El País ha publicado en su edición de este sábado un bochornoso artículo sobre el crecimiento de iglesias evangélicas en la zona de Carabanchel.
La necesidad de desconectarnos una vez a la semana.
Las Escrituras muestran que desde el Pentecostés de Hechos 2 eso es fundamentalmente lo que el Espíritu está llevando a cabo en todo momento cuando empodera, capacita, purga y dirige a generación tras generación de pecadores a enfrentarse a la realidad de Dios.
¿Por qué se le denomina santo? Sin duda, la explicación es que su obra particular consiste en producir la santidad y el orden en todo lo que hace al aplicar la obra de salvación de Cristo.
Comprender que somos seres espirituales todo el tiempo nos permitirá buscar la dependencia constante de Dios a través de su Espíritu y no solo en momentos puntuales para acallar nuestras conciencias.
Cuando solo seguimos a personas, corremos el riesgo de caer en mecanismos sectarios e idolatría. Este libro nos enseña a buscar a Dios.
La idea de este escrito ha surgido en mí como consecuencia del último -en una amplia lista- desastre de iglesia dividida del que he tenido noticia.
Cuidar nuestro corazón es crear una atmósfera, un terreno saludable para que la Palabra de Dios y Su Espíritu entren y guarden nuestros pensamientos.
El 80% de las denuncias son contra miembros rasos de comunidades anglicanas. La cifra, dada a conocer en el sínodo general, se refiere tan solo al año 2016.
La autoridad impide el caos. Pero el exceso de ella hizo que la ira, la arrogancia y aun la brutalidad y el asesinato manchasen las páginas de la historia de la iglesia.
El “diotrefismo” ha pasado de ser una anomalía en la iglesia de Cristo a la norma predominante en muchas iglesias.
Hay una realidad universal que se da en todos los seres humanos; que describió el gran psiquiatra Viktor Frankl como “la presencia ignorada de Dios”
La bibliografía en torno a la obra de Gabriela Mistral es abultada. Los críticos han elevado a esta mujer mestiza hasta el areópago de la literatura.
No merece la pena militar bajo banderas sobre las cuales planea la sombra de la derrota; por eso es vital no equivocarse de enseña.
Una espiritualidad desencarnada, insolidaria y ajena a las preocupaciones mundanas, no es cristiana.
Hay acumuladores que pueden mirar al cielo mientras desprecian al prójimo al que dejan tirado.
En cuanto son conocedores de alguna opinión adversa se dirigen a quien la ha formulado para, en nombre de Dios, llamarle la atención.
Una definición bíblica de la iglesia.
La soberbia le cegaba un ojo y la devoción nublaba la vista de cuantos le seguían.
Un cristiano que habla como tal debería contribuir a la paz, expresarse con bondad, mansedumbre, no incendiando y propiciando la confrontación sino buscando el acercamiento.
La canción está inspirada en la segunda Oración de Gregorio Nacianceno, en la cual compara el árbol del jardín con la cruz de Cristo.
Margaret Clarkson escribió su primer himno a los doce años, y a lo largo de su vida llegó a publicar 17 libros en 7 idiomas.
Cuando el diálogo se convierte en un asunto de desobediencia.
Heber escribió El Hijo de Dios va a la lid considerando la vida cristiana como una lucha a la cual el cristiano es desafiado a participar hasta el punto del martirio.
Monroy sabe cómo adentrarse en lo más profundo del alma de los autores que estudia.
La cuarta estrofa de este himno suele ser omitida tanto en el original como en su traducción, está basada en Gálatas 6:14
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