Riley y Smith: la obra en Málaga

El mismo The Missionary Herald at Home and Abroad, Volumen 68, 1872, pág 16 matizaba el caso del maestro de escuela Julián Vargas, y considera la Segunda Reforma como uno de los capítulos más notables en la historia religiosa mundial. Dice:

“Un caso más trae la historia de este período oscuro hasta el umbral mismo de la Nueva Era en España. En la primavera de 1868, Julián Vargas, un joven maestro de escuela de Málaga, fue retenido y en junio fue sentenciado a prisión de 17 meses por el "delito" de tener en su posesión un Nuevo Testamento y algunos libros evangélicos. Amigos ofrecieron garantizar su fuga de la cárcel sobornando a los guardianes, pero prefirió sufrir penalidades que obtener su libertad por este medio. Sus perseguidores, sin embargo, tendrían la satisfacción de retenerlo por tiempo completo de prisión. En septiembre de 1868, tuvo lugar la Revolución; la Reina Isabel II fue destronada por el pueblo a quien ella había tiranizado y escandalizado. En junio de 1869, las Cortes Constituyentes votaron la nueva Constitución, que, en su artículo 21, garantiza la plena libertad religiosa, para nativos y extranjeros por igual.

Así, después de una noche de tres siglos, la segunda reforma amanece en España. La persecución, encarcelamiento y expulsión de Manuel Matamoros y sus fieles compañeros, era la hora más oscura de la noche que precede a la mañana que se acerca rápidamente; y tal vez no exagero al decir que el desarrollo de los acontecimientos en el progreso de esta reforma en los últimos tres años, constituye uno de los capítulos más notables en la historia de los movimientos religiosos en el mundo. 

“En Málaga, terreno mejor preparado por la propaganda de Matamoros, se instaló con poco fruto una capilla evangélica en la calle del Cerrojo”, y no dice más Menéndez Pelayo. Según Juan Struch⁽ⁱ⁾ respecto a Málaga no constan datos ciertos de la implantación formal de la iglesia hasta 1886. Si seguimos a Noyes⁽ⁱⁱ⁾ en marzo de 1880, el primer Sínodo de la Iglesia Reformada Episcopal Española se celebró en Sevilla, y contó con la presencia de delegados de las congregaciones en otras ciudades. Obispo Riley de México, que había visitado España, de acuerdo con una resolución de la Conferencia de Lambeth, presidió el Sínodo. La Iglesia Reformada se constituyó formalmente, y eligió al obispo electo (el Rev. JB Cabrera). A petición del Sínodo de Obispo Riley ordenó como diácono el Rev. J. Domínguez como Pastor de Málaga, donde había estado trabajando como ministro laico durante los últimos cuatro años.

El día de Navidad de este año el sur de España fue visitada por un fuerte terremoto. Se consideró más grave en Málaga, pero Sevilla también sufrió. Según Fliedner en “Cartas desde los sitios azotados por los terremotos de Andalucía escritas por un quídam, 1885” en Málaga hay dos congregaciones evangélicas y ellos fueron los encargados de repartir los donativos entre los hermanos en la fe damnificados. 

“El local donde se reunía una de estas congregaciones había sufrido tanto, que la utoridad ordenó en abandono inmediato de la casa, lo que significa para una pequña grey la falta de un local donde los fieles puedan celebrar su culto, más de una vez lo hemos sentifo dolorosamente en España. Mas lo que parecía ser una desgracia para esta iglesia que ha sufrido tanto, Dios lo convirtió en ganancia para ella; porque el socorro recibido de muchos amigos, especialmente de Inglaterra, les dio la posibilidad de volver a su local anterior, que a la vez está mejor situado y es más espacioso. Nos sirve de grato recuerdo la idea de que allí pudimos tomar parte en su gozo y sus acciones de gracias en la hora de sus cultos.

En la otra congregación, trabaja un hermanastro (Enrique Rodríguez Blanco) del un día célebre Manuel Matamoros… La congregación en la que trabaja hoy día su hermanastro, es más pequeña que la primera y se encuentra en una casa pobre de uno de los barrios bajos. La casa se ha resentido bastante por los movimientos terrestres, más por lo pronto quedó servible y la gente pudo seguir celebrando su culto en ella. Esperamos tener la satisfacción de poder ayudar también en Málaga a la reconstrucción de algunas casas de nuestros hermanos”.

En Sevilla también los terremotos afectaron a la iglesia de San Basilio y la vieja iglesia resultó herida de gravedad. Una de las galerías se separó de la pared y estaba en peligro de caer. La torre también fue duramente sacudida. Una suma considerable tuvo que ser gastada en reparaciones. 

Las bases generales de disciplina que habían sido previamente aceptadas por las congregaciones se han recibido y adoptado, habiéndose constituido formalmente la Iglesia Episcopal Española, y el Rev. Juan B. Cabrera fue elegido por unanimidad como obispo electo de la Iglesia Reformada. Hasta que el obispo electo fuese consagrado, el obispo Riley se ocupó de ejercer sus funciones episcopales en la Iglesia. Con esa autoridad, fue ordenado como diácono y después como presbítero, don Joaquín Domínguez de Villegas, como Pastor de Málaga. El señor Domínguez había sido educado en Inglaterra durante cinco años, y desde su regreso a España, cuatro años antes, había trabajado en Málaga, y les había dado verdadera prueba de su aptitud para el ministerio.

Hemos de notar que en este Sínodo⁽ⁱⁱⁱ⁾ se establecen las bases de la “Iglesia Española” en un “Reglamento General” aprobado por las iglesias de Madrid, Sevilla y Málaga. Una de las bases, era que “todas las congregaciones quedaban agrupadas en una sola diócesis, que se tituló de Madrid”

En 1877 llega a Málaga el que había sido pastor en Algeciras. Mr. W. Spriggs Smith. Hombre experimentado tendría que afrontar la virulencia que desataban las predicaciones hechas desde la catedral por el canónigo Lara, en el que usaría el lema ¡Mueran los protestantes!. Sin embargo la casa Misión se abriría de nuevo el 1 de julio de 1877 con el permiso del Gobernador y reuniría al primer culto unas cuarenta personas. Uno de los primeros deberes que tuvo Smith fue atender un capitán alemán que esta en el hospital gravemente enfermo de manera que no podía comunicarse con él. Una monja le preguntaría si oraría por el alma del difunto, a lo que Smith tuvo la oportunidad de que oraba por los vivos atendiéndoles espiritualmente pero que a los muertos solo había que enterrarlos con dignidad. El enterramiento de este alemán en el cementerio dedicado a los protestantes, visto su actual abandono, se lograse adecentar aquel lugar en el enterraban hasta animales.

Smith recibía muchas visitas, pero especialmente era ayudado por el capellán británico Rev. T. J. Scott, además del guardián de su iglesia el Sr. López. “En relación al trabajo espiritual desarrollado por el misionero en Rev. Scott decía: “Tiene buenas reuniones y la mayoría de la gente está con él. Yo administré la Santa Comunión el primer domingo de este mes a 30 personas. Su clases bíblicas son bien concurridas y la venta de Escrituras y otras publicaciones ha sido fomentada. También tiene interesantes clases de controversia. A una de ellas asistió un sacerdote en traje de paisano, un abogado, dos médicos y tres profesores. El sacerdote estaba ignorante de la Biblia, pero el abogado tenía un considerable conocimiento de ella. T terminaba su carta Scott: Nosotros encomendamos a Mr. Smith y su dificultoso pero alentador trabajo a la fuerte simpatía y oraciones de nuestros amigos y hermanos de Inglaterra.”

Otro de los colaboradores de Smith era la esposa, viuda de Pablo Sánchez Ruiz, fallecido en 1876. Era la maestra y profesora de Biblia, Amparo Sánchez, que ahora dependía del apoyo de la Sociedad de Ayuda a España y Portugal. En 1878 Smith quiso acabar sus estudios de Teología y se fue a Inglaterra ocupando su lugar el Sr. Joaquín Domínguez de Villegas, jóven español que había sido formado en Inglaterra y que ya había trabajado en Puerto de Santa María. En el London College of Divinity estaba para terminar sus estudios el joven Manuel Morán, que tendría que pasar la mili cuando viniera a España antes de ser misionero.

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  ⁽ⁱ⁾ Los protestantes españoles Volumen 7 de Colección "Sociología y pastoral" Serie "Estudios monográficos"Juan Estruch, Ed. Nova Terra, 1968

 ⁽ⁱⁱ⁾ Church Reform in Spain And Portugal. A Short History Of The Reformed Episcopal Churches Of Spain And Portugal, From 1868 To The Present Time. por H. E. Noyes, D.D., Hon. Chaplain To Her Majesty's Embassy, Paris. 1897

⁽ⁱⁱⁱ⁾ Contra vientos y mareas. Francisco Serrano. Clie 2000 pág. 234