencia Primer Congreso sobre infancia y familia, primera ponencia

Madrid acoge el min19, donde ministerios evangélicos de toda España conversan sobre los desafíos de la infancia en el mundo actual.

 
 
Síguenos en Ivoox
Síguenos en YouTube y en Vimeo
 
 
RECOMENDACIONES
 
PATROCINADORES
 

 
AEE
PROTESTANTE DIGITAL FORMA PARTE DE LA: Alianza Evangélica Española
MIEMBRO DE: Evangelical European Alliance (EEA) y World Evangelical Alliance (WEA)
 

Las opiniones vertidas por nuestros colaboradores se realizan a nivel personal, pudiendo coincidir o no con la postura de la dirección de Protestante Digital.