García de Andoin defiende el pluralismo religioso

La importancia de la religión en el discurso político y su relación con la ciudadanía fue el tema de una conferencia impartida en Bilbao por el Coordinador Federal de Cristianos Socialistas del PSOE, Carlos García de Andoin, junto al teólogo Javier Victoria. Los conferenciantes destacaron el papel beneficioso de hacer una buena gestión del pluralismo religioso en la sociedad, lo que evita “derivas fundamentalistas”.

García de Andoin es director adjunto del gabinete del ministro de Presidencia, departamento que se encarga de las relaciones con la Iglesia católica. Ha destacado el papel preponderante de la religión en la actualidad, que ha “regresado” a la agenda política cuando hace algunos años se echaba a un lado. «Creíamos que la modernización iba a significar la secularizaciónde nuestras sociedades, pero nos ha sorprendido con la repolitización de la religión, con una vuelta de la religión a la vida pública», comentó.

El conferenciante insistió en la necesidad de una gestión inteligente de la situación de pluralismo religioso actual, «si quieren anticiparse a procesos de disgregación social, exclusión o derivas fundamentalistas». Estos extremismos son asuntos que deben prevenirse como prioridad, ante un mundo en el que el discurso radical ha ganado presencia, gracias a movimientos como Al Qaida. Ésta “legitima con argumentario religioso su estrategia de lucha sobre la base de un diagnóstico por el que el mundo occidental domina económica, política y culturalmente al mundo árabe». Una idea que los gobiernos occidentales pueden contradecir con una buena gestión del pluralismo.

Por otra parte, García de Andoin afirmó creer firmemente en el valor de la religión “para la formación de ciudadanos virtuosos, aquellos que, frente al individualismo, son capaces de integrar en su proyecto personal de vida el bien común, la solidaridad y la justicia».

PARTICIPACIÓN POLÍTICA
En cuanto a la participación de las religiones en la vida política, el conferenciante se mostró crítico hacia la actitud de la iglesia católica, que durante el primer mandato socialista se comportó “como el primer partido político de la oposición”. Un enfrentamiento que García de Andoin considera que se ha ido suavizando en los últimos años, aunque todavía critica la postura de la jerarquía católica en asuntos como el matrimonio homosexual o el aborto. En su opinión «no han ido acordes con la cultura de la deliberación democrática. La apelación a la ley natural ha servido para bloquear el diálogo y para negar legitimidad a los legítimos representantes de la ciudadanía», censura.

Esa tensión ha sido compleja para el objetivo de tender puentes entre el PSOE y el mundo cristiano. En ese contexto, García de Andoin, que advierte «un resurgir del neotradicionalismo católico», aboga por una «laicidad positiva y constitucional, un laicismo incluyente».

Javier Vitoria, por su parte, defendió una alianza entre política y teología que sea capaz de regenerar la vida pública «en favor de una universalidad de los derechos humanos, de la justicia y de la fraternidad». El catedrático de Cristología se mostró, sin embargo, pesimista ante la constatación de «una ciudadanía indolente, un catolicismo contrarreformista y el vasallaje de los gobernantes ante los mercados». Aún así, el teólogo vasco cree que «el cristianismo de Jesús, el genuino, puede aportar un impulso para cambiar la realidad y que los últimos dejen de serlo».