El País ha publicado en su edición de este sábado un bochornoso artículo sobre el crecimiento de iglesias evangélicas en la zona de Carabanchel.
Daniel sabía relacionar la profecía de Balaam con las cosas que Dios le iba a revelar: el tiempo de la venida del Mesías.
En Pérgamo, todo el tinglado político-religioso del imperialismo idolátrico, con el que los nicolaítas querían fornicar, se desenmascara como "trono de Satanás".
Cuando aparece un Balaam (falso profeta) no está lejos un Balac (rey de la tierra, emperador) dispuesto a instrumentar su enseñanza.
La epístola de Judas para el siglo XXI.
Desde hace años, un número de iglesias evangélicas han experimentado importantes y acelerados cambios, ya sea por pura imitación o por deseo de novedad.
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