sábado, 23 de noviembre de 2024   inicia sesión o regístrate
 
Protestante Digital

 
 

Giotto: un banquete de sombras

Incluso los momentos más vívidos y portentosos de la historia son amenazados por el carácter perecedero del hombre; lo dice el salmo 36:9 (el hombre es un suspiro que se pierde entre las sombras)
MÁS LUZ AUTOR Daniel Jándula 31 DE MAYO DE 2013 22:00 h

DENIQVE SVM IOTTVS. QVID OPUS FVIT ILLA REFERRE? HOC NOMEN LONGI CARMINIS INSTAR ERIT (sea que yo soy Giotto ¿para qué más? mi nombre como un largo poema valdrá)

Al inicio de la vía Pecorari de Milán se yergue la iglesia de San Gottardo (venerado por los enfermos de gota), que fuer construida en 1330 como parte de una capilla y sepulcro ducal por (y para) el fundador del estado Azzone Visconti. El señor lombardo varió la dedicatoria original debido precisamente a su problema de gota y diseñó la torre con campanario de planta octogonal; aun sufriendo diversas remodelaciones, sigue siendo el primer caso de reloj público de la ciudad.

En el interior del templo, resiste a la degradación y a los terremotos un fresco sobre la crucifixión [ver imagen 1] en el que muchos de sus habitantes contemplan turbados la escena sin saber de su propia desaparición. A algunos de los presentes se les han desvanecido los ojos. Hay una figura que ve sus ropajes confundidos con el mismo tono del fondo; parece que alguien no tuvo la gentileza de explicarle que ese día no debía vestirse de cielo.

Los pigmentos que sobreviven son los más puros, los que dependen de la naturaleza del material antes que de la técnica que resulta de la emulsión de yema de huevo empleada para la mezcla. La opacidad del rojo cadmio conviene a la piedra, a pesar de la veloz decoloración. Queda la profusión de la tierra verde bajo el marfil negruzco. Faltan aún casi cinco siglos para el descubrimiento del azul de Prusia definitivo, y su fórmula tan solo se intuye: todo artista contemporáneo a Giotto sabe que la cochinilla (que luego se mezclaría con hierro y alumbre) acabará por desintegrarse.

Giotto di Bondone (1267-1337) trató que su obra perviviera en materia, probando la sangre de los animales, buscando una vivacidad intensa de lapislázuli; se esforzó en perfeccionar su habilidad, introduciendo un nuevo sentido del volumen y poniendo la excelencia al servicio de un escorzo vertical; expandió su imaginación hacia temáticas increíbles [imagen 2], variaciones casi obsesivas y elementos inéditos, como la incorporación de las cabezas de adultos flotantes, rodeadas de oro. Sin embargo, llegó pronto a ciertos lugares donde nadie quería quedarse: tuvo cierto éxito al final de su vida, pero pagando el precio de anticipar la deuda con la naturaleza que, según explica Vasari, cualquier artista contrae al instante de ponerse a crear... lo que desemboca en ser marcado para la posteridad como un ser repleto de dudas y sombras.

Giotto siempre despierta polémica. Cuando no es por la atribución de su autoría a un determinado mural, es por el modelo de preservación y restauración de sus obras... polémicas inherentes a un autor de hace siglos, pero especialmente afiladas en el caso del toscano, sobre cuyo legado e influencia circulan las más enfáticas y extravagantes. No son solo los terremotos físicos los que ponen en peligro los frescos; los seísmos en forma de disputa también prolongan la sensación de que poco puede hacerse ya para conservar la integridad de las pinturas.

La época en que vivió y desarrolló su arte Giotto tampoco fue fácil: el siglo XIV fue el siglo de las epidemias desconocidas, se produjo el descubrimiento para los europeos (en Florencia, por cierto) de la pólvora aplicada al armamento, y los gobernantes eran ciertamente desastrosos (pensemos por un momento en Alfonso XI, o en su sucesor Pedro I de Castilla, El Cruel para los amigos), incapaces de instaurar la paz y resolver las tremendas hambrunas que asolaron el continente; se sabe por pruebas con carbono que la temperatura de la superficie terrestre disminuyó sensiblemente, lo que afectó a las cosechas y dio inicio a lo que se conoce como Pequeña Edad de Hielo... ello unido a la lenta y penosa salida de la civilización de una oscura Edad Media para acabar en otra tiniebla más densa. Giotto debió morir creyendo que la humanidad no podía estar más cerca del Apocalipsis: en 1337 comenzó en Francia la Guerra de los Cien Años.

Teniendo en cuenta este contexto, brilla con fuerza la ruptura con la edad anterior en las formas, resalta el avance en la profundidad y el espacio. La renovación en la expresión de los rostros es inquietante por su realismo, y más aún, por su exactitud (en este aspecto, su influencia sobre artistas posteriores como Lorenzo Monaco [ver imagen 3], o Fra Angelico, es indiscutible); los explosivos tonos sembraron sin duda la admiración de pintores tan contemporáneos y obsesionados por el estudio del color como Rothko... siguiendo esta idea, se inauguró hace cuatro años en Berlín una importante exposición donde se podía comprobar la sensación tangible que cautivó al de Letonia en el trabajo sobre el pigmento como base estructural de la representación aún por fijar en el soporte.

Pero el tiempo es implacable. No es el único elemento en cuestión, aunque contribuye como pocos a desvanecer aquello que nos parecía sólido. La pintura mural sobre el festín de Herodes [imagen 2] es otro ejemplo: se intentó lavar el fresco a mediados del siglo XVIII, con deprimente resultado. Con todo, impresiona la escena: la disposición de los personajes, el músico en un aparte y ajeno a lo que sucede, los dos episodios con la cabeza de Juan Bautista (invisible pero ocupando su hueco) que pueden localizarse gracias a la versión de Monaco [imagen 3].

Incluso los momentos más vívidos y portentosos de la historia se ven amenazados por el carácter perecedero del hombre; lo decía el salmo sobre el hombre: un suspiro que se pierde entre las sombras (39:6). Lo curioso es que permanece el sacrificio mientras desaparece la crueldad.


Imagen 1
La crucifixión (detalle), 1339
Fresco
San Gottardo in Corte, Milán.

Imagen 2
El festín de Herodes, 1320
Pintura mural
Capilla Peruzzi, Santa Croce, Florencia.

Imagen 3
El banquete de Herodes, Lorenzo Monaco (Piero di Giovanni)
Tabla, 34 x 68 cm.
Museo del Louvre, París.
 

 


0
COMENTARIOS

    Si quieres comentar o

 



 
 
ESTAS EN: - - - Giotto: un banquete de sombras
 
 
AUDIOS Audios
 
La década en resumen: teología, con José Hutter La década en resumen: teología, con José Hutter

La conmemoración de la Reforma, las tensiones en torno a la interpretación bíblica de la sexualidad o el crecimiento de las iglesias en Asia o África son algunos de los temas de la década que analizamos.

 
Intervalos: Disfruten de la luz Intervalos: Disfruten de la luz

Estudiamos el fenómeno de la luz partiendo de varios detalles del milagro de la vista en Marcos 8:24, en el que Jesús nos ayuda a comprender nuestra necesidad de ver la realidad claramente.

 
2020, año del Brexit 2020, año del Brexit

Causas del triunfo de Boris Johnson y del Brexit; y sus consecuencias para la Unión Europea y la agenda globalista. Una entrevista a César Vidal.

 
7 Días 1x08: Irak, aborto el LatAm y el evangelio en el trabajo 7 Días 1x08: Irak, aborto el LatAm y el evangelio en el trabajo

Analizamos las noticias más relevantes de la semana.

 
FOTOS Fotos
 
Min19: Infancia, familia e iglesias Min19: Infancia, familia e iglesias

Algunas imágenes del primer congreso protestante sobre ministerios con la infancia y la familia, celebrado en Madrid.

 
X Encuentro de Literatura Cristiana X Encuentro de Literatura Cristiana

Algunas fotos de la entrega del Premio Jorge Borrow 2019 y de este encuentro de referencia, celebrado el sábado en la Facultad de Filología y en el Ayuntamiento de Salamanca. Fotos de MGala.

 
Idea2019, en fotos Idea2019, en fotos

Instantáneas del fin de semana de la Alianza Evangélica Española en Murcia, donde se desarrolló el programa con el lema ‘El poder transformador de lo pequeño’.

 
VÍDEOS Vídeos
 
Héroes: un padre extraordinario Héroes: un padre extraordinario

José era alguien de una gran lealtad, la cual demostró con su actitud y acciones.

 
Programa especial de Navidad en TVE Programa especial de Navidad en TVE

Celebración de Navidad evangélica, desde la Iglesia Evangélica Bautista Buen Pastor, en Madrid.

 
Primer Congreso sobre infancia y familia, primera ponencia Primer Congreso sobre infancia y familia, primera ponencia

Madrid acoge el min19, donde ministerios evangélicos de toda España conversan sobre los desafíos de la infancia en el mundo actual.

 
 
Síguenos en Ivoox
Síguenos en YouTube y en Vimeo
 
 
RECOMENDACIONES
 
PATROCINADORES
 

 
AEE
PROTESTANTE DIGITAL FORMA PARTE DE LA: Alianza Evangélica Española
MIEMBRO DE: Evangelical European Alliance (EEA) y World Evangelical Alliance (WEA)
 

Las opiniones vertidas por nuestros colaboradores se realizan a nivel personal, pudiendo coincidir o no con la postura de la dirección de Protestante Digital.