La izquierda pierde su mayoría en Andalucía

Las elecciones autonómicas en Andalucía marcan un cambio histórico en la Autonomía, que tras 3 décadas, podría configurar una mayoría en la que el PSOE no pueda gobernar.

A pesar de haber ganado las elecciones, el PSOE liderado por Susana Díaz no mostraba ninguna satisfacción. La presidenta de la Comunidad expresaba su malestar “ante el avance de la extrema derecha”, en referencia a la aparición de Vox en el Parlamento andaluz.

Díaz hizo un llamado a la “responsabilidad” de los partidos constitucionalistas, y expresó su deseo de negociar con los líderes de las demás fuerzas políticas, con quienes dijo estar dispuesta a negociar para una formación de Gobierno.

En todas las provincias, excepto Almería (PP), el PSOE fue la formación más votada.

Difícil, sin embargo, lo tendrá Díaz para poder conseguir un gobierno. Su aliado natural, Adelante Andalucía (Unidos Podemos) pierde también escaños con respecto a su resultado de 2015, quedándose con 17. Sumados a los 33 del PSOE, se quedan lejos de los 55 necesarios para mayoría.

El portavoz de Unidos Podemos, Pablo Iglesias, se mostraba decepcionado con el resultado. “Hago un llamado a las fuerzas anticapitalistas, feministas, sindicados, LGTBI, y por los derechos, para detener al fascismo”, expresó desde Madrid.

EL PP PODRÍA LIDERAR UN CAMBIO DE GOBIERNO

El Partido Popular ha sido el segundo más votado en Andalucía. Con 26 escaños, la formación popular pierde siete escaños con respecto al resultado de 2015. Juanma Moreno se mostraba feliz con el resultado que “puede desbancar el monopolio” del PSOE en la Comunidad.

Una posible coalición de Vox, PP y Ciudadanos alcanzaría mayoría absoluta. / El Mundo

Los aliados naturales del PP en un posible gobierno serían Ciudadanos y Vox. En el caso de Ciudadanos, es el partido, de los que volvían a concurrir, que más ha crecido en escaños, al pasar de 9 a 21.

Su líder, Juan Marín, ha mostrado su intención también de liderar el gobierno defendiendo que el cambio “solo puede liderar un partido que crece, en el que los andaluces han depositado su confianza”.

La gran sorpresa de las elecciones ha sido Vox. El partido ha conseguido 12 escaños, un resultado muy superior al que se pronosticaba en las encuestas. El ex juez Francisco Serrano, candidato de Vox en Andalucía, se mostraba “agradecido” a todos los que les habían votado. “Ahora podremos mostrar a todos lo que somos, y no lo que dicen que somos”, expresaba el candidato.

UNAS ELECCIONES CON BAJA PARTICIPACIÓN

Una de las claves de los comicios ha sido la baja participación (un 41% de abstención). Tras una campaña que muchos definieron como insulsa y sin debates de gran profundidad, han sido los partidos tradicionales quienes más problemas han tenido para movilizar a su electorado.

Alta abstención en las elecciones: más de un 40% del electorado no ha expresado su voluntad por medio del voto.

Las lecturas en Andalucía también tendrán un alcance nacional, en un ambiente en el que el Gobierno actual tiene dificultades para aprobar sus presupuestos generales, lo que podría desembocar en unas elecciones a nivel estatal en los próximos meses.