El País ha publicado en su edición de este sábado un bochornoso artículo sobre el crecimiento de iglesias evangélicas en la zona de Carabanchel.
El creyente en Cristo anhela la segunda venida del Señor, explicada por Pablo pero aún no realizada y gime con el último versículo del Cantar: “Apresúrate, amado mío”.
Fernandes clama desde sus páginas por aquellas mujeres que en algunos casos “poca o ninguna repercusión tuvieron en la época que les tocó vivir”.
Dirigida por el poeta Alfredo Pérez Alencart, la nueva entidad acogerá a autores de las dos orillas del castellano y el portugués.
La intolerancia protestante tuvo una gran responsabilidad en la persecución de muchos militantes de estos grupos, cuya indefensión era mayúscula ante los embates de gobernantes y líderes religiosos.
Es inglés, de Inglaterra, nacido en el condado de Lancashire. Sin embargo escribe en puro lenguaje de Castilla con una prosa natural y rítmica que, diría el francés Gaumont, como un movimiento respiratorio.
Encarnar la ternura significa también volver a ser como niños y niñas, como nos lo enseñó Jesús. Significa vivir de la ilusión, de la inocencia y de admirar todo lo que les rodea.
Además de llevar el gran mensaje del Evangelio, lo hace con corrección, conocimiento, y haciendo gala de una gran cultura en diversas áreas, hasta en la musical.
Surge eso que llaman cargo de conciencia. ¿Quién va a trabajar en las Iglesias de Santa Cruz y la Orotava? Todo estaba previsto desde las alturas.
La poesía de Alencart es una llama que Dios ha puesto en su alma, creo yo, desde la hora de su nacimiento.
Este autor, completamente enemistado con las posturas de los heterodoxos, se solaza en describir los itinerarios vitales y geográficos de quienes no cejaron en su intento por influir, a distancia, en el derrotero espiritual de España.
Menéndez y Pelayo advierte aspectos que hicieron de la aportación de esos “heterodoxos” a la grandeza de la cultura española cosa digna de notarse.
Freud aprendió más de los grandes maestros de la literatura universal que de los grandes psicólogos. Entre estos maestros no pudo faltar Cervantes.
La conversión de Graham Greene al catolicismo no fue vital, sino intelectual. No le atrajo la romanidad de la Iglesia católica. Por eso ha sido tantas veces puesta en duda la auténtica conversión de Greene.
Es la tragedia del ser humano. Somos nuestros mayores enemigos. Nos bastamos para destruirnos a nosotros mismos y a los que más queremos.
La intención es presentar un amplio panorama de la fascinación judía por las palabras, así como del manejo de las mismas para vehicular lo sagrado y lo cotidiano, lo trascendental y lo coloquial, lo rimbombante y lo minúsculo.
Unos presentan a Diderot como un charlatán deslumbrante, obsesionado con demoler la religión. Otros descubren al pensador profundo, en cuya cabeza, como decía Saint-Beuve, entran Goethe, Kant y Schiller a la vez.
Al igual que otros pensadores y artistas contemporáneos, Oz estaba convencido de que los fanatismos nacionalistas y religiosos comprometen seriamente la paz en el mundo.
El primer advenimiento del Mesías debía ser un advenimiento de humillación. Esa humillación comenzaría desde el momento de su concepción y nacimiento.
Pensamos que Darwin enterró a Dios pero, de hecho, en Génesis 3, el primer hombre creado también quiso enterrar a Dios.
Concluiremos que la permanencia de Sartre en el ateísmo ideológico no fue, precisamente, por falta de oportunidades para conocer al Dios de la Biblia ni por carencia de testimonios personales.
El trabajo que manifiestan sus composiciones es algo de lo que más se ha celebrado en su labor lírica, pues esos textos poéticos son resultado de una búsqueda obsesiva hasta la incandescencia.
Dios mismo te apoya en la batalla y ha nombrado a su Hijo como Guía de tu salvación. Él vivió y murió por ti; y vivirá y morirá contigo.
Lo espiritual está presente en todas sus obras. Y no es una presencia circunstancial, sino intencionada, meditada, creada aposta. Dios no es en él un recurso teatral, como en otros autores; es una realidad viviente.
Aunque la mayoría de la sociedad considere ahora de mala educación tratar de convertir a otras personas a tu sistema de creencias, en la universidad esto es esencialmente lo que todos tratan de hacer con determinación con otras personas.
El nuevo libro de Jaime Fernández Garrido, “Héroes desconocidos de la Biblia” nos presenta la vida de muchos personajes de las Escrituras que pasan desapercibidos. “Sin ellos, en muchas ocasiones, ni siquiera habría historia”, explica el escritor.
Las opiniones vertidas por nuestros colaboradores se realizan a nivel personal, pudiendo coincidir o no con la postura de la dirección de Protestante Digital.