Los domingos 8 y 15 de noviembre, cristianos de todo el mundo se unen para participar del Día Internacional de Oración por la Iglesia Perseguida (DIDO 2020). La iniciativa, promovida por la Alianza Evangélica y Puertas Abiertas, “es una oportunidad única para que juntos, como familia en Cristo, nos unamos a interceder por nuestros hermanos que se enfrentan a la persecución por su fe”, explican los organizadores.

A causa de la situación de confinamiento, no son muchas las iglesias que, como otros años, han podido organizar una reunión presencial. Sin embargo, la explosión de oración en plataformas digitales está permitiendo una mayor interacción y la oportunidad de realizar más actividades a lo largo de la semana.

De esta forma, desde Puertas Abiertas España están realizando una jornada de oración diaria a través de su Facebook y Youtube, a las 21 horas, en las que se invita a orar pensando en los cristianos que más sufren persecución en la actualidad.

Además, tanto de forma individual como desde las iglesias, se proporcionan recursos para llevar a cabo la actividad, que puede adaptarse a un formato online.

La importancia de la oración

En entrevista con Protestante Digital, Ted Blake, director de Puertas Abiertas España, explicó cómo la situación de pandemia está afectando de forma directa a la situación de los cristianos perseguidos, azotados no solo por la falta de libertad sino también por la pobreza o las dificultades para acceder a recursos de salud.

“Es importante que todos nos unamos por aquellos que más sufren. En este momento millones de cristianos pasan dificultades y necesitan el poder de Dios para seguir adelante”, explicó Ted Blake.

Las personas perseguidas están en diversos lugares del mundo. En lugares donde hay regímenes autoritarios, o la imposición de religiones excluyentes como el Islam o el hinduismo, miles de cristianos sufren restricciones que van desde situaciones religiosas a laborales o de educación.

“La persecución sigue aumentando, es tremendo”, reflexiona Ted Blake, haciendo referencia al incremento que se refleja en la Lista Mundial de Persecución que cada año publica Puertas Abiertas.

La pandemia acrecienta la persecución

La pandemia también está afectando a la labor en defensa de los perseguidos. “Por una parte vemos lo positivo, que es que gracias al desarrollo tecnológico hemos podido mantener un contacto más regular a través de llamadas o videoconferencias con cristianos perseguidos”, explica Blake. Pero “para los cristianos perseguidos en general la pandemia está significando más problemas, sobre todo porque muchos de ellos son tremendamente pobres y necesitan trabajar para poder comer cada día”. Esto está llevando a que muchas personas necesiten ahora una atención primaria con alimentos o medicamentos.

Además, ha habido lugares donde se ha “aprovechado el confinamiento para atacar a los cristianos o a edificios de los cristianos”.

Para Ted Blake es clave que la iglesia se movilice para orar, pero también para poder poner el tema de los cristianos perseguidos en la agenda de gobiernos y entidades internacionales. 

“La oración es muy importante. Podemos ver como en el Nuevo Testamento los cristianos oran unos por otros. Tenemos que orar por los cristianos perseguidos porque somos parte del mismo cuerpo, y ellos necesitan saber que no están solos”, concluye el director de Puertas Abiertas. 

DIDO 2020 en marcha

Esta semana se están desarrollando reuniones virtuales de oración en los canales de Facebook y Youtube de Puertas Abiertas. Para el domingo 15 de noviembre se está preparando un evento especial, a las 21 horas, que cerrará la semana de oración.

Desde la organización se recuerda a iglesias que todavía están a tiempo de participar, uniéndose u organizando un evento de oración para la iglesia local. Desde la web habilitada para la DIDO 2020 se puede acceder a más información.