Evangélicos en Paraguay preocupados por la grave crisis política

Tres entidades evangélicas en Paraguay han mostrado su preocupación por la “crisis política nacional” que ha tenido su punto álgido este fin de semana, con disturbios en el Parlamento y la muerte de Rodrigo Quintana, joven opositor del Partido Liberal Radical, durante una operación policial.

“Expresamos nuestra profunda preocupación y pesar por el enfrentamiento tan violento entre hermanos que se da en el ámbito político y se suma a todos los sectores de la ciudadanía”, expresan en un comunicado la Asociación de Iglesias Evangélicas de Paraguay (ASIEP), la Asociación de Pastores Evangélicos de Paraguay (APEP) y Parlamento & Fe.

“La justicia debe imperar”, continúa el comunicado. “Paraguay debe conducirse al amparo del estado de derecho, que se expresa en el respeto irrestricto de las leyes por encima de los intereses sectarios y particulares, y por tanto al apartarse nuestros Gobernantes de esta conducta, vemos con dolor la anarquía y el caos resultante”.

CRÍTICOS CON LA ENMIENDA

Desde las entidades evangélicas se rechaza “toda conducta que viole las leyes establecidas, la Constitución Nacional, y quiebre el estado de derecho”. Así, se manifiestan críticos con la enmienda que permitiría la reelección presidencial, algo que la Constitución actual no permite y que ha sido objeto de debate político en las últimas semanas.

La modificación de la ley, sin contar con la participación de la oposición y con disposiciones especiales poco claras, provocó una reacción inmediata en las calles, con ataques violentos al Congreso Nacional y la posterior intervención policial.

En el comunicado, las entidades evangélicas hacen “un llamado vehemente a todos los habitantes de nuestra Nación, hoy llena de crispación, y de manera especial a nuestras autoridades nacionales (…) a una profunda reflexión y a revertir actitudes que llevan a la violencia y a poder estrechar nuestras diferencias en el marco del respeto, la paz y la armonía”.

Asimismo, convocaron al pueblo cristiano “a ayunar y orar por nuestra querida Nación pidiendo paz, cordura y sabiduría”.