Breviario del sosiego/ 48

Es frecuente que el Maestro resulte incomprendido, aún por los que dicen seguirle.


Empeño feroz el de obtener ganancias rápidas. Recuerda que tal frenesí termina por estallar, más temprano que tarde.


Has de tu entorno un lugar de reconciliación, de futuro común.


Un rival (que no enemigo) puede garantizarte mayor lealtad que aquellos prestos a olvidar los innumerables parabienes que hasta ayer te brindaban.


José Ángel Valente, poeta, de los excelentes: “La Palabra poética sigue cerca de Dios y es Dios. Lo dice el Evangelista Juan: en el Principio era el Logos, el Verbo. Y el verbo estaba cerca de Dios y era Dios. Lo creo a pie juntillas. Apartarse de ello nos ha alejado de la capacidad creadora”.


¿Razón o intuición cuando de espiritualidad se trata? Es la intuición la que desbroza la senda que te acerca a Dios.


Ser bondadoso requiere de un elevado ejercicio de voluntad. Ser malvado es más fácil, pues basta dar rienda suelta a las distintas formas que hay dentro del hombre.


En tus ojos reconozco mis pensamientos.


Te he tomado sin oír a los astrólogos. Recibe lo que te doy, suficiente savia para el altar del amor. Y hagámonos uno, para que acontezca el provecho de los que se esposan para la dicha.


Sólo tras un gran silencio se detiene la Verdad, al brotar de la Palabra y atravesarla rumbo a lo inexpresable. Por eso el silencio es el máximo lenguaje que detenta Dios.


Hay quien se siente realizado preparando tropezaderos.


Escorpiones, ¿sólo en el desierto?


Revelación de lo Absoluto o resurrección de la noche de los Sentidos. Difícil sería vivir sin ambas, pues uno necesita ser ´víctima´ de esos dos relámpagos consustanciales al ser humano.


El sosiego no es sólo estarse quieto, sino que implica lograr una calma vigilante, a estribor y a babor del espíritu que responde o de la mente presta a restañar sus heridas.


¿Por qué hablas todo el día? ¿Así pretendes llenar tu pánico al vacío? Sé que resulta difícil mantener la boca cerrada, pero procura hacer el intento.


¡Cuántas diferencias en este planeta! Por una parte hay quienes, tras abundantes alimentos, se matan de hambre para estar delgados. Otros mueren de hambre por no tener qué llevarse a la boca.


Es sobre el que está alerta donde flamea la llama de la esperanza.


Veneno de plata es el soborno. También regalo de corrupción.