El País ha publicado en su edición de este sábado un bochornoso artículo sobre el crecimiento de iglesias evangélicas en la zona de Carabanchel.
Nunca, hasta ahora, se había publicado un libro tan exhaustivo sobre un tiempo esencial y decisivo en la trayectoria de Dylan como este “Slow train coming. Bob Dylan y la cruz de Jesús”, de Ana Aréjula y Luis Lapuente.
La cultura popular, desde Dylan a Springsteen, se hace eco de las palabras de Jesús sobre la sal para conservar o dar sabor, y la luz para alumbrar en las tinieblas.
Uno de los profetas más desconocidos tenía un gran mensaje: Dios quería vivir en medio de su pueblo. La búsqueda de Dios, su compañía más cercana, acompaña a singulares artistas contemporáneos.
Las plagas que asolan la tierra levantan preguntas. Joel nos guía a buscar las respuestas, como han hecho muchas artistas inspirándose en las palabras de este profeta.
La poesía tiene la capacidad de expresar con palabras lo que de otra manera no seríamos capaces. La tristeza del profeta Jeremías ha inspirado a diversos artistas contemporáneos.
Seguimos recorriendo los pasajes de Isaías que han inspirado a artistas contemporáneos, incluidas las referencias del profeta a Lucifer, el diablo, y como estas han impregnado la cultura popular.
Se dice que un 75% de sus canciones aluden a la Biblia y se han publicado libros enteros para valorar esa inclinación tan marcada.
Algunos seguimos rogando a Dios por Bob, para que encuentre la paz que todavía no ha encontrado.
Suze vivía con su hermana y su madre en la misma casa donde una mujer albergaba a cantantes vagabundos de folk, como Bob. Él estaba loco por ella.
Un poema de Dylan Thomas, versión de Elizabeth Azcona Cranwell. (Selecciona Isabel Pavón)
De Noviembre de 1979 a Mayo de 1980 Dylan solo interpreta “gospel songs”.
Siempre chocante e impredecible, Dylan nunca dio un giro tan espectacular como su profunda inmersión en el cristianismo a finales de 1978.
En 1978 dio un giro a su vida y a su carrera, asumiendo una nueva identidad personal fruto de un “nuevo nacimiento”, y no dudó en confesar su fe cristiana.
Dylan se hace la pregunta que ocasionó discusiones por todo el planeta, pero que, lamentablemente, no amplió lo suficiente: “‘¿Son mis canciones literatura?’”
En una de las últimas biografías publicadas sobre el Nobel de Literatura se dice que Dylan no ha renunciado nunca a su fe en Jesús. Aunque las letras de algunas de sus canciones muestran una lucha espiritual.
El cantautor estadounidense ha ganado el Premio Nobel de Literatura 2016. La academia sueca destacó el aporte del artista a la música popular americana.
Estos días en el Village de Nueva York persigo las huellas que dejó Dylan en la nieve, bajo esa pálida luz de una tarde invernal, en una de las fotos más conocidas de los años 60.
Bob Dylan vuelve a España este verano. ¿Qué tiene su música para atraer ya a tres generaciones?, ¿qué ha sido de su fe tras su conversión al cristianismo en 1979?
Las opiniones vertidas por nuestros colaboradores se realizan a nivel personal, pudiendo coincidir o no con la postura de la dirección de Protestante Digital.