― Reseca, tiene usted la córnea muy reseca. ¿Abusa mucho de las pantallas?

Lo decisivo de todo esto es que se produzca en el hombre un vuelco del corazón a Dios.

Él decía para unas cosas que era Andrés y para otras que era José.

Y continúa mascullando palabras con no se sabe quién de no se sabe dónde.

Se trataba de la vacuna más efectiva existente, cuya virtud principal era que estaba exenta de efectos secundarios.

Ahora sí, ahora comparto mi amor con quien libremente me ha amado.

― Disculpe, señora, solo le queríamos ayudar.

Avisó al pueblo y no lo hizo al rey.

¡Hay quien habla de una segunda venida de aquel rey resucitado del primer siglo! ¿Cómo va a descansar tranquilo el poder? ¡Es que es imposible!

―  ¿Por qué festejan tanto? ¿Tú sientes que mereces algún reconocimiento?

¿Con qué Ester me quedo?

¿Por qué le tengo que explicar mis asuntos privados y él no me puede explicar los suyos?

¿Habrá otro, entre sí decía, más pobre y mísero que yo?

― Padre, es la primera vez que me confieso. ― No te preocupes hijo, verás que es sencillo. ¿Qué te trae?

― Te tendré por valiente al proteger lo que más amo, tú y nuestros hijos.

¿Falló su fe? ¿Un defecto del amor?

- Tan solo comeré la mitad de la mitad.

Ningún corazón de hijos y nietos fue indiferente a aquel testimonio del abuelo.

Despidieron al alcalde calificando de chistosa su participación.

El verdadero amor solo se podía proponer en términos de elección libre.

― ¿Alguien se ha identificado con el fariseo?

Eran más los que mejoraban con la desprescripción que con la prescripción.

Se presentó en una iglesia, donde se integró para seguir los pasos del más fiel de los creyentes.

El Dios de amor se complace con los que le aman.

No puede ser que vayas a la defensiva cuando lo que quieres es cumplir con una corrección social.