Somos llamados a convertirnos en gente que tiene la vista puesta en la ciudad de Dios y en el mundo venidero.

Hay que entender que quien no ha amado en la Tierra, tampoco va a amar en el cielo.

Muchos eruditos de la Biblia se engañan cuando afirman que ésta presenta la imagen de un mundo físico copiada de los mitos mesopotámicos o egipcios.

Son muchas las ocasiones en las que el Señor nos pone a prueba. Nos vemos enredados en situaciones que nos producen mucho dolor y nos cuesta tomar una decisión correcta.

La imagen es una realidad gracias al telescopio espacial James Webb, el más potente jamás lanzado. Recoge un cúmulo de galaxias en color.

Le molestaba la luz, no había quien la apagase, era insoportable.

— ¿Tú estás tranquilo aquí, mientras sufren nuestros hermanos los condenados?

Solo cuatro de cada diez católicos y protestantes de las denominaciones históricas creen que la fe cristiana es el único camino al cielo.

Estaremos no solo ante un mundo realmente fascinante, sino y ante todo, estaremos para siempre con el Señor.

Así como el Padre envió al Hijo también nos envía para que continuemos lo que Él dejó.

Siempre Él arropándonos bajo sus alas protectoras, atrapando las saetas que vuelan directo hacia el corazón.

Quienes “mueren en el Señor”, cuando exhalen su último aliento aquí en la tierra, estarán insuflando en su plenitud la vida eterna.

Estas circunstancias nos hacen reconsiderar nuestro camino y desafía nuestro orgullo.

Sabemos todo sobre trivialidades, pero poco sobre una de las cosas que debería animarnos todos los días: nuestro futuro con el Señor.

Cielo y suelo se unen en Jesús. El Reino de los Cielos es también el Reino de los Suelos.

Aquellas fueron sus primeras navidades.

El universalismo no es una corriente esnobista o un producto de la teología liberal tal y como muchos piensan. Estuvo muy extendido entre los primeros cristianos hasta la imposición del Infierno como dogma indiscutible.

El debate del Infierno entre los primeros cristianos.

Esta vida es el preámbulo de todo cuanto nos aguarda.

Quiero resumir en 10 puntos algunas cosas que cualquier creyente debería saber sobre este tema.

El cristiano que no sabe a dónde va y no tiene una idea mínima de este lugar, fácilmente se deja embaucar por este mundo.

La Biblia nos habla más de la muerte y de lo que viene después de lo que nos imaginamos.

Durante el gobierno de Pilato solo ocurrió una eclipse lunar visible desde Jerusalén coincidiendo con la fiesta de la Pascua: el 3 de abril del año 33.

― Por poco me persuades a ser cristiano.