El País ha publicado en su edición de este sábado un bochornoso artículo sobre el crecimiento de iglesias evangélicas en la zona de Carabanchel.
El último libro nos habla de Jesucristo: al igual que tuvo la primera palabra, tendrá la última.
Esta carta confronta el engaño y a los engañadores que estaban dentro de la iglesia.
En el ministerio, la clave es servir, darnos a los demás.
Es importante que nos mantengamos buscando a Dios para evitar la falsedad.
Esta carta una y otra vez nos presenta la preeminencia del amor de Dios, un amor que quita todos los miedos.
Un Dios lleno de gracia prepara algo especial para nosotros en los cielos nuevos y la tierra nueva.
En un momento de terrible persecución, esta carta nos indica que el sufrimiento tiene fruto.
Esta carta nos desafía a vivir en la voluntad de Dios, no solo en la relación con Él sino también con los demás.
Poner los ojos en Jesús y seguirle es el secreto de la fe.
Esta carta nos enseña como se refleja el cuidado de Dios en la vida de los cristianos.
El mensaje de la carta es que aunque desistamos de nosotros mismos, Dios sigue trabajando para restaurarnos.
En esta carta Pablo habla sobre la importancia de ser fiel a Jesús hasta el final.
La clave en el ministerio es mantenernos fieles a Jesús y sus enseñanzas.
La segunda venida de Cristo da esperanza al creyente en medio del sufrimiento.
Cuando sabemos que Jesús va a volver y vivimos agradecidos, descubrimos la vida cristiana.
No podemos llamarnos cristianos si Jesús no ocupa el centro de nuestra vida.
Desde la cárcel, Pablo habla más que en ninguna otra carta de la alegría.
Disfrutamos de todas las bendiciones espirituales en la persona de Cristo.
Nuestra vida no depende de nuestras tradiciones o costumbres, sino de la dependencia de Dios.
Quien está en Cristo es una nueva persona. Dios sigue regalando su amor y trabajando para transformarnos.
Una iglesia en una situación complicada recibe un mensaje de restauración y amor.
Esta carta nos muestra el diseño del plan de salvación por el que somos perdonados bajo la gracia de Dios.
La primera iglesia no da ningún paso sin antes orar.
Este evangelio señala con claridad a Jesús como Dios hecho hombre.
Este evangelio nos muestra a Jesús con detalle, descrito por un investigador preciso.
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