El 22 de noviembre falleció el Obispo Kuang-hsun Ting de China a los 97 años de edad. El Obispo fue líder por muchos años de la iglesia protestante oficial en China, siendo la persona más destacada del protestantismo oficial durante la última parte del siglo veinte.
Dirigió el Concilio Cristiano Chino (CCC) y el
Three-Self Patriotic Movement (TSPM; Movimiento Patriótico auto-gobernado, auto-sostenido, auto-propagado) estructuras del protestantismo oficial que están directamente ligadas al gobierno chino.
También fue presidente del seminario principal del protestantismo oficial en Nanjing por muchos años y fundó la Fundación Amity, organización muy reconocida, entre otras cosas, por su publicación de millones de Biblias que se utilizan a través del mundo.
Fue consagrado como obispo anglicano en 1955 y nunca renunció a ese puesto, aunque oficialmente desapareció el movimiento anglicano en China cuando el gobierno unió a todos los movimientos protestantes bajo el TSPM.
El obispo Ting fue reconocido y cuestionado por la manera que decidió trabajar con el gobierno comunista en China. Fue uno de los líderes que firmó el Manifiesto Cristiano en 1954 que declaró la disposición de las iglesias a trabajar con el gobierno y definió el concepto de que la iglesia china debía ser independiente de las estructuras extranjeras.
Trabajó bajo la Administración Estatal para Asuntos Religiosos (SARA por sus siglas en inglés) y aceptó la estructura oficial que reconoce a cinco religiones en China; protestante, católico, musulmán, budista y taoísta.
Sus relaciones con el sistema comunista lo pusieron en conflicto directo con las crecientes iglesias no-registradas en China y con las iglesias chinas anti-comunistas en el extranjero. En ocasiones fue acusado de apoyar la persecución de los cristianos que son parte de iglesias no-oficiales en ese país.
Ting también quiso desarrollar una reflexión teológica que naciera desde la realidad china y fue acusado de no estar de acuerdo con la doctrina cristiana de la justificación por la fe.
Ting nació antes de la revolución de Mao y comenzó su liderazgo en China, después de estudiar y ministrar en el extranjero, a principios de la revolución china. Vivió en carne propia las persecuciones de la revolución cultural china, pero sobrevivió esa época de persecución y llegó a ser el líder principal del protestantismo oficial en China. Aunque hacía años que no tenía una posición pública, por causa de su enfermedad, su muerte marca el fin de una época importante en el cristianismo chino.
La vida y el ministerio del Obispo Ting nos suscitan muchas preguntas sobre lo que significa ser fiel al evangelio en medio de la persecución y cuando el gobierno impone restricciones sobre la práctica de la fe.
Muchos cristianos en China optaron por tomar un camino diferente, con todas las consecuencias que eso implica. Pero dentro de la CCC/TSPM hay millones de cristianos fieles que buscan seguir a Cristo Jesús como una minoría en un sistema oficialmente ateo. Tanto las iglesias no registradas como las oficiales están creciendo y el gobierno ha cambiado su actitud hacia el papel de la religión en la sociedad.
El obispo Ting y la iglesia en China nos obligan a hacernos varias preguntas claves:
1.¿Cómo se es cristiano cuando uno es parte de una minoría perseguida?
2.Siendo que casi toda iglesia en todo país trabaja al lado del gobierno, de alguna forma, la pregunta que nos deja la iglesia china es: ¿dónde está la línea entre el nacionalismo y la fidelidad al evangelio?
Para algunos el Obispo Ting fue uno de los grandes líderes cristianos de su tiempo. Para otros fue una persona que se alejó de los valores cristianos para trabajar con el gobierno chino. Sin embargo, el Obispo fue una persona clave en el proceso de persuadir al gobierno comunista de China que necesitaba tomar en serio el papel de la religión en la sociedad.
El resultado ha sido un gobierno que está mucho más abierto a las expresiones religiosas de sus ciudadanos, aunque sigue persiguiendo a muchos por su fe. Fue en esa contradicción que el Obispo Ting buscó ser fiel al llamado divino sobre su vida.
Si quieres comentar o