El País ha publicado en su edición de este sábado un bochornoso artículo sobre el crecimiento de iglesias evangélicas en la zona de Carabanchel.
Para Saint-Exupery no hay más que una libertad. La que nos lleva a la búsqueda de Dios.
Existe una estrecha relación entre el aumento del deterioro de la salud mental en la sociedad española y la incertidumbre que se cierne sobre su vida y su futuro.
Unamuno está mundialmente considerado como uno de los más grandes pensadores del XIX y XX. En su vida y en su obra siempre mostró una honda preocupación por el hecho religioso.
“La vida de Jesús me ha impactado grandemente y trato de vivir cada día como él lo hizo. Es gracias a Dios que he conseguido cada pequeña cosa en mi vida”, cuenta el joven.
Poeta, dramaturgo, novelista, ensayista, guionista de televisión, polemista, hombre que fue de todo, Gala falleció el 28 de mayo de 2023.
El último capítulo de Don Quijote de la Mancha contiene enseñanzas sublimes sobre el paso del tiempo.
La peor forma de intolerancia, decía Unamuno, es la de aquellos que se creen dueños absolutos de la razón.
Enrique Sánchez Reyes afirma que Menéndez y Pelayo continúa y continuará siendo por mucho tiempo el autor de los Heterodoxos. Es su obra más conocida.
En colaboración con otros abogados decidió constituir Amnistía con la intención de combatir las violaciones de los derechos humanos en todos los rincones del mundo.
El ojo inexorable de Ibsen percibe la duplicidad de la naturaleza humana.
No hay ser tan vulnerable como el que está arriba, el líder, el dirigente, el consagrado.
Sabe, como pocos de sus contemporáneos, penetrar con sus escritos en las profundidades del alma humana, del alma española.
Existe una evidente desarmonía moral y religiosa en aquella persona que se porta piadosamente en el culto, ora con mucha unción, bendice el nombre de Dios, y en cuanto abandona el local de la Iglesia se dedica a perjudicar con la lengua a sus semejantes.
Huxley siguió paso a paso a sus contemporáneos desde el escepticismo de la posguerra hasta la angustia trágica de un mundo impersonal. En sus últimos años, hastiado de las religiones tradicionales, se volvió hacia la mística oriental en una nueva exploración del Absoluto.
La envidia es uno de los poquísimos pecados que no produce placer a quien lo comete. El envidioso no disfruta de nada. Al contrario, se mortifica a sí mismo.
Pensaba en la muerte como liberación de sus trastornos psíquicos, como el encuentro definitivo con su propia derrota.
Este tipo de gente no es de los que abandona la fe, no; dejan la congregación local y se van a otra, donde repiten la misma experiencia.
Hemos de admitir que el que Dios profesa al ser humano es un amor no merecido. Si le amamos, es porque Él nos amó primero. El de Él hacia nosotros es un amor no merecido.
Nadie más que Dios puede dar vida, color y perfume a las flores; pero el murmurador, en un instante, con sólo el poder de su lengua, las hace pedazos y las arroja al polvo.
El Principito es el libro más conocido de Saint-Exupery, el más leído. Aunque está dedicado a los niños y catalogado como un libro para niños, en realidad no corresponde a la literatura especialmente concebida para niños.
En todas las tierras el sol sale al amanecer, pero quien mucho, ve mucho retiene en el alma.
Maeztu escribe sobre tres mitos literarios españoles. Tres formas de concebir el amor. Sólo quienes viven el amor con semejante fuerza son capaces de olvidarse de sí mismos.
Árabes e israelitas podrían vivir juntos, conteniendo sus diferencias, pero musulmanes y hebreos lo tienen muy difícil.
La religión no es consecuencia de una idea que surge en el tiempo. Es un sentimiento sublime, arraigado en la profundidad del alma, envuelto en deslumbrantes resplandores de eternidad.
Si España es pagana, ¿quién tiene la culpa? Cuarenta años de Gobierno del general Franco los obispos españoles han tenido en sus manos todos los resortes del poder.
Las opiniones vertidas por nuestros colaboradores se realizan a nivel personal, pudiendo coincidir o no con la postura de la dirección de Protestante Digital.