Pensamientos desde Galilea

1). ¡Vuelve a tu origen, Sangre!, ¡Vuelve a tu origen, Carne!

2). La cristiandad del mañana hará renacer la Teología del Ejemplo, cansada de tanto discurso medio muerto. ¿Tan difícil es lavar los pies del Otro? No se tornen espirituales de cruces imposibles. Esta será la frase que guíe tal nueva Misión: “Porque ejemplo os he dado para que, como yo he hecho, vosotros también hagáis”.

3). Nuestra heredad es tu tiempo, Jesús, peregrino a la intemperie cuya cicatriz pertenece a todas las razas.

4). No nombro al que yace sepultado: sí al que se diluyó en su propia sombra y, como Niño perdido de nuevo, persiste en donarnos su pequeña ternura para que varias veces seamos hermanos.

5). El dolor corrige al que dice no necesitar de Otro aliento.

6). Desea que te alumbre la luz lenta de su memoria.

7). Siempre es descalificador el dedo de perversos y malediscentes.

8). Tal como está, lo mejor sería desbautizar al mundo. Luego, tras circunvalar por otros vértigos, nos desdoblaremos en reinventadas habitaciones bautismales.

9). Revelar la inocencia, aquí o en otra parte.

10). Amar lo que se Ama es alzarse al futuro despreocupándose de geografías.

11). La excesiva pulcritud impide descender.

12). No creas que tu bandera es la más vistosa; no te jactes que tu fe es más genuina que la del otro.

13). ¡Desllena tu reloj, tiene demasiados minutos apresurados!

14). Hundiéndose en mi nacimiento está un sepulcro vacío.

15). Allí donde el relámpago llamea existe otro Edén que no ha caído.

16). Un espíritu gemelo cobijándose en mi osamenta verdadera.

17). Difícil la quietud perfecta o el sereno dominio. Pero es la meta para evitar desmoronamientos interiores.

18). En el vientre del silencio florece un precioso reino.

19). ¡El pájaro canta por el vergel herido!

20). Has vuelto porque nadie ha podido encarcelar tu Espíritu.

21). Los hechos responderán por mí.

22). Celebra las palabras que nacen del silencio y no del ruido que a diario afilan afuera. Así tus palabras dichas (o escritas) serán Palabra universal, trino que otros sabrán retener dentro de sí.

23). Mejor una sobredosis de sinceridad que un desborde de hipocresía.

24). ¿Abdicaste ante la obediencia ciega? Entonces prepárate para morar entre telarañas.

25). Sostén en alto tu bandera blanca: no importa que sigan tiroteando los indóciles.