Los estudiantes, la pandemia y el futuro de la misión en las universidades

El británico Tim Adams es el nuevo secretario general de la Comunidad Internacional de Estudiantes Evangélicos (IFES por sus siglas en inglés). IFES reúne a más de 160 movimientos estudiantiles nacionales, entre ellos GBU España, que comparten el objetivo de “influir en la universidad, la iglesia y la sociedad para la gloria de Cristo”.

Después de 22 años de una dinámica participación en el liderazgo de IFES a diferentes niveles, Tim Adams ha conversado con Evangelical Focus sobre cuáles serán sus prioridades en su nuevo rol de liderazgo en la comunidad global de estudiantes evangélicos.

Pregunta: Tú también fuiste estudiante. ¿Qué recuerdas de tus años universitarios?

Respuesta: Estudié por primera vez a principios de los 90 en una universidad de Kent (Canterbury). Aunque procedía de una familia cristiana, salir de casa y ser de repente libre y tener que decidir por mi cuenta me pareció una situación de locos. Había muchas opciones. Recuerdo muy bien mi primer día en la universidad. Mi padre me dejó allí y por primera vez en mi vida tuve que establecerme como persona. Pero antes de que se fuera, fuimos a informarnos sobre la Unión Cristiana [Christian Union, el nombre con el que se conoce a los grupos de estudiantes cristianos en el Reino Unido]. En la primera tarde hubo un acto de bienvenida de la Unión Cristiana, una sesión de cine por la noche y empecé ya a formar parte de una comunidad.

No sé cómo habría sobrevivido si no hubiera tenido el ancla de este grupo en la universidad para fortalecer mi fe y arraigarme. En la zona de la residencia donde me encontraba no había otros cristianos y esto me obligó a ser más abierto sobre mi fe. Organicé un pequeño grupo de estudio bíblico en mi habitación, al que acudían otros estudiantes cristianos todas las semanas a una hora determinada. Eso me hizo ser muy consciente de lo que significa ser un testigo fiel en mi entorno directo, porque las personas que vivían cerca de mi habitación en la residencia se convirtieron en amigos. Yo era ‘el cristiano’ allí, así que tenía que ser capaz de explicar mi fe y vivir una vida digna del Evangelio. Claro está, los otros estudiantes en mi pasillo vivían sus vidas de forma totalmente diferente.

Los años de la CU fueron de mucho crecimiento personal en mi fe. En mi primer año me pidieron que me uniera al comité organizador. Participé en los debates y en las decisiones sobre las jornadas de evangelización, etc.. Yo era la persona que invitaba a los ponentes a venir, y cuando llegaban, me reunía con ellos, los llevaba a comer, charlábamos... Fue una gran oportunidad para conocer a los líderes de las iglesias locales y a cristianos venidos de otros lugares.

P: El liderazgo estudiantil es un valor  esencial de IFES. ¿Cómo puede la comunidad global seguir reforzando esta prioridad?

R: Tienes toda la razón. En IFES, el corazón de nuestro ministerio es equipar y capacitar a los estudiantes para que sean activos y vivan su fe en el campus. Los docentes enseñan y forman... Pero el verdadero testimonio lo dan los alumnos a sus compañeros.  

Los estudiantes son realmente los jugadores en el campo de fútbol, son los que juegan el partido por el Reino en la universidad. Los trabajadores locales (asesores) de los movimientos nacionales les apoyan en esta tarea, les animan, les aconsejan y les estimulan. Además, hay eventos de formación de líderes nacionales a los que los estudiantes pueden asistir, y nosotros, como comunidad global de IFES, estamos detrás apoyando a los movimientos nacionales.

La actual generación de estudiantes es la ‘generación conectada’, los nativos digitales, por lo que al principio de la pandemia fueron ellos los que se convirtieron en maestros, ideando muchas formas de continuar la comunión, el estudio de la Biblia y la evangelización online.

En el Reino Unido, por ejemplo, muchas Uniones Cristianas están teniendo sus jornadas de misión mediante eventos virtuales, y están viendo a otros estudiantes convertirse a Jesús.

[photo_footer]El nuevo secretario general de IFES, Tim Adams. / IFES[/photo_footer]

P: ¿Cómo deben comportarse los grupos de estudiantes y la iglesia, en general, en sociedades cada vez más pluralistas y polarizadas, en las que el cristianismo bíblico es una cosmovisión minoritaria?

R: La situación es diferente en cada país. El cristianismo sigue siendo una de las principales cosmovisiones en muchos lugares, pero debe coincidir con la forma de vivir nuestras vidas. En la mayoría de los países, puede haber una brecha de discipulado, una diferencia entre identificarse como cristiano y vivir como tal. Los que trabajamos en el ministerio estudiantil tenemos que asegurarnos que lo que enseñamos a nuestros alumnos es relevante, está relacionado con los problemas a los que se enfrentan y ayuda a cerrar esta brecha. 

En cuanto a las filosofías de vida, la oferta para los estudiantes es muy amplia. Creo que es importante que los estudiantes cristianos estén preparados para responder y entrar en conversación con estas otras formas de vida. Creemos que la fe marca la diferencia en lo que somos. No es sólo un conjunto de ideas. Esta generación tiene la oportunidad de demostrarlo.

[destacate]Los estudiantes son realmente los jugadores en el campo de fútbol, jugando el partido por el Reino en la universidad.[/destacate]Vivimos en una cultura cada vez más liberal y todo el mundo tiene derecho a tener la misma voz. Esto puede percibirse en cierto modo como una amenaza, especialmente en la Europa cristiana, donde estábamos acostumbrados a tener una ventaja que ya no tenemos.

Pero también es una oportunidad para defender el derecho a compartir lo que Dios ha hecho en nuestras vidas. Comienza con las últimas palabras de Jesús a sus discípulos antes de su ascensión, diciendo “id a Judea, a Samaria, a los confines del mundo, y sed mis testigos”. Este es nuestro trabajo en los campus, ser allí los testigos de Cristo.

P: En estos tiempos de pandemia de la Covid-19, parece que todo se ha vuelto online. ¿Cómo ser sal y luz en un contexto así?  

R: Creo que ahora es más difícil. Eso es lo que escucho de diferentes secretarios generales de grupos de IFES en todo el mundo. Les va bien en llegar a los estudiantes dentro de los grupos, incluyendo el trabajo de discipulado, los estudios bíblicos... Esas cosas están funcionando. Pero no es tan fácil invitar a otros.

Por supuesto, ser sal y luz significa cosas diferentes en lugares diferentes. Si hablas con alumnos de África, te dirán que la corrupción sigue siendo un gran problema en sus vidas, en sus sociedades y en sus universidades, y que quieren hablar de ello. La iniciativa ‘Logos y Cosmos’ es otro ejemplo. Ayuda a los estudiantes a reflexionar sobre cuestiones de ciencia y fe.

Hay muchas maneras de ser sal y luz. Vivir de una manera que demuestre nuestro amor, nuestro cuidado y preocupación por los demás y por un mundo que está pasando por un momento tan difícil, es siempre una luz para los que nos rodean.

P: ¿Tiene el IFES una estrategia sobre el uso de las nuevas tecnologías para crear sinergias entre los movimientos estudiantiles de diferentes países?

R: Sí. Estamos desarrollando una plataforma para comunidades online. Uno de los puntos fuertes de IFES es nuestra amplia red y queremos hacer mucho más para poner en contacto a la gente de la pastoral estudiantil, para que puedan compartir recursos, consejos y animarse mutuamente.

P: Los misiólogos hablan de la creciente influencia del cristianismo en el Sur Global. ¿Cómo se ve esto dentro del mundo estudiantil? 

R: En términos de números, muchos de los mayores movimientos de IFES están en el Sur, pero IFES siempre ha sido un lugar donde cada movimiento nacional es reconocido por su contribución única. Nuestro primer secretario general, Stacey Woods, era australiano. Después de él han ocupado la responsabilidad, Chua Wee Hian, singapurense, Lindsay Brown, galés, y Daniel Bourdanné, de Chad.

Todos estamos condicionados por nuestro contexto y cultura, y nuestra comprensión de Dios y del Evangelio está condicionada y limitada por nuestra perspectiva subjetiva. En los últimos años, lugares como Etiopía y Kenia han visto como un gran número de estudiantes se convertían.

Pero, aunque el centro de gravedad de la iglesia mundial se ha desplazado hacia el Sur Global, muchas de las estructuras de poder, incluidas las canciones de adoración y los libros cristianos más populares, siguen procediendo de los lugares con más dinero. Si esto sigue así, todos estamos perdiendo.

[destacate]Tratamos de ser intencionales, escuchando diferentes partes de la iglesia global y permitiendo que las perspectivas culturales nos enriquezcan.[/destacate]En los eventos y publicaciones de IFES hemos tratado de ser intencionales, escuchando diferentes partes de la iglesia global y permitiendo que estas otras perspectivas culturales enriquezcan y mejoren nuestra propia comprensión. Las conferencias de nuestra Asamblea Mundial en 2019, y publicaciones como ‘IFES Word & World’, son un buen ejemplo de cómo intentamos hacerlo.

Hay una pasión, un entusiasmo y un optimismo en el movimiento estudiantil del Sur Global que contrasta con el pesimismo que a veces se observa en Europa. Desde luego, en Europa y América del Norte existen retos en torno al derecho a poder compartir nuestra fe con la gente y a la presencia de grupos en los campus que podrían explicar este estado de ánimo. Pero es alentador contar con el dinamismo de otros movimientos en su testimonio.

[photo_footer]Un grupo de estudiantes evangélicos en Vanuatu. / IFES[/photo_footer]

P: Hablando de Europa, ¿cuáles deberían ser las prioridades aquí en los campus secularizados?

R: Una de las cosas que no cambiará bajo mi liderazgo es que estamos llamados a ser testigos de Cristo en los campus y fuera de ellos. Antes teníamos un lema: “Estudiantes alcanzando a estudiantes”. Este sigue siendo nuestro principal objetivo: que los alumnos sean capaces de explicar el Evangelio, justificar su fe y relacionar la fe en Jesús con los temas que están viendo en sus estudios.

El evangelismo y el testimonio deben seguir siendo una prioridad, incluso cuando es difícil. Así como desarrollar discípulos, equipar a los estudiantes para que incluso después de salir de la universidad estén preparados para vivir una vida de testimonio cristiano en sus profesiones y en sus sociedades.

Muchas organizaciones cristianas tienen una visión similar a la nuestra, todos queremos impactar en la iglesia y en la sociedad para la gloria de Cristo.

[destacate]Orad por los desafíos de salud mental y ansiedad que enfrentan muchos estudiantes.[/destacate]En los últimos años hemos visto cómo Dios animaba a los movimientos estudiantiles a tener un impulso de crecimiento, a establecer grupos en nuevas ciudades donde no había habido presencia antes. Tuvimos una iniciativa llamada ‘Abriendo nuevos caminos’, en la que capacitamos a personas que querían ser pioneras de nuevos grupos, e incluso ofrecimos pequeñas ayudas para levantar las barreras que les impedían hacerlo. En el futuro, debemos seguir ampliando nuestro alcance, asegurándonos de tener un testimonio vibrante en todos los campus universitarios de nuestros países.

Y otra prioridad para mí es construir ministerios que duren. Eso significa que tenemos buenas líneas de liderazgo. Tenemos que trabajar por la sostenibilidad, en lugar de crear una burbuja de entusiasmo en torno a algo durante uno o dos años, y luego dejarlo morir. Necesitamos estructuras que ayuden a los ministerios a durar mucho tiempo.

P: Este crecimiento puede incluir también a los graduados. ¿Crees que IFES seguirá desarrollando este ministerio entre los jóvenes profesionales?

R: Sí, en los últimos años hemos investigado con nuestros movimientos nacionales las áreas de necesidad. El ministerio de los graduados era uno de ellos.

Tras la graduación, en esos primeros años de tu carrera, tu fe llega a la primera línea. Por ello, es importante equipar a las personas en sus diferentes entornos profesionales y en las cuestiones éticas que encontrarán en el lugar de trabajo. Queremos que esta formación sea más accesible para más personas en más países.

P: Por último, ¿cómo puede la gente de todo el mundo orar por ti emn este nuevo rol?

R: ¡Tenemos muchas peticiones de oración! Una de ellas es la situación de los estudiantes en todo el mundo. Nos estamos dando cuenta de los problemas de salud mental y de ansiedad a los que se enfrentan muchos de ellos. Todo tiene que ver con la cuestión de cómo van a continuar en sus estudios cuando han sido interrumpidos tan bruscamente durante el último año. Pero también, en cuanto a sus perspectivas profesionales futuras y cómo será el intento de encontrar trabajo una vez terminados los estudios. La combinación de estas preocupaciones ejerce una gran presión sobre los estudiantes. Orad por ellos. Orad también por los movimientos estudiantiles nacionales que intentan desarrollar recursos para ayudarles en este contexto.

Orad por IFES, hemos tenido una transición de liderazgo y ha llevado un poco más de tiempo del que esperábamos. Ahora estamos empezando a articular el marco de nuestra visión y prioridades para el resto de esta década. Hasta 2020, nuestro marco de visión se llamaba ‘Piedras vivas’, y hemos visto que nuestros movimientos nacionales se han fortalecido de forma organizativa, y ha habido un mayor enfoque en la evangelización, lo cual ha sido bueno.

Mientras empezamos a desarrollar y a poner en marcha nuestra visión y nuestras prioridades para la próxima década, agradecería mucho las oraciones de la gente. Para que escuchemos la voz de Dios y para que seamos audaces en los objetivos que nos proponemos. Oremos para que la visión pueda ser un medio para unificar esta increíble red de 160 movimientos nacionales que la componen y las iniciativas en 20 países más.

Y, como he dicho antes, la cuestión del liderazgo estudiantil es un punto de oración importante para muchos movimientos de IFES. Los estudiantes suelen formarse entre 3 y 5 años, por lo que cada año, entre el 20% y el 33% de los miembros de nuestros grupos terminan su involucración, y entra una nueva generación de alumnos. Mientras que los grupos de estudiantes cristianos han podido continuar gran parte de su ministerio online, algunos movimientos de IFES me han dicho que es muy difícil conocer realmente a los nuevos alumnos e identificar a los líderes de los próximos años. ¡Este es un gran tema de oración!

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