Una mujer alza su mano derecha extendida en medio de una asamblea de mujeres. Por lo que se ve en la foto, tomada desde atrás, con lo que hasta que se identifique la mujer permanecerá anónima, la mujer lo hace con determinación y firmeza pero sin estridencias ni bamboleos. Está levantada en medio de una asamblea en la que las demás mujeres están sentadas, pero lo hace en la última fila, con lo que no dificulta la visión a otros.
La foto es adecuada para ilustrar lo que es un culto, no un
espectáculto.
La foto dice más cosas. Muestra una reunión de mujeres que siguen con tranquila reverencia la participación en un canto del grupo de alabanza que aparece desenfocado en el fondo. Solemnidad, adoración y orden son benditos sinónimos en este caso. ¡Aleluya!
[re[La diferencia entre una y otra expresiones litúrgicas la conté así, al poco de iniciar su andadura, en la sección Religiones/Ciudadanía que creé y modero en Periodistas en Español:
Por una parte, culto solemne con música religiosa protestante “de toda la vida” y predicación racional a cargo de un pastor con una sólida formación teológica. De otro lado, ‘espectáculto’ con “música cristiana”, manos alzadas ondeando al modo de los conciertos de música pop y sermón emocional de un predicador al modo de los ‘tele-evangelistas’ americanos.Dicho artículo, por cierto,
La Unión de Mujeres Evangélicas (UDME), o cuando el ecumenismo empieza en casa, es el
quinto tema más visto de los 450 que llevamos publicados en los dos años de vida de la sección].
Hay más elementos importantes para la lectura de la imagen. La mano de la mujer nos dice que se trata de una mujer en plena y gloriosa madurez, casada. Una mujer trabajadora, indica esa mano abierta como dando gracias a Dios en las alturas por poder haber llegado hasta ahí sirviendo e implorando bendición para seguir activa echando una mano -nunca mejor dicho- en la dura faena de cada día en este valle de lágrimas… y bendiciones de lo Alto.
Todos son mujeres en esta foto, salvo dos. Uno, en el borde izquierdo de la foto, ahí tan discreto y anónimo en la imagen que le ven, de espaldas como todas, pues resulta que es el protagonista del acontecimiento en el marco del cual está tomada la foto. Es
Jaime Fernández, archiconocido columnista de este medio, quien tuvo a su cargo la serie de conferencias en el
47 Retiro Nacional de la Unión de Mujeres Evangélicas UDME) celebrado hace justo ahora un año en Peñíscola (Alicante).
Otro hombre aparece en la foto: es
Jesús Fernández, quien toca la guitarra en el grupo de alabanza de la Iglesia Bautista de Zaragoza, que tiene a su cargo parte musical y de alabanza del Retiro.
[
Un tercer hombre en la foto, el que justo hace visible la imagen -es su oficio en ese instante- queda totalmente invisible: el fotógrafo, un servidor].
La presencia con cara y ojos en la foto corresponde a
Rosita Dobato y
Aurora Millán, las voces del grupo de alabanza. Más que mostrados, sus rostros aparecen sugeridos por obra y gracia del desenfoque selectivo de la foto, justo para resaltar el impacto visual del brazo de la mujer, protagonista absoluto de la imagen.
Dice también mucho la discreta mano apenas alzada sobre la altura del codo de esta mujer en la parte izquierda de la imagenque además de recordar al observador la discreción y el recogimiento propios de la oración personal, también ilustra indirectamente la sagrada costumbre de la liturgia judía que no permite alzar la mano por encima de la altura de los labios cuando el creyente habla con el Eterno.
No es insignificante el peso de esta ‘manita’ en el conjunto de la imagen, pues confiere ni más ni menos que el equilibrio estático de la imagen. Es el elemento definitivo, el que remata el discurso visual.
[Equilibrio estático es el basado en la repetición de elementos equivalentes y/o simétricos -en esta caso las manos-, mientras que equilibrio dinámico es el que se obtiene por influencias contrapuestas, como son el hombre y los tanques en la
foto de Tiananmen con la que iniciamos esta serie de artículos].
Viene a cuento la publicación de esta foto a modo de humilde homenaje a la UDME, que hoy concluye la celebración de su 48 Retiro Nacional en Peñíscola. Ninguna otra organización ha trabajado tanto por la plena incorporación de la mujer a las iglesias y los entornos eclesiásticos como la organización que preside
Ana María Huck, quien ayer fue reelegida presidenta.
“La UDME es un caso totalmente pionero en Europa”, tenemos escrito.
----------------
Mujeres relevantes, “haberlas, haylas”
N. del A.- Hace justo un mes, en el acto de entrega del premio a la “Personalidad del Año” de la Alianza de Escritores y Comunicadores Evangélicos (ADECE) del que fui objeto, dije que me sentía abrumado por tamaño reconocimiento ante la “gran nube de testigos” que tenía allí delante inmerecido: Samuel Escobar, Máximo García Ruiz, Antonio Cruz, Félix Benlliure, Stuart Park, Gabino Fernández Campos, Alfredo Pérez Alencart, Juan Carlos Martín, José Pablo Sánchez… aparte de los que tenía a ambos lados: Pedro Tarquis y Juan Antonio Monroy.
No solo me reafirmo en lo que dije, sino que amplío el reconocimiento de más méritos que los míos a una serie de mujeres evangélicas que están haciendo lo posible y más por que Gálatas 3:28* no sea papel mojado.
Confieso que empecé a hacer una lista de mujeres evangélicas relevantes y voy llegando a las cincuenta, pero para que ninguna se me quedase fuera, me limitaré a enumerar en representación de todas ellas a unas pocas que están en puestos de responsabilidad en los medios de comunicación:
Asun Quintana en Protestante Digital,
Ana María Huck Vangioni en
Nosotras en la onda (Radio Encuentro) y la revista
Nosotras,
Joana Ortega en Lupa Protestante,
Noa Alarcón en Ediciones Noufront. O con colaboraciones destacadas en medios evangélicos (
Jacqueline Alencar –Sembradoras, Protestante Digital-,
Beni Moreno -Buenas Noticias TV-,
Esperanza Suárez -Protestante Digital, Radio Encuentro-
Beatriz Garrido -Protestante Digital y Nacer de Novo-,
Isabel Pavón en Protestante Digital…) o seculares (
María Rosa Medel - Periodistas en Español -Canfali Marina Alta-…).
La lista de mujeres evangélicas relevantes, ya digo, incluyendo todos los campos de actividad, se dispara. Ocasión habrá de traerla aquí.
De que hay ‘cantera’ entre las mujeres evangélicas en el ámbito de los medios tengo, sin ir más lejos, dos claros ejemplos en este Retiro de la UDME al que estoy asistiendo:
Edilene Andrade, cuyas fotos de esta celebración publicará este medio; y
Eva López Cañas, encargada de subir los
podcast del Retiro en el Muro de la UDME en Facebook.
Lo dicho: la religión es cosa de hombres… y mujeres.
* “Ya no hay judío ni griego; no hay esclavo ni libre; no hay varón ni mujer; porque todos vosotros sois uno en Cristo”.
Mujeres en Fe y Constitución: Comprometidas en hacer atractiva la teología
Si quieres comentar o