El País ha publicado en su edición de este sábado un bochornoso artículo sobre el crecimiento de iglesias evangélicas en la zona de Carabanchel.
Nosotros, como cristianos, debemos responder a esta crisis con fe y sin miedo. Un artículo de Mark Oden.
Constantemente estamos bajo el influjo de las circunstancias, expuestos al dolor y a que un cambio de ritmo nos tire al suelo de forma irreversible.
El Salmo 91 ha infundido aliento y paz a millones de creyentes en el fuego de la prueba. Su mensaje es muy relevante a nuestra situación actual de epidemia.
La travesía puede tener oscilaciones, socavones, grietas, pero, mientras camino, descubro que no debo dejarme sabotear por las dificultades.
Lo que es importante en la vida es aquello que nos abre las puertas de la eternidad.
Únicamente deseo que permanezcas a mi lado. Que dejes fluir mi fe en medio de la desesperación.
Dios también es el Señor de los que pierden; él es también nuestro consuelo cuando todo parece ir mal.
Cada vez resulta más evidente que no nos fiamos de nadie, que acumulamos a las espaldas más y más decepciones que nos dejan en una especie de desazón continua, a la espera de cuándo llegará el siguiente golpe.
La cruz es la que nos salva, y no nuestros méritos.
En ocasiones, el orgullo y la excesiva confianza en uno mismo nos abocan directamente al fracaso y la deslealtad.
Temores, todos tenemos. La cuestión es qué hacemos con ellos.
Sé demasiado bien lo que creo, y tengo demasiado a buen recaudo “mi fiel tesoro”, como para denigrar a nadie ¡a absolutamente nadie!
Hasta aquí tu voz me confortó indicándome el camino a seguir, me mostró una senda diferente.
En cuanto uno de tus pies pise la orilla del río, las aguas serán abiertas. En el instante preciso que decidas cruzarlo, Él separará milagrosamente las aguas.
¿Soy realmente el reflejo de Dios o simplemente un insinuante brillo que se camufla entre los fuegos de artificio de este mundo?
¡Qué bueno es saber que viviendo en un mundo tan peligroso como el que vivimos, tenemos un escondite en el que estamos protegidos de las fuerzas que quieren destruirnos!
El discurso victimista ha hecho de Jones un monstruo, cuando fueron los miembros del Templo del Pueblo los que le convirtieron también en un dios.
Me siento tranquilo sabiendo que, no solo mi futuro, sino también toda mi vida está en las manos de Dios.
Según la Escritura, si tememos tanto al hombre, es porque tememos tan poco a Dios.
Los primeros, comparaban a los gigantes con ellos mismos, la batalla perdida comenzó en sus propias mentes. Los segundos, comparaban a los gigantes con el tamaño de su Dios, y allí, también en sus propias mentes comenzó la victoria
La clave de por qué el algoritmo humano fracasó estrepitosamente en la vida de José estriba en que hubo otro algoritmo superior.
Fue el mismo Jesús (Mateo 6: 5-8) el que señaló que la oración no era la repetición de fórmulas, ni el exhibicionismo en el culto, ni los aspavientos.
Invócale y Él te responderá. El que hizo el oído lo oirá.
Las simplificaciones excesivas nos alejan de una auténtica comprensión y nos dan una perspectiva distorsionada.
Él nos ayuda a ser diferentes, comprometidos, llenos de valor para defender lo que es justo y dependiendo siempre de las fuerzas que él nos da para no abandonar nunca.
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