Nadie tira piedras a un árbol sin fruto

Dicen que el hombre es el único animal que tropieza dos veces en la misma piedra. Tal vez sea que como tropieza dos veces en la misma piedra es un animal. De todos modos poco importa. El hombre no es un animal aunque tenga comportamientos que nieguen su imagen y semejanza de Dios.

La historia se repite, de ahí que algunos afirmen que la historia es cíclica, Es nuestra convicción cristiana que la historia ha tenido un principio, un momento cumbre irrepetible, y que tendrá un final. Este final será diferente según que el “árbol” humano tenga vida o esté seco. (Evangelio de Lucas 3:10) El árbol que tiene vida ha de llevar fruto.

No hace mucho nos encontrábamos con la noticia de las pintadas en la fachada de la Iglesia Evangélica de Cardedeu. (Barcelona). Podemos hablar del motivo o tema de las pintadas y de un innumerable número de argumentos que al final y a la postre están presentes en muchos medios, aunque tal vez no donde debería, la sede por excelencia del diálogo y debate: el Parlamento.

Esa imagen me hizo recordar otra que figura en un libro que todo cristiano evangélico debería leer. Todo español. Esa fue la recomendación que recibí de mi profesor de Filosofía del Derecho en la Universidad de Oviedo. Conocía el libro, y me había propuesto adquirirlo para leerlo, pero tuvo que ser un profesor de la universidad quien me diera el empujón definitivo. Para mi vergüenza, lo digo. El libro Samuel Vila: una fe contra un imperio de David Muniesa. Ed. Clie. En él figura una imagen que ilustra los tiempos vividos por un “David” que se enfrentó al “Goliat” de la sin razón, del fundamentalismo y de la intolerancia.

Mas de medio siglo de distancia, pero un mismo mensaje: discrepamos de vosotros, pero no os lo decimos a través del dialogo mirándoos a los ojos. Lo hacemos colgándoos el “sambenito” moderno que todo el mundo pueda ver y cual aviso de lepra apartarse de vosotros.

En 1935, en un contexto de grave fractura social con la violencia física presente en las calles, la radio de Gijón retransmitió un “culto” evangélico. Tras salir en las ondas alguien escribía en Acción(1) con el título Alerta con la Radio Emisora Gijonesa “Vais a permitir que en España posiblemente la Nación más católica del mundo unos pobres diablos secuaces del impuro Lutero se permitan la osadía de radiar sus cultos, sus cánticos, sus prédicas?...Gijoneses, no os preocupe el protestantismo local. Darle importancia sería lo mismo que darle valor a lo que no lo tiene… No admitimos sermones de capillas luteranas. Que se vayan. En la Patagonia y en las Regiones Polares hay muchos hombres esperándoles.”

Hoy, casi 75 años después con motivo de las actividades del Programa Aqu130 leemos en Internet(2) bajo el título de La herética pravedad, “Ya vale. Con la ayuda de ciertos medios (destaca La Nueva España) y políticos (rojos y protestantes siempre se han entendido: ambos están contra la Fe católica, y contra España), están consiguiendo dar cierto realce a las celebraciones del centésimo trigésimo aniversario (vaya una cifra) de la triste presencia en nuestra villa de la tristísima microsecta de los Plymouth Brethren, que se endosa aquí el ridículo alias de «Iglesia Evangélica». Llevan meses dando la tabarra. Ahora ocupan la pobre, desamparada y desacralizada Capilla de San Lorenzo, donde han montado una exposición de sus mostrencas creencias «bíblicas» y otras historias tan lejos del cristianismo como Gijón de Micronesia.” Concluye citando a San Ignacio de Loyola (carta a San Pedro Canisio, 1554): “Los predicadores de herejías, los heresiarcas y, en suma, cuantos se hallare que contagian a otros con esta pestilencia, parece que deben ser castigados con graves penas.”

Contemplando ambas imágenes, leyendo ambos textos, solo podemos elevar una oración y pedirle al Dios Todopoderoso que la iglesia en España sea un árbol que de fruto, y buen fruto. Pues, después de todo, como un hermano en Gijón afirmó(3), Nadie tira piedras a un árbol que no tenga fruto.

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1) Pudiera ser el periódico de tendencia republicana aparecido en Gijón en 1932, pero nos inclinamos mas a que se trate del Semanario de contenido religioso, también de la misma fecha, vinculado a Acción Popular.
2) http://voluntad.wordpress.com/2009/04/24/la-heretica-pravidad/
3) Marcos García miembro del comité Aqu130.